Capítulo 9: Nos vamos

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El sol entraba por la habitación de cierto castaño dándole en sus ojos y obligándole a despertar.

Aioros: Dios, maldito sol -se levantó de la cama para echar la larga cortina la cual impidió que los rayos del sol entraran en esa gran habitación, se giro para volver a la cama y en ese momento vio que Shura no estaba en la cama, comenzó a asustarse hasta que escuchó un ruido que provenía del baño, se acercó lentamente y allí vio a Shura con las manos apoyadas en el retrete vomitando- Shuri, amor ¿estás bien?

Shura: Si, no te preocupes, será algo que he comido, jeje -aunque decía eso, por dentro sabía que no era así-.

Aioros: ¿Seguro?

Shura: Si, no te preocupes.

Aioros: Preferiría llamar al doctor.

Shura: De verdad Aioros, mejoraré si descanso un poco.

Aioros: De acuerdo, voy un momento a por algo para bajar tus vómitos.

Shura: Vale, gracias -el moreno salió del baño dejando solo a Shura- ya le diré otro día que hay alguien más -dijo frotándose la barriga-.

***

En otro lugar Milo no dejaba de moverse, estaba teniendo una pesadilla y como día anteriores Camus lo despertaba y lo abrazaba.

Camus: Milo tranquilo, yo no voy a volverte a dejar solo, yo estoy aquí contigo.

Milo: Lo sé pero aún así -dijo abrigándose en el pecho del pelituquesa- Camus...¿puedo pedirte un favor?

Camus: Dime.

Milo: El tío que me esclavizo lo hizo también con unos amigos míos, soltó a tres de ellos los cuales han conseguido a dueños amables que los tratan por igual, me gustaría ir a contarles lo que está ocurriendo.

Camus: Claro, vamos a desayunar y después de prepararnos nos vamos.

Milo: Ok, gracias.

Camus: Ah Milo.

Milo: ¿Qué?

Camus: Estás más gordito.

Milo: Perdona, si tú lo único que quieres es que yo coma.

Camus: Jeje, pero así estás aún más hermoso -se levantaron de la cama y fueron a desayunar-.

***

Desde el día en que Mü se convirtió en el esclavo de Kanon, esté hacía cualquier cosa que se le ocurría con su cuerpo. Su piel ya no era igual de suave, su mirada ya no tenía ese hermoso brillo del que antes eran dueños, su hermosa sonrisa parecía que nunca había estado en esa cara, la única razón por la cual seguía sonriendo era por su hermano al cual no había visto desde el día que se fue con Afrodita. La esperanza de ser rescatado había desaparecido como su virginidad, a la fuerza de la forma más cruel.

Ese día gracia a los dioses Kanon había salido por lo cual Mü podía estar tranquilo aunque fuera unas horas, cambio las sábanas para limpiar toda la sangre y el semen de la noche anterior. Al terminar se dirigió a la ducha que era lo único que Kanon le permitía hacer todas las veces que quisiera, y limpió toda la suciedad de la que era posesora su cuerpo.

Kiki miraba la puerta de la habitación que compartía con Afrodita desde su cama, desde la cama contraría el mayor lo miraba atentamente.

Kiki: Dita, ¿no puedo ir a ver a mi hermano?

Afrodita: No puedes pequeño -en ese momento la puerta se abrió y por ella entró Death- ¿amor qué ocurre? -preguntó al ver que este cerraba la puerta con pestillo tras él-.

Death: Ven al baño, tengo que decirte una cosa -dijo muy serio- hola enano -dijo acariciando la cabeza de Kiki y tras eso se encerró con Dita en el baño-.

Afrodita: ¿Qué ocurre?

Death: Saga, quiere ir a donde están viviendo Shura y Shaka.

Afrodita: ¡¿Qué?!

Death: Lo escuché antes hablando de eso, creo que quiere volver a tener a uno de los dos bajo su control.

Afrodita: No...si lo hace, todo volverá al principio Death, no puedo soportarlo.

Death: Tengo una idea, pero sería muy arriesgada.

Afrodita: ¿Qué estás pensando?

Death: Creo que Saga irá esta tarde, si consigue lo que quiere, nada más que venga te lo contaré.

Afrodita: De acuerdo -se besaron y tras eso salieron del baño, el de cáncer se fue de la habitación y el de piscis se sentó al lado del pequeño-.

En la habitación de Kanon este entraba con unas bolsas en la mano.

Kanon: Mü ven aquí tengo un regalito para ti -el pelilila apareció del cuarto baño y se puso delante de este- te estabas dando un baño.

Mü: Sí, y he cambiado las sábanas anoche la manche.

Kanon: Muy bien -dijo acariciándole el pelo- levanta la cabeza -al hacerlo le quitó el collar y le puso otro de color rojo mucho más cómodo y suave que el que llevaba antes- estás guapísimo.

Mü: Gracias amo -dijo mirando hacia abajo- no es por ser maleducado pero, ¿por qué ha tardado tanto?

Kanon: He ido a un sitio con mi hermano, ¿me echabas de menos?

Mü: Si.

Kanon: Jeje, quítate la ropa vamos a probar tu collar nuevo y estas esposas -con tan solo desamarrar cuerda que usaba el menor de cinturón y sacarse los hombros el vestido bajo hasta sus pies por la delgadez que tenía- tus muñecas -se las enseño y este le puso en cada muñeca unas muñequeras del mismo tejido del collar-.

Se lo llevó a la cama y le ató las muñecas a dos cadenas que habían en el cabezal de la cama y comienzo a besar el cuerpo de este como si de chocolate se tratara, acompañado de los gemidos del otro.

***

Saga arrastraba a Shura por sus pasillos y este intentando soltarse se hacía daño de las muñecas.

Saga: Vamos Shura, no echabas de menos esto.

Shura: Cuando Aioros sepa que me has secuestrado vendrá a por mí y acabará contigo.

Saga: JAJAJA, tú secuestrado, JAJAJA -lo atrajo hacia él y le cogió de la barbilla- yo solo he recogido la basura de la calle.

Shura: Maldito, aquí la única basura eres tú, Aioros vendrá a por mí.

Saga: Pues que venga, tendrá que enfrentarse a mí y ahora ¡camina!

Esas voces llegaron al de cáncer el cual apretó muy enfadado sus puños, haría su plan. Fue hacia habitación de su novio y tras llamar de una manera especial su novio le abrió.

Death: Cierra la puerta Dita -su novio cerró la puerta con seguro-.

Afrodita: ¿Que ocurre Death?

Death: El maldito de Saga ha secuestrado a Shura.

Afrodita: No...

Death: Recoge tus cosas, nos vamos de aquí.

Afrodita: ¿Qué?

Death: Ese idiota cada día está más loco, me mandó que dejara a Milo en mitad del bosque.

Afrodita: ¿¡Qué!? Milo... -dijo llorando-.

Death: Pero lo deje en un sitio en el cual vi llegar a dos chicos, se veían buena gente.

Afrodita: Vale...

Kiki: ¿Dita qué ocurre?

Death: Nos vamos de aquí.

Continuará...

Encadenados (Saint Seiya)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora