Capítulo 9: Amnesia

190 23 12
                                    

-Lo siento-dije-. Entré a la habitación equivocada.


Salí silenciosamente sin mirarlos. Me sentía destrozada por dentro pero de alguna forma me lo esperaba. No es como si pudiese tener un final feliz con él, ya que está permanentemente pegado a la Chorizorra.


Al volver a mi habitación, mi madre y Descremada me miraban con caras preocupadas al ver mi expresión.


-¿Qué pasó?-preguntó mi madre.


-Nada-respondí cortante-. Solo vayamos a casa. No quiero estar más tiempo aquí. Este lugar es deprimente.


Agarré todas mis partencias, y volví a mi hogar lo más rápido que una salchicha podía caminar.


Fue un recorrido silencioso, no era que mis acompañantes no quisiesen hablar, simplemente detectaron mi humor y no lo hicieron.



Y así pasé la semana, con comentarios cortantes, encerrada en mi habitación y con pocas ganas de escuchar a los demás. Esta vez, no habían lágrimas, ya no había nada que llorar. Mi madre comenzaba a pensar que tenía problemas de depresión, yo también lo pensaba. Podría ser un problema más sencillo, nada que un par de pastillas y un psicólogo no arreglasen. Sin embargo, no lo era.


Descremada me visitaba todos los días, y me traía noticias, que claro, no me interesaban. Siempre me traía lo último en chismes y rumores, y yo solo fingía escucharla. Y también me pedía que conversara con ella, cosa que me costaba más. Al final, terminé contándole lo ocurrido con Peter Pan Bimbo como un comentario al pasar. Claro, ella no se lo tomó así y se puso en pose de "detective" para averiguar todo.


-Amnesia-dijo Descremada.


-¿Qué?-pregunté yo.


-Peter Pan Bimbo seguro tiene amnesia. No hay otra explicación.


-En ese caso ¿Por qué solo se olvidó de mi?


-Eso es fácil-dijo Descremada removiéndose en su asiento con una cara de satisfacción por su supuesto descubrimiento-. Olvidó todo lo que pasó un poco antes de conocerte, eso explica por qué no estaba enojado con la Chorizorra.


-Eso significa que ya no tengo posibilidades-miré al suelo-. Esta bien... Es mejor solo olvidarlo y empezar de cero.


La idea se quedó atascada en mi cabeza. Hasta que finalmente me pareció algo posible. Una gran idea. Una posibilidad del 99%.


Si Peter Pan Bimbo iba a olvidarme, yo lo iba a olvidar a él.



Poco a poco comencé a sentirme mejor y a seguir con mi vida como si no hubiese pasado nada. "Y es que no pasó nada" me decía para mis adentros.


Comencé a salir más de casa, primero solo a la casa de Descremada hasta que pude seguir con mi vida normal.


Empecé a frecuentar la heladera como antes solía hacerlo. Hacía recados para mi madre o a veces solo iba porque sí.


Hasta que un día lo vi a Peter Pan Bimbo solo, sentado en un recipiente de plástico. Pensé en seguir mi camino sin que me viera, pero cuando me dispuse a hacerlo era demasiado tarde.


-Sali-dijo el con voz suplicante.


Y sentí algo dentro de mí, algo que debí sentir antes, mucho antes: odio.


El enojo se apoderó de mi, así que solo seguí caminado. Me giré para verlo cuando volvió a repetir mi nombre.


-Sali-seguía diciendo él.


-¿Quién eres tú?-imité su voz.


-Sali, no hagas esto. Déjame explicarte...


-No me expliques nada-lo interrumpí-. Porque yo no te conozco. Debiste equivocarte de persona.


Y luego me dí la vuelta y volví a mi hogar, sin mirar atrás.


N/A:

Chan chan chan.
A que los confundí re hard con este capítulo.
Bueno, me doy cuenta que la salchicha es bipolar pero el pan no se queda atras.

Imagino que no saben lo que sea que está pasando XDDD. Ni siquiera yo lo sé (?)

Como dije antes, ya estamos en los capítulos finales. Asi que preparense (?)

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Mar 15, 2016 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

El Pan y la Salchicha: Historia de un PanchoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora