Cuento Dibujado

Caminando por el bosque - Parte 2

Camine por allí, con Eri, dando saltitos de alegría. ¡Por fin estaba allí! ¡Que bien!

Observe todo con curiosidad. Era el bosque más hermoso que había visto. Allí todo te hacia sentir vivo. Los árboles, y la hierba, resplandecían con un fuerte verde, y los rayos del sol caían sobre sus hojas, haciéndolas notar resplandecientes.

Había toda clase de flores, plantas, incluso animales, que no había visto en su vida, ni siquiera en los libros. Era como un mundo nuevo y fantástico, que tenía que ser descubierto.

De repente, oí unos ligeros pasos. Curiosa, fui a ver de quien era.

Era de una niña, que parecía tener más o menos mi edad, con el pelo largo y negro, y con un trenza atada con un lazo rojo. Tenia un vestido precioso. Era de color verde por arriba, con lazos del mismo color abajo del pecho y por el final de sus mangas, y un tono rojo anaranjado por abajo. Calzaba unas bailarinas negras, que remarcaban un poco más sus pasos.
Tenia un gato negro como acompañante. Un lazo violeta rodeaba su cuello, mientras caminaba junto con su ama.

Mire al chica y al gato alegre, y Eri lo mismo. ¡Que gran casualidad, una chica y un gato paseando! ¡Podría hacer nuevos amigos en este bosque!

Fui corriendo hacía ella, y le dije un "¡Hola!" con mucha alegría. Ella se giro y me miró sorprendida. Quizás... ¿no se esperaba a ver a alguien más por allí?
Pero después sonrió.

-Ho... Hola...- me dijo tímidamente

-¡¡Holaa!! ¡¡Me alegro de ver a alguien por aquí!! ¿Cómo te llamas? ¿De donde eres? ¿Que haces por aquí? ¿Sabias que tienes un lindo gatito?- le pregunte rápidamente por la emoción.

Ella me miró, nerviosa, sin saber que responder.
Creo que no debería haber sido tan precipitada. ¡Seré tonta!

-Lo siento, es que estoy muy ilusionada. No me esperaba encontrar a alguien aquí.-

-Yo tampoco...- me dijo con una sonrisa.

Eri se acercó al gato negro alegre, y le maulló con una sonrisa. El gato nuevo le correspondió con otro amable maullido.

Nos sentamos la chica y yo en el césped a hablar, mientras Eri y el gato de la chica jugaban.

La chica se llamaba Ana. Y si, tenia la misma edad que yo. Su gato se llamaba Lia, y también era una hembra.
Ella, a diferencia que yo, según me contó, ya estuvo en el bosque más de una vez. Muchas veces. Me dijo que solía estar mucho allí, y se sentía como en su casa.

-Si, se siente muy bien aquí...- dije, con una sonrisa, mirando arriba al cielo.

Ana me observaba con una sonrisa.

-¿Quieres que te muestre más cosas de este bosque?-

-¡Claro, estaría encantada!-

Me cogió de la mano y camino junto a mi, mientras los gatos nos seguían a nuestro paso.

Me enseñó los nombres de las flores que nunca vi, los animales que nunca escuche, los lugares que nunca descubrí. Lo mire todo con sorpresa y alegría, de la mano de Ana.

-¡Ana, esto es genial!- exclamé ilusionada.

-Me alegro de que te guste.- me dijo con una agradable.- Ven, te quiero enseñar más.-

-¡Vale!- Mire al cielo.

¡Dios mio, ya se iba a hacer de noche! ¿Pero cuanto tiempo pase allí? ¡Me tenía que ir ya, o no podría volver jamás!

Ana me miró, confusa a mi reacción.

-¿Pasa algo...?-

-Ah yo... Lo siento, pero me tengo que ir. Sino, quizás no pueda volver nunca.- llame a Eri para que viniera.- Tranquila, ¡seguro que nos vemos mañana!-

-Yo...-

Me fui corriendo. Verdaderamente no quería hacerlo, pero era la única manera, sino, no volvería a ver aquel maravilloso bosque, ni a Ana, ni a Lia. Tanto a mi como a Eri nos daba pena dejarlas, pero sabíamos que volveríamos mañana...

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Espero que os haya gustado la segunda parte de "Caminando por el Jardín"
¿Creéis que puedo mejorar algo? ¿Consejos? Cualquier cosa siempre siempre me vale. Estoy aquí para aprender, para disfrutar, y que vosotros, mis queridos lectores, disfrutéis.
Ya casi va a acabar el curso, a menos aquí, y ya solo tengo un examen :3 ¿Vosotros que tal? ¿Los lleváis bien? ¡Espero que si! ^^