Estoy.

49 2 1
                                    

Estoy deprimida. Empezé danza clásica. A veces creo que no hay nada en el mundo que sea para mí, que solo crearon al mundo entero y luego yo, solo para rellenar ese espacio vacío de allá en el fondo. Quisiera creer que no me merezco esto, porque yo quiero a todos, incluso a los que me odian. Mi voz se quiebra de solo decirlo y soy capaz de llorar. Soy frágil, soy débil. Dependo de tus pensamientos, tus palabras. ¿Qué piensas de mí? Dilo, no puedes deprimirme más. No lograras más odio del que ya hay.

Estoy orgullosa. Estoy comiendo menos. Aunque parezca un detalle menor, estoy logrando controlar mi apetito y ser consciente de las calorias que tanto me engordan. Obviamente, no hay diferencia aún pero sentir mi autocontrol ya me hace sonreír.

Mi contador dice:

1- Sorbito de té, galletita de agua sin sal, chicle sin azuca, mitad de un sandwich de jamon y queso, milanesa de soja, ensalada de zanahoria (fue mi primer día, no me critiquen! perdonen, ya se que soy un asco!! me arrepiento, estoy asquerosa!!!)

2- Skinny Vainilla Latte: Café de Starbucks obligaba por amigos finguiendo preocupación por mi reciente y nuevamente falta de hambre. Es un café tamaño alto (el más chico, obvio, del cual tomé un poquito más que un cuarto) con vainilla sin azúcar y leche descremada. Y un medio plato de arroz con lentejas. Dugh. Bajo amenaza, otra vez.

3- Una empanada de carne.

Estoy agotada. Este mundo que da vuelta y vuelta y no se detiene hasta hacerte vomitar. Quiero gritar que quiero mi espacio, que quiero NECESITO A CAT*, quiero dejar de comer y hacer ejercicio sin caer rendida a los 10 minutos, quiero ser fuerte y no rendirme. Quiero lo que quise siempre, lo que siempre repito y lo que deben estar cansados de leer desde el otro lado de la pantalla. QUIERO LO MISMO QUE TODAS. SER ACEPTADA.

Porque estoy cansada y apenas puedo sonreír sin llorar por el esfuerzo. No estoy para mentiras de esa manera. No estoy para esforzarme en algo que no es lo mío. No estoy para ser algo que no soy y a veces me olvido que yo soy lo que quiero ser y cierro los ojos, dejando a mi imaginación volar. En ese instante, soy bonita, flaca, bailarina, cantanta, actriz, amiga, hija y novia perfecta.

Estoy enamorada. No se si sería justamente la palabra adecuada. ¿Recuerdan la empanada del tercer día de mi contador? Bien, las hizo mi enamorado <3 Resultaba que estabamos peleados por, en resumen, citas canceladas, celos y faltas de citas por lo que un día después de la psicologa (Hoy, Jueves 17 de Marzo de 2016) quizo venir a casa a cocinarme. Vino y la comida salió asquerosa pero la comimos por lástima. Yo estaba llegando tarde a Canto por lo que pude comer una y decirle que comería luego, en realidad la excusa me vino como anillo al dedo. Acabo de volver y mi papá se comió una cuantas y mi mamá otras y más se había llevado él, por lo que solo quedan 2 que luego arrojaré a mi perrita.

Estoy vacía. Ese amor que tanto anhelé me confunde y genera sentimientos opuestos. En ocaciones, me encuentro sonriendo con tal felicidad por un simple abrazo que me considero estúpida a mí misma; pero luego miro el vacío, la nada, esperando que algo suceda. Como si solo estuviera respirando, como si no pudiera sentir el tacto de sus manos rodeando mi espalda. Sus caricias son tan confortantes como deprimientes y es tan desesperante no por explicarlo correctamente. No existen palabras adecuadas que detallen como es debido lo que siento, es como esa felidad que sienten las suicidas cuando están con otros. Porque no todo es sangre y llantos y por un segundo nos cuestionamos permanecer en este mundo. Luego, volvemos a casa y nos damos cuenta que estamos solas y que la pantalla que queremos creer es una patética mentira inventada por nuestras mentes para evitar la muerte.

Estoy intentando. Cada día. A cada instante. Incluso cuando callo, intento pensar en lo que quieres escuchar.

Estoy analizando. Qué hacer con mi vida, con mi cuerpo, con mi presente y con mi felicidad.

Ana, Mia y Auto lesiónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora