El instituto

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Ya por fin era lunes. Todos tenían que ir al instituto. Estaban esperando en la entrada a que sonara el timbre para ir a clase. En ese momento vieron que llegaba Adrien en su limusina.

Adrien: (puf, que pocas ganas tengo de estar aquí, por mí me iba a mi casa y seguía durmiendo ...).

Nino: hey, tío! ¿Qué hay? ¿Cómo pasaste el fin de semana?

Adrien: bueno... estuve estudiando y haciendo los deberes...

Nino: ¡pues yo estuve probando un nuevo videojuego que me compré el sábado!

Adrien: ¡Qué guay! jajaja

Marinette: míralo! ¡Ahí está!

Alya: ya ... si lo veo... jajaja

Marinette: es tan guapo...

Alya: acércate y habla con él!

Marinette: no puedo!

Alya: si quieres voy contigo!

Marinette: no, es igual ...

Alya: esta chica ... siempre está igual ...

En la escalera de la entrada, aparte, se sentaba Nathaniel dibujando en su cuaderno. Adrien se dio cuenta de ello y decidió acercarse a él.

Nino: Adrien, a dónde vas?

Adrien: voy a hablar con Nathaniel.

Nino: vale ... (¿por qué le ha dado ahora por hablar tanto con él? xD)

Adrien: buenos días! *sonríe*.

Nathaniel: ... bu-buenos días ...

Adrien: otra vez dibujando?

Nathaniel: si ...

Adrien: jajaja, como no ... que dibujas?

Nathaniel: mis sentimientos...

Adrien: ¿puedo ver?

Nathaniel: como quieras...

Adrien vio nuevamente su cuaderno y se encontró con dibujos totalmente abstractos, que claramente él no los entendía.

Adrien: ... como mola!

Nathaniel: no tienes ni idea de lo que he dibujado, verdad?

Adrien: eee... pues la verdad es que no ... jeje

Nathaniel: *ríe levemente*.

Adrien: *se sonroja* (pero por qué demonios vuelvo a tener la misma sensación que en la fiesta?)

Alya: míralos, desde el día de la fiesta están todo el rato juntos y parecen llevarse muy bien... (además, se ven tan lindos juntos ...!)

Marinette: ojalá yo tuviera esa misma suerte ...

Alya: no te preocupes, algún día tú también la tendrás ...

Marinette: espero que tengas razón ...

Alya: que sí mujer ...

Sonó el timbre y todos se fueron a clase y se sentaron en sus sitios. Luego pasaron las tres primeras horas, el recreo y más tarde, la antepenúltima y la penúltima. Ya solo les quedaba la última hora que era la de ciudadanía.

Profesora: atención! Me gustaría informarles de que tienen que hacer un trabajo de ciudadanía para la semana que viene, y se hace por parejas, pero os dejo que escojáis vosotros.

Todos: vale!

Marinette: tú te pones conmigo, no Alya?

Alya: pues claroo! La duda ofendee!

De la amistad al amor Donde viven las historias. Descúbrelo ahora