Esencia Azul

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Estaba ahí, parado en medio de la estela azul que caía sobre él. Los recuerdos le embriagaban lentamente, llenando cada espacio de su mente. Pensamientos le llegaban y era inacapaz de acabar con ellos.
La estela azul crecía a su alrededor. No podía hacer nada, aquello era más poderoso de lo que simplemente podría llegar a manejar.
Contó todo lo que vivió y se sintió tranquilo. Ahí estaba una vieja amiga que mucho buscó en la juventud. Aquella que comparaba con lo negro y la oscuridad que impregnaba su cuarto al momento de marcharse la incandescente luz del foco.
El bosque le dedicó una mirada lenta, sopesando los pensamientos del hombre y guardándolos en los troncos secos que aguardaban en lo oscuro de su mente.
Se dejó vencer. La respiración cesó.
Los doctores dictaminaron la muerte en sólo segundos. El hombre que yacía en la cama soñando con aquel bosque de esencia azul, no era más que un cuerpo.
Un cuerpo inhabitado por un alma.
Un alma perdida en el bosque.

Corazones Desesperados ®Donde viven las historias. Descúbrelo ahora