Sé que no te mereces esto, sé que me odiarás, y no merezco menos. Pero no puedo decírtelo a la cara. No puedo mirarte a los ojos y decirte que ya todo esto terminó. Créeme que jamás voy a olvidarte y sé con toda mi certeza que jamás voy a dejar de quererte. Pero necesito hacer esto Abril. Por favor no me busques, entiende que esto es una decisión mía. Abril necesito que después de mí te vuelvas a enamorar, que vuelvas a regalar esa sonrisa tuya que tan feliz me hizo un día. Me voy lejos de aquí, necesito hacer borrón y cuenta nueva. Un nuevo Carlos. Sin ti. Te lo suplico no me busques porque no quiero que me encuentres. No quiero decirte la típica frase de: no es por ti, es por mí. Pero es totalmente cierto. Eres la mujer más increíble que he podido conocer. Y siempre estarás en mi corazón.
Un abrazo.
Y así fue como mi vida se derrumbó en menos de veinte segundos. Leí la carta que me había dejado en la mesa que teníamos en la cocina, donde comíamos, cenábamos e incluso habíamos hecho el amor muchas veces. Me dejó con una simple carta. Intenté llamarle pero me respondía un buzón de voz. ¿Qué había hecho mal? ¿En serio mi novio, después de vivir juntos por dos años me había dejado por carta? La desesperación se apoderó de mí, las lágrimas inundaron mi ser y con ellas vino una pena tan grande que me vi en lo más profundo de un pozo.
Después de varios días sin responder los mensajes de mis amigos y las llamadas de mis padres decidí invitar a mi mejor amiga a mi casa. Le di la nota para que la leyese y entendiese el porqué había estado desparecida esos días.
-¿Esto es en serio? - me preguntó.
-Tan cierto como que me llamo Abril.
-Imposible. - me eché a llorar y ella me rodeó con sus brazos. Lloré desconsoladamente durante horas, horas en las que mi amiga no dijo absolutamente nada, solo se limitó a abrazarme y a besarme.
-No lo entiendo Ana, no lo entiendo, ¿porqué? - solo podía decir esas cuatro palabras. Mi mente buscaba desesperadamente un error por mi parte. Un algo para justificar su marcha. Pero no encontraba nada.
-No puedo entenderlo yo tampoco. Todo parecía ir bien.
-No parecía IBA BIEN. - Respondí entre más lágrimas. -No puedo estar sin él Ana... Simplemente no puedo.
396A

ESTÁS LEYENDO
Las Penurias de Abril
RomanceAbril tiene todo lo que siempre ha deseado en su vida. Siempre se ha conformado con muy poco. Tiene a su novio Carlos, del cual está locamente enamorada, ya llevan ocho años juntos, dos viviendo en la misma casa. Un día, Abril se encuentra una not...