Quiero Amarte (Yaoi)

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Me puse lo primero que encontré unos pantalones negros ajustados, una camisa blanca con algunos dibujos y tenis negras.

La verdad es que no me veía tan mal, lo usual... aunque siempre tiendo a preguntarle a los demás cómo me veo y creo que en verdad necesito saber como me veo. No creo que preguntarle a mi abuela sea una opción, así que tomé mi celular y me hice una foto de cuerpo completo en el espejo, era bastante grande así que si me veía bien.

Le envié la foto a la única persona que es sincera conmigo, tanto que es capaz de dañar mis sentimientos, es una maldita sangrona pero bueno así es Haruka, creo que por eso nunca ha tenido novio. Tardó algunos minutos en contestarme, pero al menos lo hizo, vi su respuesta y bueno, me sentí humillado, juro que me mataré. Leí el mensaje mil veces para encontrar algo bueno: "Kou no puede ser ¿Es enserio? ¿Es todo lo que tienes? Me decepcionas, iré de inmediato a tu casa, nunca aprendes, eres un ridículo"

Sin duda su sinceridad es asombrosa, bueno no puedo hacer nada pero ¿Tal mal me veo? No puede ser posible... tal vez por que hoy es una noche de ¿Locura?

Escuché el timbre de la casa, espero que mi abuela no se atreva a abrir, salí corriendo hacia la entrada y abrí la puerta rápidamente, tome a Haruka del brazo y la llevé a mi cuarto antes de que la ballena se acercara, no quiero saber que pasaría si vuelven a pelear. Cerré la habitación con llave y la miré a los ojos esperando a que me dijese algo.

—Oye me lastimaste el brazo —dijo mientras se lo tocaba.

—Lo siento pero bueno no quería que mi abuela te viera... ya sabes por qué —la miré disgustado.

—Lo siento, lo siento pero ella empezó, no es mi culpa —suspira—. En fin es hora de que te cambies, en persona te vez peor.

—Eres cruel ¿Cómo te atreves? Además ¿Enserio me veo tan mal? 

—Pues no pero vamos, hoy es una gran noche, debes verte guapo para las chicas —me guiña un ojo—. Así que muestrame tu ropa.

Abrí más la maleta y puse toda la ropa en la cama, no podía dejar de observar a Haruka y su mirada penetrante, parecía que se iba a meter en mi ropa o algo así, no se si estaba esperando a que esa camisa dijera algo, ella es simplemente rara.

Cuando terminó de ver toda mi ropa me miró a los ojos y esbozó una gran sonrisa, no entiendo por qué pero bueno, supongo que encontró algo que le gustó.

—Tienes un buen gusto a la hora de comprar ropa pero para combinarla pues... —miró hacia otro lado—. En fin ponte esto. 

Me tiró todo a la cara, logré atraparla antes de que cayera al suelo y una vez la tomé de inmediato me empujó hacia el baño, no me dio tiempo para poder mirar lo que había elegido con más atención, cuando ya estaba dentro cerré la puerta. Comencé a desvestirme, en ese momento recordé que debía llamar a mis padres, lo había olvidado, después de todo venir aquí no fue tan malo, todos mis amigos de infancia siguen en este lugar.

Observé lo que me iba a poner, pantalones totalmente azules, una camisa negra manga larga lisa. Creo que si me veo mejor que antes, no lo sé, no soy bueno en estas cosas. Salí del baño y vi a Haruka con unos zapatos en las manos.

—Vans negras mi querido amigo —empezó a observarme de pies a cabeza—. Si no te conociera y no hubiese visto lo estúpido que eres en verdad te ligaría pero bueno, ponte estos y vamonos.

—Pero aún es temprano. 

—¿Y? Toru me dijo que fuéramos a su casa cuando estuviéramos listos así que mueve ese trasero. 

—Está bien, vámonos. 

Tome mi celular y salí de la habitación con Haruka detrás de mí, no me fije si mi abuela estaba, tampoco tenía planeado pedirle permiso de cualquier forma a ella no le importa lo que me pasa o lo que haga con mi vida, es lo bueno de ella, tengo libertad total. En tanto no traiga muchas personas a su casa o haga mucho ruido todo está bien.