No sabemos quién de los dos morirá antes.
Helena fue quién encontró a Elliot. Tirado en el suelo, había intentado caminar y las articulaciones le habían fallado.
Tras la caída, su corazón le había traicionado y había dejado de funcionar.
Mi dulce bebé había encontrado muerto a su hermano. ¿Es que el mundo quiere ver caer a mi familia?
Helena se sentó a su lado, agarró su mano y cuidó del cuerpo inmóvil de Elliot por una hora. ¿Por qué una niña de 11 años tuvo que vivir eso?
Dan y yo lloramos y gritamos el nombre de nuestro hijo, pero eso no nos lo iba a devolver.
Es devastador perder a un hijo. Es devastador saber que lo ibas a perder pero no haber podido prepararte, porque, ¿cómo te preparas para despedirte de tu hijo?
El funeral fue dos días más tarde. Metieron la cajita de 1 metro 60 en el agujero y se acercaron con palas para echar tierra. Dan y yo no les dejamos, queríamos hacerlo nosotros.
La tierra caía inundada sobre el ataúd, y no estaba lloviendo.
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Elliot tenía cáncer
Short StoryHistoria muy corta. Estamos casi muertos Elliot, tanto, que me parece oler cuerpos en descomposición. Aviso: No quiero herir a nadie, yo no estoy famirializada justo con esta enfermedad, pero si que sé lo que es perder a alguien, así que no pretendo...
