Capítulo III

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Dorian se sentó al frente de Jules para imponer a su autoridad. La miro directo a sus grandes ojos turquesa y preguntó -¿podrías contarme que sucedió la noche que asesinaron a Kate?

-ya les he dicho todo lo que sé -respondió a secas.

El detective vio que Jules tenía un libro de a su lado; "La Niña de las Tinieblas" de Laird Koenig -¿veo que te gusta leer? ¿Prefieres la literatura inglesa?

-me gustan las tragedias -dijo.

-lo mejor de todo es releer las historias, ello nos da muchas veces otras perspectivas de la historia. El caso del Lince, aun no me queda claro. Es por ello, que lo he releído muchas veces. Por eso quisiera que me contaras nuevamente la historia, tú historia, Jules Reynolds.

-¿y qué perspectivas tiene ahora, después de más de dos años sin capturar al asesino? - recrimino la joven.

-debes saber qué hacemos todo lo posible por capturar a quien quiera que este cometiendo todos los asesinatos.

Jules empezó a contar la historia de nuevo, ante la mirada inquisidora del agente quien no le aparto ni un segundo los ojos de encima y atento a cada palabra y expresión de la joven.

Al finalizar su relato la joven inclino un poco la cabeza hacia un lado y mordió su labio interior, el joven detective se quedó embelesado con el gesto sugerente.

-¿el joven que salió es tu novio? -pregunto mundano.

-¿le molestaría que lo fuera... ...Putin?

-¿Cómo sabes mi apellido?

-lo vi en su placa.

-ya veo. ¡Eres fascinante! -exclamó con una sonrisa.

Jules junto sus piernas y las subió al sofá donde estaba sentada luego se acomodó sobre sus pantorrillas, acción que hizo que la falda que traía puesta mostrara más de lo que debía. Dorian enmudeció por unos instantes, y de imprevisto apareció un gato blanco, quien salto a sus brazos, esta era muy parecida a Angela, la gata de la famosa aplicación. El susto hizo que el detective se levantara rápidamente de su asiento soltando al gato tan pronto este se lanzó sobre él.

-¿asustado? -pregunto Jules.

-¿ese gato, dónde lo conseguiste?

-es gata, se llama Angela, y fue hace dos años, Sebastián me lo regalo.

-¿Quién es Sebastián? - inquirió.

-Mi amigo. Era quien estaba conmigo hasta que usted nos interrumpió.
-Dime su dirección enseguida -El detective noto una nueva arista en este entramado de misterios- debo hablar con él -le señalo a la joven.

Jules le escribió su dirección en una nota y acompaño al detective hasta su vehículo, se despidió de él sin quitarle la mirada en ningún momento.
Dorian reviso la nota mientras manejaba y noto con espanto que al reverso decía que no debía buscar lo que no se había perdido. Frase que se desvaneció al poco tiempo. El agente sonrió y acelero la marcha, estaba seguro de que iba en el camino correcto.

Are You Talking Angela?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora