Yin Yang | Neji | | Terminada |

C.6: "Nueva Candidata"

— Capítulo 6 - "Nueva Candidata"

(Narra Tsuki)

Me acerqué a paso lento hacia la camilla en donde Neji descansaba, este seguía inconsciente —como anteriormente había dicho el ninja médico—, sin embargo, me tranquilizaba el hecho de que se encontrara bien.

Una vez al lado de su camilla, arrimé una silla y me senté, tomé su mano y comencé a acariciarla, dándome el lujo de admirar a mi primo.

Su respiración estaba tranquila, y su venda seguía en su frente. Realmente agradezco haber estado ahí, si no, no sé que hubiese pasado.

De un momento a otro lo único que se escuchaba en la habitación eran mis sollozos, lo único que sentía era el profundo dolor en mi pecho y mis ojos los sentía arder ante las lágrimas que caían.

— ¿Por qué el mundo ninja es así? —decía en voz alta— ¿Por qué tienen que sufrir esto?

Me sequé las lágrimas rápidamente, totalmente avergonzada por la escena de debilidad que hace unos segundos acababa de montar.

— Ojalá te mejores, Neji-niisan. —hablé acariciando su frente por encima de la venda.

Caminé a la puerta y la abrí, lo miré por última vez y luego me fui, cerrando la puerta detrás de mi.

(Narrador Omnisciente)

Lo que Tsuki no sabía es que Neji estaba despierto, y ahora miraba hacia la puerta con una mirada triste.

(Narra Tsuki)

Luego de visitar a Neji-niisan, me dirigí hacia el complejo Hyuga, al entrar a mi casa encontré a mi hermana menor, Hanabi, con el uno de los consejeros. Los ignoré y seguí de largo, seguramente Hanabi estaría preguntando algo de lo que vio.

Sin decir nada, entré a mi habitación.

A pesar de que apenas era temprano, sucedió mucho por este día.

Me asomé por una de las ventanas y observé hacia el patio. Hanabi estaba sentada debajo de un árbol, que tenía atado una hilera de paja para entrenar, tras un suspiro salí de la casa dirigiéndome hacia ella, esta al notar mi presencia me observó confundida.

— No deberías prestar atención a todo lo que pasa. —recomendé.

— Nee-sama. —murmuró.

— Simplemente no dejes que te engañen. —advertí, yéndome.

( . . . )

Observé que Hanabi se alejaba detrás de Hinata, seguramente esta última iba a ver a Naruto.

Suspiré, supongo que despejarse un poco la ayudará algo.

Caminé hacia afuera, sin embargo, no las seguí, ya que algo me detuvo, más bien, alguien.

— Tsuki-sama. —habló una voz.

Me giré, encontrándome con Neji-niisan.

— Neji-niisan. —murmuré sorprendida— ¿Se le ofrece algo?

— No. —negó— Más bien, quería agradecerle.

— ¿Agradecerme? —inquirí confundida— ¿Por qué, nii-san?

Este bajó la mirada. — Por haberme ayudado. Y lamento mucho haberla tratado mal.

En mi rostro se formó una sonrisa tierna, mientras mis brazos se unían entre mi pecho.

— No fue nada, nii-san. Y no lo lamentes, tu no tienes la culpa. —le dije mientras me iba hacia adentro.

( . . . )