Candy Shop /j.b[TERMINADA]

Chapter: 03

SORPRESA
Extrañaba subir capítulos por que se me confundieron los días): yo y mi cabeza de pollo. En fin a partir de esta semana todo se arreglará
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Candice's Point of View

- Ejem - dijo el barman aclarando la garganta. - Creo que la novia y el novio están tratando de llamar su atención - .

Candi oyó al barman desde el interior de una espesa niebla de lujuria, pero quería ignorarlo, si escucharlo significaba dejar el paraíso en el que se encontraba.
Fue Justin quien finalmente se apartó. Con una mirada final profunda, su despreocupada sonrisa volvió a su rostro.
Todo le pegó a la vez, y Candi se sentía como si hubiera sido arrojada desde un jacuzzi a una caída de hielo frío sin previo aviso.

Peor aún, todo el mundo en la boda - un montón de clientes potenciales, entre ellos - acababan de verla arrojándose a un extraño.
Adivinando, obviamente, sus pensamientos, Justin se inclinó y le susurró: "Nadie pudo verte detrás de mí. No hay nada de qué preocuparse".

Incapaz de mirarlo a los ojos, se volvió y se escabulló a ciegas fuera de la reunión, instintivamente en dirección al único lugar en el que ella se sentiría segura otra vez, la cocina.
Se lanzó a través de la puerta giratoria y se dirigió a la izquierda justo a tiempo para evitar una colisión con uno de los mozos. Con los ojos desenfrenados, corrió pasando el área de preparación, más allá de las cocinas, rodeó una esquina y encontró refugio en la alacena del refrigerador.

Al entrar, se dejó caer en una caja de leche que se hallaba boca abajo y trató de recuperar el aliento.
Ella sólo iba a tener que esconderse en la alacena del refrigerador hasta que la recepción hubiera terminado.

Justin' s Point of View

- ¡Que la novia y el novio gocen del verdadero amor para siempre! - Justin levantó su copa de champaña para brindar por James y Jane, haciendo todo lo posible por actuar en el rol del feliz padrino, cuando lo único en que podía pensar era en la pequeña zorra que acababa de escapar de él.

- ¿Alguien ha visto a Candi? -, preguntó Jane después de los brindis interminables. Ante las miradas perplejas de sus invitados, agregó: - Ella hizo estas trufas increíbles - .

La gente gemía con placer y lamían sus labios, y decían cosas como: "Mejor que el sexo", y "¿Hay más?"  Justin sonrió. Él debería haber sabido que Candice tenía algo que ver con los dulces. Los dulces eran, después de todo, su especialidad.
Y Candi era tan condenadamente dulce, sobre todo sus carnosos labios y la suculenta porción de piel en la base de su cuello.
No podía esperar a probar el resto de ella, pasar su lengua sobre cada centímetro de su cuerpo, desde sus pechos exuberantes y sus pezones túrgidos, que él suponía eran de un color rosa viejo sobre la piel cremosa de sus pechos, hasta el valle entre sus muslos, y...
La voz de Jane lo sacó de su sueño despierto clasificado "Solo para Adultos".

- Caray. Desearía que ella estuviera aquí, para poder agradecerle oficialmente, bueno, por todo - . Jane tomó la mano de su nuevo marido. - Si no fuera por Dulces Candi , James y yo nunca nos hubiéramos encontrado.

James se inclinó y besó a su flamante esposa. Justin viró de un pie al otro incomodo y miró hacia otro lado.
Consigan una habitación, pensó, pero luego, él había estado a punto de tumbar a Candi sobre el bar, así que ¿quién era él para quejarse?
Cuando su mejor amigo terminó finalmente de besar a la novia, se volvió hacia Justin con una sonrisa delatora.

- ¿Alguna idea de donde podría estar Candi? -

- Ni idea - respondió Justin con honestidad. - Pero estaría encantado de ir a buscarla por ti - .

