T R E C E

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- Pasa, Jimin.- murmuré. Me sentía nerviosa, ¿realmente querría hacer esto? Seguir en una relación de la que no recuerdo nada, ni siquiera nuestro aniversario. Lo único que sé es que mi corazón necesita esto, lo necesita a él pero no tengo ni la más mínima idea del por qué.

- Querías verme. He venido.- sus ojos apenas miraron los míos, su mirada era triste y profunda, me dolía verlo así pero me dolía aún más saber que yo era la razón de su dolor.

- Quería disculparme contigo por lo de ayer.

- No tienes nada de qué disculparte, _____.

- Sí, bueno no. De todas formas quiero hacerlo. Jimin, no te voy a negar que es raro para mí despertarme y saber que tengo novio hace muchos años y ni siquiera recuerdo cómo nos conocimos.

- No te estoy obligando a nada.

- Lo sé, pero es que no sé cómo explicarlo. Necesito hacer esto, que me tengas paciencia.

- ¿Hacer qué, ______?

- Pues esto...

- ¿Decirme que no recuerdas nada de lo que vivimos? Créeme que no es mi hobbie favorito.

- No, vivirlo. Ahora. En el presente.

- ¿A qué te refieres?

- Pues que tal vez podríamos empezar de cero, ¿qué dices?- su mirada era extraña, como si no pudiera entender en lo más mínimo lo que le estuviera diciendo. Es que ¡joder! Ya sé que no me expresé muy bien pero cómo se supone que le pides a tu novio que sea tu novio.

- De cero...- asentí- Está bien, será difícil pero lo intentaremos. Podemos ir despacio.- volví a asentir- No suena nada mal.- y por fin sonrió.

Desde que Jimin y yo tuvimos esa conversación todo ha marchado bien para los dos. No sé cómo era antes de perder la memoria pero lo que sí sé es que el Jimin que conozco ahora debe ser mejor que cualquier otro. Una que otra vez quedo sorprendida por la magnitud de su control y sus celos, y aunque me siento rara es como si ya los hubiera experimentado antes.

No se cansa de repetirme que me ama, su mirada sincera y frágil me lo confirma, o al menos es de lo que me quiero convencer. Los doctores dicen que he tenido avances considerables y positivos para mi mejora, y aunque sigo sin recordar en lo absoluto sobre lo nuestro, muy en lo profundo prefiero nunca hacerlo, me gusta vivir esta vida con él, tengo miedo de un día recordar y que tal vez mis memorias no sean tan lindas como estas.

Ha revivido algunos momentos de nuestra relación, nuestra primera cita, nuestro primer beso... Incluso nuestra primera vez. En 2 meses me he acostumbrado a él, a sus caricias, a sus besos, a su voz, a sus palabras. Hago como que no me doy cuenta, y sé qué está mal pero no sé qué hacer. Le he visto llorar a mares en el baño de su departamento, decir palabras tales como:

Hago esto por los dos, _____.

Lo siento, sé que no soy lo que te mereces.

Estoy a punto de convalecer, pero es por nuestro amor, es por ti que aún doy la batalla.

No sé qué siente, delante de mí siempre se muestra fuerte y frío respecto a esos temas. Sé que lo hace para protegerme y excluirme de su dolor pero siento la profunda necesidad de que me incluya en ellos, de que llore frente a mí, quiero sentir su dolor. Pero supongo que no teníamos ese tipo de relación vulnerable y afectiva.

Respecto a mi familia, sugirieron que mientras trataba de recuperar la memoria lo más "prudente" era irme a vivir con él, a su departamento. Aunque Jimin no puso objeciones, no pude evitar sentirme incómoda, no sabía cómo se iban a dar las cosas entre nosotros, pero él siempre actuó con naturalidad.

Noto la irritación de mi hermana y un rencor que no puedo explicar hacia Jimin, muy diferente de cuando desperté y ella lo apoyaba a morir, ¿qué estará pasando entre ellos? Siempre dieron la impresión de que se llevaban bien pero hace unas semanas que apenas se dirigen la palabra.

Yohana me ha ayudado a entender un poco más la realidad, y esos celos enfermizos proveniente de Jimin. Dice que siempre fue así y que, incluso, me prohibía salir a ciertos lugares y juntarme con determinadas personas, en especial con hombres.

Discrepo un poco en ella, aunque en algunos casos le doy la razón, si bien no me ha prohibido nada, noto la irritación que siente cuando hablo con chicos y salgo con amigos.

Excluyendo eso de la larga lista Park, vivir con él es una de las mejores cosas que me ha pasado en la vida, no sé si mi antiguo yo estaba tan feliz como lo estoy yo ahora, pero esta es una buena vida, y me gusta vivirla junto a él, aunque tenga defectos, muchos de hecho, algo en mí ha revivido para con él, como si ya hubiera estado ahí hace mucho, mucho tiempo.

Parecido al amor, lejos del odio.

Por sobre todo, siento la confianza, las ganas y la necesidad de quedarme a su lado hasta que deje de amarme, de aguantarme, de cuidarme o simplemente se canse de luchar por nuestro amor.

Sólo en ese momento decaeré, pero incluso después seguiré aferrada a nuestro pequeño universo. A lo que somos juntos. A esa mezcla extraña y explosiva que formamos los dos.

Solos tú y yo, Park. Solos tú y yo.


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Como lo prometido es deuda y a mí no me gusta deber les traigo el segundo capítulo del mes 💚 En parte para celebrar el premio de los BTS (aunque admito que amo a Justin 😕) y en otra porque este capítulo es en parte introductorio a lo que se viene en torno a esta relación.

No le quise dar mucho énfasis a la memoria perdida de rayis, en el sentido de hacer 20 mil capítulos sobre como no recuerda a su amor. No es la idea del fic pero después de esto ustedes entenderán muchas cosas y se quedarán tipo: WTF, ¿esto cómo pasó? Obviamente habrá lemon, detallaré todo de ahora en adelante porque a decir verdad nos importa el presente y el nuevo <ellos>.

Sin más que decir y agradeciéndoles los miles de views y las nuevas/viejas lectoras que me acompañan en cada oportunidad, les mando un beso enorme y un abrazo. Nos veremos el próximo mes, el día de mi cumpleaños ❤

Recuérdame [Jimin&Tú]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora