-¡OTRO DE TEQUILA! -Grité a todo pulmón.Me bajé del taburete con una sonrisa en mi rostro, y de inmediato me apoyé en la barra al notar como toda la sala daba vueltas.
-¡Huevo! -Grité. -¿Donde estás Clara?
Reí al ver como mi amiga aparecía frente a mi con una botella de cerveza y con una sonrisa en la cara.
-¡Te dije que estas son las mejores fiestas!
-Y que lo digas. -Respondí sin dejar de reír.
Me volteé para así quedar de nuevo frente a la barra, donde ahora se encontraba un chupito de tequila.
-¡Por la amistad! -Choqué bruscamente mi vaso con la botella de Clara.
-¡Quiero a Sam! -Reclamó Clara con un puchero.
Ahora tocaba la fase sentimental de la borrachera.
-Y yo quiero un unicornio. -Comencé a llorar igual que ella.
Observamos como una chica se resbalaba y esta caía al suelo a causa de la bebida que habían derramado en el.
Tanto Clara como yo nos observamos fijamente a lo largo de unos segundos, para así estallar en carcajadas.
-¡Vamos a bailar! -De un momento a otro noté como Clara tiraba de mi mano para así llevarme al salón convertido en pista de baile.
Lean On de Major Lazer sonaba tras los altavoces a un volumen excesivo, donde a duras penas eras capaz de escuchar lo que la gente gritaba.
Observé como Clara movía las caderas de un lado a otro y los brazos en el aire. Repetí su misma acción y aun sintiendo como el alcohol cada vez iba a más en mi organismo, ordené a mi cuerpo a resistir mis pasos de baile.
-Joder, qué culo. -Escuché decir a un tío tras mi.
Rodé la cabeza y observé como este admiraba la parte baja de mi espalda a la vez que sonreía con vacile.
-¿Te gustaría venir a mi apartamento, nena? -Me preguntó aproximándome a él.
-Creo que estoy demasiaaaaado borracha como para ir a tu casa. -Reí.
-Pero eso no es nada malo. -Sonrió. -¿Ves estas pastillas?
Asentí con la cabeza.
-Sí te las tomas te pondrán aun más feliz de lo que estás, y a mi aun más cachondo.
Con una sonrisa en la cara, tomé la pastilla para así tomármela. Sin embargo, alguien me arrebató la pastilla.
-¡Eh! -Bufé con un puchero.
-¿De qué coño vas? ¿Intentabas drogarla para así tirartela?
Si mi vista no fallaba y mis oídos no estaban sordos, Hugo se encontraba frente al chico que me había ofrecido aquella pastilla, el cual estaba más que aterrorizado.
-¡Alissa! -Me llamó mi amiga. -Necesito ir fuera.
Sin esperar una respuesta a cambio, esta tiró de mi brazo y me alejó de allí a trompicones, tropezando con todo aquel que se interponia en nuestro camino.
Una vez fuera, observé como Clara me dirigía hacia la carretera, o más bien hacia un callejón.
-¡He encontrado Narnia! -Gritó con ilusión.
-¿Sí? -Cuestione sonriente. -Pero eso era una película.
-¡No! ¡Tan solo tenemos que atravesar esta pared y llegaremos a Narnia!

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FRECKLES.
Teen FictionÉl era tan... Peculiar. Explosivo. Orgulloso. Incondicional. Reservado. Y lo más importante, altivo. Así es como era Hugo.