- Narra Elizabeth Brown.
Salí de mi habitación para darme una ducha. Justo cuando mis pies pisaron la escalera pude escuchar unos gritos angustiantes que no podía entender de la chica que es ahora la novia de hermano.
Es esa chica que mi hermano me pidió que le ayudara a enamorarla, lo que no entiendí es si esto estaba relacionado con una ¿apuesta? Si ese es el caso no lo apoyaré.
Toque la puerta con delicadeza para poder entrar, le hablé para saber si ella se encontraba bien pero no recibí respuesta después de dos minutos.
Ella abrió la puerta, evitando mi mirada.
—Sí....Estoy bien, disculpa.—pidió disculpas avergonzada.
—¿Tu eres Jessica, no?—fruncí el ceño perpleja.
—Sí, soy yo.—asintió nerviosa.
La veo nerviosa ¿qué le habrá pasado? intenté entrar al baño y del intento solo cerró la puerta para que no entrará.
—Déjame entrar..—le pedí confundida.
—No..Lo que pasa es que..Me iba cayendo y para no caerme me apoyé de mi puño en el espejo, esta vuelto trizas.—me confesó apenada.
No sonó convincente cuando lo dijo.
—¿Eres muy torpe, no?—le hablé en un tono de broma.
—Algo..—ella rió, y justo apareció mi hermano atrás de mi.
—Vaya, por lo menos ya se conocen.—Cameron sonrió.
—Si, Cameron...—respondió Jessica en un tono de voz temerosa detrás de la puerta que nos separaba.
—Pues sí, me dijiste sobre...—mi hermano cubrió mi boca con su zurda.
—Jessica ¿te sientes bien?—cambió de tema mi hermano.
—Sí, solo necesito un momento..A solas.—Jessica salió del baño sin vernos al rostro.
—Mientras iré hablar con mi linda hermanita menor.—Cameron me sujeto del brazo, subiendo las escaleras junto conmigo.
—¿Para qué quieres que te ayude a que se enamore de ti?—intenté saber lo que estaba pasando.
No hallaba como decírmelo.
—¿Recuerdas a Matias?—se rascó la cabeza incomodo—Bueno..Si lo recuerdas o no, te diré que él y yo hicimos una apuesta sobre acostarse con una chica.
¿Este a caso es mi hermano MAYOR? ¿mi ejemplo a seguir? Era obvio que la chica se trataba de Jessica. Le ví con decepción pura.
—Si tu me ayudas, yo podría..—me sonrió incómodo.
—¡NO, NO TE AYUDARE EN SEMEJANTE COSA!—le grité lo cual hizo que me volviera a tapar la boca.
—Shhh....Habla bajo Jess puede llegar a oírnos.—mi hermano me mandó a callar tapando mi boca aún.
Cuando dejo de cubrir mi boca de inmediato hablé.
—Esta bien. No gritare, solo no hagas esa estúpida apuesta.—le aconsejé en un tono de coz bajo.
—¿Solo una estúpida apuesta? Hermanita podré ganarle al tipo que siempre me ha ganado en todo.—rió con codicia.
—No sabia que vivía con un monstruo.—le empuje molesta.
—Ohh...¿En serio no me ayudarás?—se molesto, y se acerco a mi oreja—¿Quieres que le diga a mami de tu novio de 18 años?—me amenazó en susurros.
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El Pintor y El Demonio [Creepypasta] [Bloody Painter]
RandomUna joven chica de nombre Jessica Werner, ciudadana de Canadá solía tener una vida normal como cualquier otra junto a sus padres, de apariencia atractiva; tez ligeramente blanca, ojos claros y una cabellera teñida de color violeta. Se ve amenazada p...