— ¿Puedes decirme en que piensas Romeo?, me estás poniendo nervioso— preguntó Phillip mientras el ascensor del Harbour se elevaba hacia su apartamento.
—Estoy nervioso, puede que para ti sea un juego, pero no te he mentido, es mi primera vez—dije bajando la cabeza.
—Eh—Lip me cogió de la barbilla y me obligó a mirarle a la cara—.Te va a gustar, te lo prometo, voy a tratarte muy bien.
La alarma pitó y Ted se apresuró a apagarla, luego entramos. Me ayudó a quitarme la americana y la dejó sobre la mesa del recibidor. Luego me cogió de la mano y me llevó hasta el pasillo de las puertas blancas. Esta vez no me llevó hasta el fondo, si no que se detuvo unas cuantas puertas antes. La abrió y entramos dentro. El cuarto de Lip era impresionante, toda en tonos grises y blancos, una gran cama en el centro, la puerta del baño a la derecha y un agujero en la pared de grandes dimensiones, dejaba ver el inmenso ropero, una cómoda frente a la cama y un gigantesco balcón al fondo de la sala.
— ¿Quieres tomar algo?—me preguntó mientras cerraba la puerta. Negué con la cabeza y agaché la mirada—.No puedes ser tan tímido si quieres llegar a algo en el mundo del periodismo—dijo mientras me levantaba de nuevo la cabeza. A continuación comenzó a besarme el cuello. Dí un respingo al sentir sus labios por mi cuello. Lip fue aumentando la voracidad y continuó subiendo por el cuello, hasta la oreja, levanté el mentón para que recibir sus labios, pero el chico me apartó la cara y continuó besándome el cuello.
—Yo no beso en los labios Romeo, nunca—declaró para que me quedara claro. Luego comenzó a desabrocharme la camisa y jugueteó con el fino y escaso bello de mí pecho. La camisa cayó al suelo, mientras él me hacia retroceder hasta la cama—. Me gusta que mis chicos estén depilados, recuérdalo para la próxima vez.
Comenzó a desnudarse. Primero mostró su espectacular torso, perfectamente liso, se sentía orgulloso de su cuerpo y lo demostró mientras sus ojos se oscurecían más por el deseo. Luego se quitó los pantalones y se quedó en boxer. Unos boxer que ya mostraban su virilidad en todo su esplendor. El chico me hizo retroceder un poco más hasta que me topé con el borde de la cama y luego me dio un leve empujón y yo caí encima de esta suavemente. El chico se apresuró a arrodillarse frente a mí y quitarme los pantalones. Me dio un poco de vergüenza, ya que a aquellas alturas yo ya estaba tan excitado como él. Pero tampoco me dio mucho tiempo para asimilar la situación, ya que segundos después tiró de mis calzoncillos y me dejó completamente desnudo frente a él.
—No te avergüences, desear follar es natural—dijo mientras me miraba de forma socarrona. Luego agarró mi pene y se lo metió en la boca.
—Ah—fue lo único que fui capaz de decir. Luego me eché hacia atrás y dejé que el chico repasara cada centímetro de mi polla con su legua salvaje. Comenzó a pajearme mientras succionaba cada vez más rápido, mientras yo me agarraba a las sábanas y gemía de placer sin poderlo remediar. Era la primera vez que alguien me la chupaba y era algo impresionante, con cada repaso que Lip me hacia con su lengua mi cuerpo daba una sacudida.
—Te toca—el chico paró de repente y se puso de pié bajándose de repente los calzoncillos y liberando su pene frente a mi cara.
— ¿Qué?—pregunté confuso. Le había entendido, pero ni siquiera me había dado tiempo de recuperarme del hermoso placer que estaba sintiendo segundos antes y mucho menos de incorporarme en la cama.
—Métetela en la boca, tranquilo seguro que sabes hacerlo, tú tan solo ten cuidado con los dientes—el chico agarró mi cabeza y me la introdujo en la boca poco a poco. Fui notando como mi boca se llenaba de su polla y del sabor de esta. Toqué con mi lengua su glande y noté como Lip se tensaba mientras cogía ritmo y me penetraba la boca con fiereza. En una embestida desmedida su polla me tocó la garganta y yo tuve que sacármela para tose desesperadamente.
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Los Juegos de Bay
Teen FictionBay llega a una nueva ciudad tras graduarse dispuesto a hacer realidad todos los planes que tenía pensado para él. Pero en su primera noche algo se interpondrá en este camino, enseñándole un mundo de juegos y perversiones que no conocía, y dejando d...