Candy Shop /j.b[TERMINADA]

Chapter : 05

Justin' s Point of View

A la mañana siguiente, la sonrisa de Justin iluminó ese día nublado de invierno. Él planeó reportarse en su oficina, hacer que su asistente le despejara su agenda, y luego iba a salir para localizar a Candi Moore.

La dulce y deliciosa Candice Moore.

Justin pasó el letrero de Sweet Returns: Consultores en el Sector de Confitería, he ingresó en el edificio de su oficina en el centro de Albany, Nueva York.
Alice, su ayudante, ya se encontraba trabajando desde hacía varias horas, elaborando facturas, cuadrando sus cuentas, ocupándose que todo funcionase sin ningún inconveniente de modo que todo lo que él tenía que hacer era pensar en la mejor forma de vender dulces.

- El rey ha llegado finalmente - dijo ella, apretando la boca mientras miraba el reloj.

Alice había manejado su oficina desde el día en que había colgado su placa hacía ya quince años y muchas veces lo trataba como si él no fuera más que un chico rebelde, que necesitaba una persona que le marcara las reglas una y otra vez para permanecer en el camino correcto.

- Justo a tiempo. Tiene que leer varias cosas antes de reunirse con su nuevo cliente. -

Justin se sentó en una silla, con la culpa pesando sobre él por un momento. ¿Cómo iba a dejar alguna vez que Alice se fuera? Cuando cerrara su negocio de consultoria en el sector dulcero y se uniera a su hermano mayor, Ed, en la firma de contabilidad el mes siguiente, eso iba a romperle el corazón a Alice. Por no hablar de la desaprobación. La sonrisa reapareció en su rostro.

Alice amaba desaprobar cualquier cosa que él hiciera. Irritarla era parte de la diversión de trabajar con ella.
Prometiéndose a sí mismo que habría de sentarse y tener una charla con ella pronto, sacó ese pensamiento de su mente.

- Necesito que me despejes mi agenda del día de hoy - Y espero que para el próximo mes, pensó Justin.
Ya estaba imaginando un viaje a las Islas Hawaianas con Candi utilizando únicamente un diminuto bikini en una calurosa playa de arena blanca. Pasar largos días bajo el sol, y luego noches perfectas bajo las estrellas. Con Candi.

La adorable y sensual Candice.

Cortando su fantasía, Alice dijo:

- No se puede hacer. Usted tiene una consulta importante el día de hoy - . Su voz estaba llena de censura. Justin se preguntó si ella había utilizado rayos X para adivinar sus pensamientos más íntimos. Él se mantuvo firme.

- Cancélala -.

- No puedo y no lo haré. La mujer con la que hablé sonaba sumamente amable y dulce, verdaderamente encantada de elaborar dulces y, sobre todo, parecía necesitar con desesperación su ayuda-. Justin le frunció el ceño a Alice, luego se levantó de la silla de cuero y se marchó a su escritorio.

- Bien- . Alargó la mano para tomar el paquete de información del cliente.- Voy a ir-

Agarró el archivo sin mirarlo, impaciente y enojado, pues no iba a ser capaz de ir a ver a Candi de inmediato. A quién le importaba la venta de dulces, cuando lo que le esperaba era mucho mejor que cualquier caramelo masticable, bolitas de caramelo agridulce, o barra de chocolate.

- ¿Quién es el cliente?-

- "Dulces Candi".-
Justin casi dejó caer la carpeta.

- ¿Acabas de decir "Dulces Candi"? -
Con un destello de curiosidad en sus ojos Alice asintió con la cabeza.

- Así es. Mi hermana vive en Saratoga con ese esposo chiflado que tiene y la última vez que fui a visitarla, pasamos por "Dulces Candi". Las trufas más deliciosas que he probado-.