Capítulo 16: ¿Cuñadrastro?

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Capítulo dedicado a : @Bri_Perez98 . Gracias linda por leer mi nove!



-Kai la verdad... no se que decirte- dijo mi amiga, que sin mas siguió comiendo.


Rodé los ojos siguiendo con mi comida. No podia dejar de pensar en que por un lado Abraham sea mi predicción. Pero por el bien de mi mente, mejor no pensar en eso y disfrutar un poco.


-Ahora que lo pienso- Jessi me mira para verificar algo- Nunca me hablaste de ese tal... Abraham. Dime, ¿Quién es?


Buena pregunta...


¿Quién es Abraham Mateo?



-Solo te puedo decir que la primera vez que lo vi, termine en el suelo- se ríe a carcajadas y se atraganta con la comida, lo que provoca que empiece a tocer. Me incline en mi aciento hacia delante y le puse la mano en la espalda dándole golpecitos. Eso hace que pare de tocer.


Se frota su garganta para sacar el dolor y sonrie.


-¿Estas diciendo que te tropezaste con él?- toma de su bebida y lanza una risita- No sabía que eras torpe.

Negue con la cabeza repetidas veces.

De solo recordar como sucedió hasta para mi suena a novela. Osea, vieron cuando la protagonista sale a pasear o esta en un lugar haciendo algo o desconcentrada y termina chocando con su príncipe azul. Bueno, no es mi caso.


¿Por qué? Porque Abraham no me ayudo a levantarme. Que caballero...


-No, es que el muy idiota tropezo o estaba desconcentrado nose.- un mesero se acerco a la mesa y llevo los platos. Se veia joven, hasta diría que es de nuestra misma edad. Rubio, ojos color marrón oscuro, de estatura mediana. Muy guapo.

Jessi parecía hipnotizada por aquel chico porque no le sacaba los ojos de ensima, el rubio se dio cuenta y le sonrio pero se marcho.


-Es tan...sexy- dijo mi amiga, suspirando y mirando hacia el techo.




Adolescentes.

Yo también lo soy, pero no de las hormonales.

- Ve a hablarle- dije para animarla. Me miro y se notaba los nervios en su rostro.



-No, no, no. No. No. No- repetía.

Aunque Jessi sea de las locas, rebeldes hasta un poquito sin verguenza. Había momentos en lo que no se animaba a hablar con chicos por temor al "rechazo". Si, exacto. Odia con todo su alma el rechazo, por una cuestión personal que aún no me lo había dicho, pero le dije que se tomara su tiempo.

- Jessi si no lo intentas, lo haré yo- dije levantandome, sentí un agarre en mi brazo por la mano de Jessi que me fulminaba con la mirada.


-¡No! Él es mio. Abraham el tuyo- dijo dirijiendose hacia la barra del restaurante.


Me reía yo misma. ¿Abraham el mio? Pfff... eso pasaría cuando los cerdos vuelen.

Mi celular vibró en el bolsillo de mi abrigo. Lo agarré, al mirar a la pantalla no pude evitar sonreír. Abraham me estaba llamando. Sin rodeos, atendi.


- Hola Kaily. - escuche su respiración- ¿Cómo estas?



- Hola, si estoy bien.- frunci el ceño.- ¿Sucede algo?


-Si. Necesito que vengas a mi casa- dijo y mi confusión crecio.

- ¿Por qué? - pregunte algo cortante. Pude escuchar como bufaba.


-Solo ven.- ordenó - Te mando la dirección por mensaje. Nos vemos- corto la llamada.


Aparte mi celular de mi oreja y diriji mi mirada a Jessi que hacia el intento de coquetear al rubio. Sonreí cuando vi que el chico le entrego un papel. Jessi se despidió y vino hacia mi.


- ¿Te dio su número? - pregunte mirandola picara, subiendo y bajando las cejas.

Jessi negó con la cabeza.



- Es la cuenta de lo que debemos por la comida- reí a carcajadas como loca y Jessi me miraba mal.

Deje de reír cuando sonó el tono de mensajes. Abrí Whatsapp y tenía la dirección. Jessi saltaba como una loca y se tapaba la boca para evitar gritar fuerte. La mire extraña y me tendió el papel en su mano, que con lapicera estaba el número del rubio de ojos oscuros.

[···]



- Me duelen los pies - se queja Jessi por décima vez. Desde que pagamos la cuenta, salimos del restaurante, nos pusimos en marcha a la casa de Abraham, no paraba de quejarse. Pero no es mi culpa que llevara tacones.

-Lo siento Jess pero tú querías venir asi que te aguantas- cuestionó con voz firme.


Seguimos caminando hasta la dirección que me había mandado y veo que ya llegamos. Es una casa bonita, chiquita y con unos detalles enmarcados en la puerta.

Jess levantó los pulgares en aprobación y reí por ello.

- Que ganas de conocer a mi cuñadrastro - dijo acercándose a la puerta.


- ¿Cuñadrastro? - pregunte sin entender.


Ella me miro entre-cerrando los ojos.


- Yo te consideró mi hermana y lo sabes ¿No?- asenti- Bueno se me ocurrio que ese nombre porque no soy tu hermana de sangre y suena como decir hermanastra, padrastro, madastra. Y como soy la mas genia del universo, se me ocurrio la palabra Cuñado junto a drastro. Formando Cuñadrastro.-Explicó pero creo que ya me había dormido.

Ella chasquea los dedos y me señala la puerta. Se me había olvidado la razón por la cual estabamos aquí.

Tocó el timbre que resuena en el interior. Cuando menos me lo espero Abraham abre la puerta. Va vestido *foto multimedia*. Me quede mirandolo fijo a los ojos pero el rompe mi contacto visual, hablando.

-Hola.- saluda- Me alegra que allas... - se detiene al ver a Jessica.


- Ah, si. Abraham ella es mi mejor amiga, Jessica Murray- la señaló- Jess él es Abraham Mateo, mi nadie- lo señaló y él ríe.

Linda risita.

Se saludan y entramos. Nos sentamos en el sofá de un rojo intenso como la cortina del lugar donde está Urnes.


-¿Para qué me pediste que viniera?- pregunte para que valla directo al punto.

Se rasco la nuca nervioso y suspiro derrotado.


- Martin sabe que entraste a su casa. Sabe que tu eres Geldi.

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Como se daran cuenta...Eh Vuelto!!!

*-*

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SHIRLEY♡

La Predicción. ||Abraham Mateo||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora