Capítulo 33.

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Kaia se despertó. Estaba durmiendo en aquella nave, se peinó un poco y fue junto a Anakin, que se encargaba de pilotar la nave.

-Buenos días. -Le dijo él.-

-Buenos días. -Comentó ella mientras se inclinaba a darle un pequeño beso.- ¿Alguna novedad?

-Aún no...

-Ya, claro... -Ella bufó.-

-¿Qué ocurre, chulita?

-Pues ocurre que llevamos tres meses en esta maldita nave buscando a Yoda, y que estamos tan cerca de encontrarle como de acabar con el Emperador. -Bufó.- Se me agota la paciencia, Ani...

-Cariño, algún día todo esto acabará, y seremos una familia, con Luke y Leia. -Le aseguró él mientras sonreía.-

-Algún día es mucho tiempo... -Suspiró.- Anakin, podríamos irnos. Tan sólo tú y yo. Buscar a nuestros hijos e irnos lejos, muy lejos. -Kaia le tomó la mano.-

-¿Y dónde iríamos? Correríamos peligro desde el momento en que nos marchásemos, y no podemos abandonar, ¡hay miles de personas esperándonos para rebelarse contra el Imperio! No podemos olvidarnos de ellos...

-¿Y qué haremos? ¿Seguir dando vueltas estúpidas por la galaxia buscando a alguien que ni siquiera sabemos si está vivo mientras el Emperador se hace más y más fuerte?

-Kaia, hemos hecho cosas más difíciles. -Dijo él, poniendo una mano sobre su muslo en señal de apoyo.- Todo saldrá bien...

-¿Cómo puedes prometerme eso, Anakin? -Suspiró.- Siempre sabes darme esperanzas, pero ahora estás en la misma situación que yo...

-No sé cómo lo haremos, pero lo haremos. Nada se nos ha resistido, te prometo que esto no será lo primero. -Comentó él y miró al frente.- Oh no, creo que tenemos problemas...

-¿Qué pasa? -Se preocupó Kaia.-

-No lo sé... Los sistemas indican que tenemos un fallo en los motores.

-¿Qué tipo de fallo?

-No lo sé ¿vale? -Dijo él alterado.- Deberíamos aterrizar y comprobar que todo esté en orden.

-¿Y dónde propones que aterricemos? -Kaia se cruzó de brazos.-

-Allí. -Anakin señaló el planeta que tenían justo en frente.-

El antiguo Jedi viró los controles hasta llegar a la superficie del cercano planeta. Por lo que parecía, habían aterrizado en una zona húmeda.

-¿Dónde estamos? -Le preguntó Anakin a Kaia.-

-Los sensores indican que nos encontramos a 50.250 años luz del núcleo, en el sector Sluis, en Dagobah. Tiene atmósfera respirable, y un sólo sol. -Contestó ella.-

-Entonces será mejor que vayamos fuera, revisaré los motores. -Explicó el muchacho.-

Kaia abrió la compuerta y bajó de la nave sin prestar mucha atención. Cuando se dio cuenta, había caído a un pantano poco profundo.

-Genial... -Susurró ella irónica.- Anakin, ¿puedes ayudarme?

El chico estaba en la orilla, y aunque el pantano era poco profundo, el barro y las piedras le impedía salir de allí.

-Claro, chulita. -Él la cargó sobre su hombro y la llevó hasta suelo firme.-

-Con que me dieras la mano bastaba... -Añadió ella levantando una ceja.-

La Dama Gris | Anakin SkywalkerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora