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¡Santas vacas sí que vale la pena!
Me tomó un día completo decidir enviarle una solicitud a su perfil, a las nueve de la noche en punto me decidí por enviársela, sin pensar en ninguna consecuencia.
Las horas transcurrieron, y yo intenté concentrarme en cualquier otra cosa, ayudándole a mamá a cocinar algunos postres, a pesar de que la realidad era que todos mis intentos de ayudar resultaron un fracaso, porque yo apestaba en la cocina. Una bandeja con pastel de carne quemada me observaba con odio puro, miré a mi madre y sonreí en su dirección a modo de disculpa.
—Sí, —mi madre tomó la bandeja con guantes de cocina, y la dejó sobre la estufa. —En definitiva creo que eres mejor leyendo y escribiendo tus historias locas, April, ese es tu don.
Creo que intentaba decirme que apestaba como chef amablemente.
La medianoche se hizo presente y James aún no respondía a la solicitud de amistad, pero me obligué mentalmente para no comenzar a ponerme nerviosa; quizás él no había entrado aún a su cuenta.
No podía dormir de sólo pensar en esos preciosos ojos verdes, los cuales se marcaban perfectamente en sus fotos de perfil.
Quizás me robé un par de fotos. No era ilegal ¿cierto?
Y qué decir de esos carnosos labios que me estaban volviendo loca, esa sonrisa suya tan blanca y alineada iluminaba su rostro, llenándolo de vida.
De pronto mi móvil comenzó a vibrar, anunciando que tenía alguna notificación. Abrí la aplicación de Facebook, y mi corazón comenzó a latir con fuerza, mientras que una gran sonrisa de tonta se plantaba en mis labios.
"James Nichols ha aceptado tu solicitud de amistad".
¡April: 1- Mala suerte: 0!
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Manual: Conquistando a mi Crush {EDITADO}
Teen FictionSus ojos me observaron por unos nano segundos, creí que por fin se había percatado de que me gustaba, así que intenté ser más discreta y bajé la mirada durante un momento, pero cuando volví a subirla tras unos minutos después; sólo para apreciar su...