Conocí a Adam en un viaje a la capital cuando tenía 15 años.
Fue más que un viaje, ya que mi familia y yo estuvimos viviendo ahí por un año.
El gobierno había dado un mensaje de que todos se reunieran en la capital del estado, porque se habían reportado demasiados casos de T-52 en el país. Claro que en ese entonces no sabía como se llamaba.
Levantaron un muro y no dejaron que nadie más pasara.
A los afortunados que llegamos a tiempo se nos aplicaron vacunas.
Pero esas vacunas, al no estar preparados para combatir una enfermedad así, solo fueron provisionales en lo que se encontraba un tratamiento más fuerte, el efecto solo duraba un año.
Mientras más pasaba el tiempo, había menos esperanzas de encontrar una vacuna.
Al pasar los días, los suministros de comida y agua que se nos proporcionaban iban escaseando, por lo que aumentó la delincuencia.Así fue como conocí a Adam.
Mi hermana y yo teníamos mucha hambre, y decidí robar un poco de comida. Fui a un pequeño centro comercial y camine hasta la sección de alimentos. Solo había comida enlatada. Tome dos y las metí en mi chaqueta.
Cuando salí del centro comercial, pensé que nadie me había visto hasta que sentí que alguien ponía su mano en mi hombro.
Me giré y ahí estaba él. Un muchacho delgado y alto, de tez blanca y cabello castaño. Tenía aproximadamente mi edad y me miraba fijamente con sus penetrantes ojos verdes.
En ese momento me asusté, y pensé que estaría en problemas. Le pregunté qué quería, él me dijo que me delataría si no le daba una lata de comida y señaló mi chaqueta. Saque una y se la entregué. Me dijo que se llamaba Adam, me dio las gracias y después salió corriendo.Después de eso nos encontramos otras veces, hablamos por un tiempo y nos hicimos mejores amigos. Después comenzamos a robar. Nos convertimos en el dúo perfecto. Uno planeaba la distracción y el otro atacaba.
Hasta que todo se salió de control.
Una noche me dijo que robaríamos una tienda pequeña. Me condujo por varios callejones hasta que dimos con un edificio pequeño. Entramos por la parte trasera y avanzamos por varias habitaciones. Él me dijo que vigilara mientras él entraba en una habitación al final de un corredor.
Comencé a sospechar que esta vez no robaríamos comida sino que él tenía en mente algo más. Ningún otro centro comercial en los que habíamos estado tenia tantos corredores y siempre robábamos de día.Cuando él salio me dijo que saliéramos rápido. Traía en sus manos un saco pequeño con dinero dentro.
Corrimos hasta la salida, pero antes de llegar, Adam ya no estaba detrás de mí.
Escuché como forcegeaba con alguien. De repente, un guardia me tomo por los hombros, me esposó y me llevo hasta una habitación donde había varios policías. No sé a dónde se habían llevado a Adam.Me interrogaron y me amenazaron con llevarme a la correccional de menores. Sabias que tenía que hacer algo.
Traicione a Adam.
Les dije que él había hecho todo esto y me involucró con engaños, no sabía nada de su plan, y me amenazó si me reusaba.
Al final me dejaron ir, y no sé qué pasó con él.
Solo sé que lo traicione. No quería volver a verlo.Pero por desgracia, lo tengo frente a mi. Después de dos años.
***
–No te culpo por lo que hiciste– me dice, mirándome a los ojos. No descifro lo que me quieren transmitir. Odio, enojo, o amistad– Yo en tu lugar hubiera hecho lo mismo.
–Fue instinto de supervivencia– desvío la mirada hacía mis pies, pero se que me sigue mirando–de verdad lo...lamento.
–No lamentes nada– su voz suena un poco apagada, y hace que levante la mirada con un gesto. Puedo ver todos los cambios en él.–Hiciste lo necesario.
–Bien. Ya tengo que cerrar–hago un gesto señalando a la farmacia.–¿Te importaría?
–Adelante–Después de cerrar, Adam se ofreció a acompañarme a casa. Estuve a punto de decirle que no, pero es lo menos que puedo dejarlo hacer.
El cielo es de un color grisáceo aunque el cielo está despejado.
Los edificios abandonados y destruidos complementan una tétrica escena.–¿Qué ha sido de tu vida, Mack?–pregunta Adam pero no lo volteo a ver.
–Nada bueno, sin duda– digo y suelto una risita nerviosa. Miro de reojo a Adam y veo que levanta una ceja– Mamá se suicidó hace un año.Al parecer mi confesión lo toma por sorpresa.
–De verdad lo lamento.– lo miro y veo que realmente lo siente.–Debió de ser difícil.
–Si. Quedé a cargo de Bryn y los primeros mese fueron difíciles.– bajo la vista y miro nuestros pies mientras caminamos– Conseguí empleo, tuve que vender algunas de nuestras cosas. Pero al menos tenemos un lugar donde vivir.–hago una breve pausa–Y ahora, Bryn enfermó.
–Si que tienes una gran vida–bromea pero solo puedo darle una sonrisa torcida.Nos detenemos en la entrada de mi casa.
–Sabes Mack, podríamos volver a ser el dúo perfecto– se recarga en el marco de la puerta. Su cara queda muy cerca a la mía.
–No lo sé – confieso.
–Ambos estamos necesitados.–dice alejándose un poco– Solo piénsalo.Me da una media sonrisa y se aleja en dirección a unos viejos edificios.
![](https://img.wattpad.com/cover/65827707-288-k888549.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Prometo Cuidarte|| [SinEditar]
Dla nastolatkówEn un mundo al borde de la destrucción, Mack quedó a cargo de su hermana después de lauerte de sus padres.