La ridícula idea de perderte. 12

1.6K 74 15
                                    

Salió escapándose de Televisa para no retrasarse más tiempo mientras evitaba encontrarse con gente para terminar platicando. No quería dar explicaciones al respecto porque los medios estaban esperando que salga alguna noticia para saltar a la yugular con respecto al comienzo de la nueva novela. Todo era un misterio con respecto a la historia, y ella acaba de reconocerlo, su personaje no era lo que ella esperaba.

Manejando por la ciudad supo que ver a César estaba descartado, no quería que la tensión se le notara después de esta mala noticia. Había quedado triste, es más desilusionada pero solo ella lo sabía. Necesitaba platicar con alguien para sacarse la ansiedad así que sin dudar llamó a su hermana para ver si estaba en su casa y cuando le dio el sí piso el acelerador para llegar cuanto antes.

Después de saludar a su mamá, platicar con ella y contarle como había estado la playa, regresó con su hermana que estaba terminando de acomodar unos papeles en su habitación.

-¿Puedo acostarme? –mientras se acostaba-
-Estás acostada ya...
-¿Qué paso, de dónde vienes tan temprano?
-No sé qué va pasar con la novela... no creo que entre. –abrazaba una almohada-
-¿Qué novela? ¿La tuya? –dejó sus papeles para acostarse apoyando la cabeza en las piernas de su hermana-
-Sí. Vengo de una reunión con Salvador y aparentemente mi papel no es el que yo esperaba. De protagonista no tiene nada...
-¿Cómo así?
-Es que... no sé, ni siquiera me dijo con certezas cual sería mi papel en la historia. Que los libretos de la primera parte apenas están terminando de confeccionarse, que los números de capítulos donde aparezco no son los que yo me imagino.
-¿Encima que es una novela corta?
-Serienovelada.
-Es la misma chingada Victoria... esto no es una serie.
-Bueno, pues así me corrigen para que diga. Y sí, si ya son pocos capítulos no quiero imaginar cual será mi personaje.
-Se supone que las cosas a esta altura deberían estar más formadas... me sorprende de Chava.
-Lo único que sé es que...

Empezó a comentarle los pequeños detalles que sabía sobre su posible participación.

-Y lo mejor fue... escucha esto... voy a ser una ama de llaves y César será mi patrón.
-larga una carcajada fuertísima-Dime que es broma...
-No... y eso es lo peor.
-Ay, algo está vibrando en mi cabeza... -no paraba de reírse-
-Sí mi teléfono. A ver déjame sacarlo... -cuando ve la pantalla se comienza a morder el labio-
-¿Qué, quién es?
-César, se suponía que nos íbamos a ver pero no... no quiero verlo después de esta noticia.
-¿Por, no es que desde antes de navidad que no se ven?
-Sí pero no tengo ganas de verlo porque voy a terminar comentando algo de la novela y no quiero que él se entere que quizás y no termino entrando. Me va matar, pero literalmente me va dejar muerta.
-César lo único que te mataría sería a besos, terminando asfixiada. No seas payasa y habla con él.
-sonríe de imaginarlo-No tendría problema...
-se ríe-Eres una pervertida. Pero... volviendo a lo serio, no entiendo por qué no quieres verlo, no hables del tema y ya.
-Es que él sabía que tenía una reunión hoy... es más creo que debe estar entrando a su reunión ahora, parece que nos llamaron a todos por separado, me imagino que supone que todavía estoy en la empresa.
-¿Y qué va pasar con lo que ya firmaste?
-No sé. Pero a mí como me plantearon las cosas hace rato no me gustaron para nada...
-Por lo menos contéstale el teléfono, sabes cómo es si lo evitas.
-Se pone de denso...
-Ya ves, ándale. Contéstale.

Intentó contestarle pero justo se cortó la llamada.

-Ya. Ya colgó... me salvé.
-se levanta riéndose-Cómo si no le gustara insistir...

La pantalla se volvía a alumbrar y claramente era el conocido por su insistencia.

-Bueno...
-Hola mi amor, ¿Dónde estás?
-En casa de Gabi. Acabo de regresar de la empresa.
-Pero como, ¿no nos íbamos a encontrar aquí, acaso ya término tu reunión?
-Sí mi amor ya terminó. Se me pasó llamarte para decirte...
-¿Se te pasó llamarme después de tanto tiempo sin vernos? ¿Es en serio?

La ridícula idea de perderte. #VyCDonde viven las historias. Descúbrelo ahora