El chico del supermercado.
Me desperté gracias al despertador. Se me había olvidado apagarlo. Me senté en la cama mirando hacia un zapato.
-Interesante el zapato, ¿no?
-¡Ah!-grité como si mi vida dependiera de eso-¿Que haces aquí? ¿Como es que entraste?
-Dios, Isabel, tienes que tranquilizarte. Tampoco soy tan feo. Si lo olvidas, entré ya que soy tu mejor amigo casi tu hermano y el "hijo adoptivo" de tu madre.-dijo haciendo comillas.
-Tonto, casi me da un infarto. Ya sal de mi habitación.-dije tirándole una almohada.
Alex rió y salió de mi habitación. Yo entré a bañar, me vestí...y salí de mi habitacion.
-Good Morning People!-saludé.
-Aquí está tu desayuno.-dijo mi mamá poniendo un plato de desayuno al frente mío.
-Gracias.-le sonreí y comencé a comer-¿Donde está Alex?
-Lavándose las manos.-dijo.
-¿Dijeron algo sobre mí? -preguntó saliendo del baño.
-No.-dije.
-Chicos, acompañenme al supermercado.-dijo mi madre.
-Esta bien.-dijimos los dos al unísono.
Luego de lavar mi plato, me lavé las manos y salimos.
-Yo pido al frente.-dijimos los dos a la vez y corrimos hacia el auto.
-Yo voy al frente.-dije desafiante.
-Yo soy mayor.-dijo de igual forma.
-Solo por dos años, no te da el derecho.-dije.
-Chicos ya. Isabel, deja a Alex al frente, cuando estemos de regreso tu podras ir al frente.-dijo.
-Esta bien.-suspiré.
Alex, antes de montarse en el auto, me sacó la lengua.
-Inmaduro.-susurré.
-Te escuché.-dijo.
-Esa era la idea.-dije mirándolo mal.
El solo rió. En verdad parecía mi hermano. Yo solo decidí ponerme mis auriculares y escuchar música a todo volumen. En ese momento y justo cuando llegamos al supermercado, me entra una notificación. La abro y no lo podía creer.
-Alex,-dije tapando mi boca para no gritar-One Direction va a dar concierto aquí en dos meses.-dije emocionada.
-¡No puede ser!-dijo volteandose-Dejame ver.-dijo y yo le pasé mi celular-Omg! ¡Si! ¡One Direction dará concierto aquí!-dijo emocionado.
Luego nos bajamos aún que no se nos pasaba la emocion. ¿Saben que es qué One Direction vendrá a dar concierto? Dios mio, moriré. Seguimos a mi mamá por todo el supermercado. Ella tomaba lo que hacía falta y nosotros por otra parte íbamos hablando del concierto al que probablemente asistiremos. Finalmente, hicimos la fila para pagar. Cada vez íbamos acercándonos más hasta que vi algo que llamó mi atención por comoleto. No algo, si no alguien.
-¿Te estás fijando en lo mismo que yo?-preguntó Alex.
-Cállate y disimula.-dije en susurró.
El chico al parecer trabajaba en el supermercado. Cuando fue nuestro turno de pagar, el chico empacó todo en bolsas y las metió al carro de compras. Cuando metió la ultima bolsa, se dio cuenta de mi presencia. Me puse algo nerviosa. Bueno, que digo algo nerviosa, me puse completamente nerviosa. Se me olvidó hasta hablar. Ese chico era hermoso. El sonrió. Esa sonrisa que enamora a cualquiera. Hasta a ti - dijo mi conciencia. Negué con la cabeza quitándome esa idea loca de la cabeza. Le sonreí de vuelta y luego Alex tomó el carro de compras y nos dirigimos al auto. Luego de llegar a casa, ayudamos a mi madre a acomodar lo que había comprado en la cocina y luego fuimos al parque que quedaba cerca del centro comercial y de la heladería. Luego de dar un par de vueltas, decidimos ir a comprar helado.
-Deme uno de chocolate y otro de fresa.-dijo Alex al señor de los helados.
Luego de haberlos pagado, nos sentamos. Estabamos hablando plácidamente hasta que ya no tuvimos tema de conversación y no nos quedó más que mirar por la ventana, pero allí lo vi, el chico del supermercado. Los árboles estaban verdes, los niños eran niños y...ay Dios a quien engaño, no podía dejar de mirarlo. Era hermoso. Tenía esa única sonrisa que vuelve loca a cualquiera.
-Mira, allí esta el chico del supermercado.-dijo Alex-Es lindo. Que conste que yo lo vi primero en el supermercado.
-¿Que pasa si no es gay?-pregunté desafiante.
-En ese caso todo tuyo.-dijo.
Yo reí. Decidimos acercarnos un poco. El estaba hablando por teléfono, se veía algo sonriente. ¿y si tiene novia? - preguntó mi conciencia.
-Ya cállate, ¿quieres?-le dije frustrada.
-¿Que pasaría si alguien, sin querer, chocará con él? -preguntó Alex.
-¿Te atreverías?-pregunté.
-Claro, y lo sabes.-dijo y se paró.
No puede ser. Alex le falta un tornillo. Alex sacó su celular, haciéndose el distraído y "sin querer" chocó con el chico del supermercado. Vi como hablaban. Esto no podía ser. Definitivamente mi mejor amigo estaba loco. Decidí sacar mi celular. Luego de un rato vi como se acercaban hacía mi. Levanté la vista y pude ver como su hermosa sonrisa brillaba en su rostro al verme.
-Isabel, el es Zabdiel. Zabdiel, ella es Isabel.-Alex nos presentó.
-Hola, mucho gusto.-me levanté y sonreí.
-El gusto es mío.-sonrió.
-Oigan, ¿que dicen si nos vamos debajo de ese árbol? Digo, para conocernos.-propuso Alex.
-Claro.-dijimos Zabdiel y yo.
Nos sentamos debajo de un gran árbol y comenzamos a hablar.
-¿Cuantos años tienen?-preguntó Zabdiel.
-Yo tengo 14.-dije.
-Yo tengo 16.-dijo Alex.
-¿Cuantos años tienes tú?-pregunté.
-Yo tengo 15.-dijo y sonrió.
Este chico definitivamente me quería matar con esa sonrisa. Luego de hablar un rato, Zabdiel se tuvo que ir y nosotros decidimos volver a casa.
-¿Te quedarás?-pregunté.
-No. Mamá me llamó, debo volver a casa.-dijo Alex.
-Esta bien.-dije.
-Ya me voy. Me despides de mami Marie. Te Quiero enana.-dijo dándome un beso en la mejilla y luego se fue.
Yo entré con una sonrisa inexplicable en mi cara.
-Isabel, ¿vas a comer?-preguntó mi madre.
-Si.-suspiré.
-¿Estas bien Isabel?-preguntó mi madre.
-Si.-suspiré.
Comí y subí a mi habitación. Me bañé, me vestí y luego fui a mi escritorio y comencé a dibujar. Terminé mi dibujo y luego me fui a dormir...
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You&I - Zabdiel De Jesús {Pausada Temporalmente}
Fanfiction"Después de la tempestad viene la calma" Creo que esa frase es la que le aplica a esta historia, porque a pesar de tantas altas y bajas, todo tiene una solución.