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-Deberías estar dormido.- Recibí un regaño por el otro lado de la línea.

-Tú lo dijiste, debería, pero no puedo.-Cerre los y di un gran suspiro.

-¿Mi mensaje te despertó? Fue eso verdad. Lo siento, no fue mi intención.- Su voz sonaba triste. No quería que gente sufriera por mí culpa.

-Ya Soo, no te preocupes, no fue tu culpa. Cambiando de tema ¿Cómo vas con la organización?-

-Va bien, aunque creo que faltan algunas cosas es 20 de noviembre, tengo 6 días para mejorar todo.- Hice una pequeña mueca, ni siquiera sabía en que día estaba. Había perdido todo sentido sobre el tiempo. Debo estar mal.

-Vas a ver que todo saldrá bien.- Trate de alentar a lo que sólo escucho un suspiro de su parte.

-Eso espero. Bueno ¿Y tú que tal? ¿Ya has comprado el boleto de avión?.- Sonara estúpido pero ni siquiera había pensado en ello. Sólo quedaba por mentirle.

-Sí, ya tengo todo listo.- Camine hacia mi oscura habitación.

-Me parece perfecto, bueno te dejo dormir. Recuerda que debes ir por tus medicamentos, la doctora me hablo avisando que no has ido por tus dosis de cada mes.- Lo que faltaba, esa señora contando todo. Hice puño mi mano y quería tirar todo lo que veía. Quería golpear, gritar. Pero me contuve. Odiaba que me llamasen la atención y más odiaba que se metieran en mi vida. Cerré fuerte los ojos y conté mentalmente, no quería que Soo se llevará lo peor.

-Kyungsoo, eso no es cierto. Fui días atrás y no estaba en su consultorio. Yo no tengo la culpa ante eso.- Me lancé a la cama y puse mi brazo cubriendo mis ojos.

-Esta bien. Te creo , pero por favor no olvides ir antes de viajar. Te estaré esperando , cuidate mucho y no salgas sin abrigo ¿De acuerdo?.- A veces, al escuchar a Kyung hablar de esa manera me hace sentir querido. Ahora es a el lo único que tengo, debo valorarlo más.

-No se que haría sin ti, en verdad. Igual tu cuidate, no trabajes de más y muy pronto nos veremos. Hasta luego.- No espere respuesta y termine la llamada. No creo que pueda dormir esta noche...

×××××

-¿Estas mejor?.- Le decía mientras acariciaba su cabello lentamente.

-Sí, siento lo que tuviste que escuchar hace minutos atrás.-Se levantaba de la cama y me miro. Sus ojos estaban rojos y no podia ante aquel rostro.

-No te preocupes, debe haber una razón la cual te molestaste.- Le acaricie la mejilla y cierra los ojos ante el acto.

-La hay, y eso me hace tener miedo.- Contesta sin titubear. Me da curiosidad y quiero preguntarlo.-No creo que debemos hablar de esto ahorita. Creo que debemos parar aquí.- Se acerca hasta la puerta de su habitación y me mira.

-¿En verdad no lo quieres hablar?.- Dije aquello y negó con la cabeza. Sólo pude asentir.

-Necesito estar sola. Puedes retirarte de mi habitación por favor.- Su actitud me impactó. Nunca había tenido una actitud así conmigo.

-De acuerdo.- Me levanté y pase de ella sin mirarla y salí de ahí .

××××××

No se que momento caí rendido, el sueño últimamente me ha controlado. Me levanto y veo el reloj y marca las 7:00 am. Me dirijo al espejo más cercano y me miro. Me contempló por un momento y me noto apagado. No entiendo por qué. Quiero la vida que llevaba tiempo atrás.
Camino hasta el baño y necesito una ducha urgente, quizá con eso me sienta mejor.