- Apuesto a que sí - dijo James con un guiño. - Haz lo por nosotros-
Contento de verse relevado de sus deberes de padrino, Justin se dirigió a la puerta por la que Candi había corrido.

- ¿Alguien ha visto a una rubia pequeña correr por aquí? -

Con un gesto de la cabeza, uno de los mozos señaló hacia el pasillo detrás de la zona de preparación y las cocinas.

- Ella se fue por allí. -

Justin le dio las gracias. Una vez que había caminado alrededor de la esquina en el área oculta, detrás de la cocina, vio dos grandes puertas, lo suficientemente grandes como para que él pasara. Al abrir la puerta a su derecha, se dio cuenta de que era un congelador comercial, lleno de envases de helados y enormes bolsas de hielo.
Cerró la pesada puerta del congelador y volvió su mirada hacia la puerta del refrigerador, una amplia sonrisa se iluminó en su rostro. Casi sintió pena por su pequeña y caliente fabricante de dulces.
Ella podía haber tenido la intención de refrescarse en la nevera, pero él iba a asegurarse de que se pusiera un centenar de veces más caliente.

Candice's Point of View

Candi oyó un ruido en el pasillo y miró hacia arriba a través del grueso y congelado cristal de la puerta del refrigerador. Un hombre alto con un esmoquin estaba de pie junto a la puerta.

- ¡Oh, no! - Ella trató de retroceder aún más en los estantes, con la esperanza de que su vestido de color rosa oscuro le ayudara a mezclarse con las cajas de suministros.

Tal vez si ella no se moviera, no hiciera ningún sonido, ni si quiera respirar incluso, él se fuera. Y ella podría ser dejada en paz con el recuerdo del sabor de su piel y los latidos de su corazón en sus labios.
Candi había pasado los últimos diez minutos frotándose la piel de gallina en los brazos y tratando de convencerse a sí misma que ya había tenido suficiente de Justin. No tenía necesidad de verlo, no tenía necesidad de tocarlo, no necesitaba más de sus besos.
Pero ahora que él estaba de pie a escasos metros de ella, de alguna manera ella había sabido todo el tiempo que él la encontraría, y ahora que lo había hecho luchaba por no tirar la puerta, jalarlo dentro del espacio reducido con ella y rasgar su ropa.

¿A quién quería engañar? Ella no iba a conformarse con sólo el recuerdo de él, con sólo sus sueños de lo que sería sentirlo desnudo frente a ella, retorciéndose de placer.
Al mismo tiempo, una molesta voz interior de la razón le decía a Candi que no tenía sentido ceder a sus bajas necesidades. Una noche de alucinante sexo no iba a ayudar en nada. No iba a salvar su negocio. Y no iba a salvar su patética vida amorosa.

Aunque, pensó elevando ligeramente los labios, de seguro sería muy divertido.
La perilla de la puerta giró y ella se puso de pie y se apoyó en la pared, apretándose contra el borde frío de los cargados estantes tanto como podía.
En la tenue luz de la nevera, la cálida voz de Justin la envolvió.

- Pensé que te encontraría aquí. -

Candi estaba tanto alarmada como excitada por su presencia, por la forma en que llenó la habitación con su esencia. La loca mezcla de sentimientos hizo que fuera difícil para ella hablar. Una vez más.

- Yo, eh...- dijo ella mientras él entraba al espacio refrigerado con ella.

A menos de metro y medio de ella, que era por lo menos metro y medio demasiado cerca para la comodidad de Candi, él cerró la puerta detrás suyo con un suave clic, sin quitar los ojos de ella. Con su voz mezclada con humor, dijo:

- No hay tranca, pero al menos es privado. Solo debemos tener la esperanza de que nadie necesite leche - .

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UUUUH! !!
Jajaja las amo pero lo dejaré hasta aquí , no me odien
Pueden pasar Muchas cosas
♡