20 + 1 (CL-HOT)

Cliente: C0491

–Aquí tienes– dejó la llave en el tocador –dijo que puedes ponerte cómoda, que llegará un poco tarde.

– ¿Otra vez?– sonreí al imaginármelo, seguro sentado en la sala de su casa viendo el partido de futbol de Real Madrid vs Barcelona – ¿por qué pide cita cuando sabe que hay partido?– sonreí al igual que Eddy.

–Ese chico prefiere un partido de fútbol a cualquier otra cosa– asentí y me levanté de la silla – ¿quieres que te acompañe?– preguntó ladeando la cabeza ligeramente a la izquierda.

–Si, por favor– salimos de mi habitación y caminamos hacia la de él.

Durante el camino platicamos de todo un poco, sobre mi cita de mañana con el ginecólogo y de la agenda de la próxima semana. Platicamos de su familia, de las noticias sobre mis clientes, no me di cuenta cuando llegamos a la puerta de la habitación.

–Nos vemos mañana Cielo, que descanses– se despidió alegremente mientras caminaba de regreso por dónde venimos.

–Igualmente– le dije antes de abrir la puerta de la habitación.

Su habitación estaba decorada como la de cualquier adolescente, paredes pintadas de azul y blanco, decoración deportiva en las paredes, fotos de él y su banda ganando premios, una que otra almohada con formas diferentes de balones y pelotas, una guitarra. Una mesa al centro de la habitación, en ella un florero vacío por el momento, porque cada vez que él me visitaba traía consigo un hermoso ramo de flores.

–No tiene agua– dije tomándolo y dirigiéndome al baño, abrí la llave y lo llené. Aproveché para lavarme la cara – ¡maldita sea!– grité cuando vi que mi pijama se mojó.

Se preguntaran para que la pijama ¿verdad? bueno, déjenme decirles. En la última cita él me dijo que quería amanecer conmigo, así que solicitó que esta cita fuera más larga para poder dormir y despertar juntos. Llevaba puesta una pijama de 2 piezas las cuales eran una blusa de tirantes y un short corto, ambos en seda color rosa pastel mi favorita pensé quitándome la blusa mojada y el sostén para dejarlos en la silla que estaba cerca del buró. Mi ropa interior era de encaje en color blanco.

– ¿A qué hora terminará ese partido?– caminé por todo la habitación tratando de entretenerme en algo.

Su padre es un ex futbolista y entrenador de la liga K Daejun, por lo que su gusto por el fútbol se debe a que toda su vida ha escuchado sobre ello. A mi cliente le gustan mucho los deportes, hace mucho ejercicio; lo cual le agradezco, tiene un magnifico y bien trabajado cuerpo, su abdomen perfectamente marcado me hace suspirar cada vez que lo veo sin camisa. Es como un Dios griego, sus exquisitos gruesos y rosas labios que dibujan una encantadora y tierna sonrisa blanca, su suave piel, cabello y cejas oscuras, una mirada versátil que puede ser tierna, sexy, juguetona, dominante y alegre al mismo tiempo; su voz... su masculina, gruesa y alegre voz que me hace vibrar al escucharlo. Es un cliente que aprecio mucho, tenemos la misma edad y nos llevamos muy bien. Además de que con todo lo que ya les dije ¿ustedes no estarían felices de tenerlo como parte del trabajo?

Con él mi nombre es Lolis, y aunque parezca increíble, en esta ocasión si sé porque es. Él me contó que así se llama su primer amor, la conoció cuando acompañaba a su padre a las canchas de futbol, ella es la hija de uno de sus compañeros. Cuando la vio fue amor a primera vista, pero por azares del destino fueron separados desde hace 3 años cuando el padre de ella la envió a estados unidos a estudiar. Desde entonces no han hablado, ni un mensaje, ni una llamada, ni siquiera un correo; la alejaron de él sin la oportunidad de poder confesar sus sentimientos por ella. Por eso me llama Lolis, dice que está practicando para cuando la vuelva a ver, de esa manera podrá confesarle todo. Es una hermosa historia que la verdad me conmovió. Él es un buen chico, es atento, caballeroso, responsable, gentil y sobre todo honesto; esa chica tiene suerte de tener a alguien como él esperándola. Se preguntarán entonces ¿qué hace contigo? Pues lo mismo le pregunté y nunca se me olvidará lo que me contestó "Eres la sustituta, no lo digo de mala forma. Pero contigo puedo ser yo así como era con ella, contigo puedo hacer las cosas que quisiera hacer con ella, contigo puedo aprender y luego aplicarlo con ella". Tiene lógica su pensamiento ¿no?, digo es hombre y tiene necesidades, pero al menos piensa en ella. Eso es bueno ¿no?