~~
Salgo de mi hogar directo al coche. Necesito ir con la doctora por esas medicinas y decirle que no tiene por que andar divulgando mi estado ni más por el estilo. Me subo al coche y miro fijo al volante. Me quedo pensando que sólo están dando dando y dando pero ¿Qué clase de medicamento es? En un principio si recuerdo que me lo hallan comentando pero ahora no recuerdo. Suspiro molesto No de nuevo. Últimamente mi humor a ido bien, pero ahora necesito tranquilizarme y no provocar un segundo accidente. Este si podría lograr su cometido.

~~~
Mi teléfono comienza a sonar pero no debo contestarlo, estoy por llegar a la clínica cuando mi teléfono sigue insistente. Parco el coche y salgo hacia las escaleras, estoy por subir cuando el teléfono suena de nuevo.

-¿Señor Park?.- Escucho una voz de mujer preguntando por mí.

-S-si... soy yo ¿Ocurre algo? ¿Quién es usted?.- Titubeo un poco, su voz se le hace conocido pero no logró descifrar quien sea. De seguro es un cliente.

-No, no ha pasado nada de malo. Es sólo que nos hemos tratado de comunicar con Do.Company pero nadie nos ha recibido la llamada.- Recordé en que lugar estaba y volví a subir las escaleras.

-¿Y qué es lo qué se le ofrece?.- No tenía mente para los negocios en este momento. Camine el recorrido que tanto odiaba pero que a la vez amaba.

-¡Oh!, lo siento no me he presentado. Llama la hija del presidente de Kim Nation, Kim TaeYeon.- Y fue ahí cuando caí en cuenta de quien era esa voz. Como olvidarla. Es Ella.

-No tenías por que haber llamado y usado esa excusa tan barata.- Solté molesto. Quedaban dos pacientes más para mi turno. Quería irme de aquí ya.

-Enserio te hable por lo del señor Do.-Soltó burlona. Enserio que su actitud me enfada.

-Espera un momento. ¿Cómo sabes que estoy trabajando para Do.Nation?.- Me dio tanta curiosidad saber como es que me encontró.

-El hijo del señor Do me dejo una tarjeta para que le comunicará si había un problema y lo hay y entre esos números estaba el tuyo.- Me dijo simple y sólo me quedé pensando. Un momento...

-¿El hijo del señor Do?, ¿Acaso te has encontrado con Kyungsoo?.- No podría creer cuán pequeño es el mundo. Volteó hacia la sala de espera y sólo faltaba sólo una persona.

-Así es. Supongo que nos encontraremos en la reunión. Te estaremos esperando Channie.- Estaba sorprendió por varias razones. Uno: Después de no saber nada de ella, todavía está en China. Dos: Tendré que verme con ella después de tanto y Tres: Estara el ahí.

-Siguiente-. Escucho a lo lejos y veo que es mi turno, la sala está vacía y debo terminar esto ya.- Debo colgar y créeme que estaré contento de verte. Esta reunión tiene altas mis expectativas, así que no lo arruines.-

-¿Estas bromeando? Claro que no te defraudare. Nos vemos, cuidate y la familia Kim te espera ver aquí en China pronto.- Sin más colgó su llamada y suspire molesto. Nunca l agradó.
Camino hasta la puerta y tocó un tan desesperado. La doctora se daría cuenta de ello e hizo que tomará asiento.

-No estés así, calmate por favor. Ahora ya que estas aquí te daré tus dosis recuerda que debes tomarlas los días y horas que vienen en la prescripción ¿De acuerdo.?- Sólo atine a asentir.

-¿Cómo se que esto me está curando? ¿Tan eficaz es? ¿Tan potente es?.- No queria sonar mal pero no pude evitarlo. Sentía que me drogaban más y más. Qué creó que un día, de tanto que me estoy tomando moriré.

-Si no fueran eficaces no perdería el tiempo con darte algo innecesario ¿No lo crees?.- Sonreí de lado, me estoy empezando a irritar.

-¿Cómo se que no está queriendo hacerle el favor a alguien matandome lentamente?.- Me acomode mejor en la silla y cruce mis brazos en el pecho.

-No seas pesimista. Mi labor es cuidar de la salud de las personas. En pro de su bienestar. ¿Por qué quería matarte?.- Mi pesimismo me iba a llevar a malos caminos.

-No lo se. Así que dejemos esta tontería aquí.- Me levanté y tome las pastillas, firme la prescripción y me salí de ahí. Tenía ganas de que pensar que este día sería el último de ahora en adelante...








Capítulo 11. ¿Alguien siente que se vendrá algo grande después de aquí? Un capítulo aburrido lo se pero es necesario para que se venga lo mejor :V
Bye☆

~Paroxetina: Nobody.~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora