Relatado por Andreu Buenafuente
Silvia y yo nos quedamos mirándonos sin saber que hacer hasta que escucho a Silvia...
-Ni se te ocurra parar ahora por dios Andreu- Me dice con cara de estar apunto de llegar al orgasmo.
Yo estoy apunto también, pero ¿como vamos a seguir si están llamando?. Voy a preguntar quien es, cuando Silvia se me adelanta.
-Si? quien es?
-Señora, soy el repartidor, vengo a dejarles la comida que han pedido.
Yo me cago en el chino, en la puntualidad y en todos sus antepasados. Silvia empieza a moverse encima mía, mientras yo le miro con cara de desconcierto, mientras se sigue moviendo, yo le sigo el ritmo y volvemos a continuar a lo nuestro, yo no puedo hablar.
-Mira.. dejalo delante de la puerrrtaaaa... que me pillas mal en este momeeeeeeenntoooo...- reponde Silvia entre gemidos.
-¿Esta usted bien señora?
-Si sisi sisii, es que me pillas en el baño con retortijooooooneees, dejalooo ahiii y que te pague la chica que esta abajooooo, le dices que es de parteee de Silvia Abril..
Yo no se ni como esta pudiendo hablar esta mujer, menudo cante.
- ¿Quiere que le avise que se encuentra usted mal?
-NOooooooooo. - contesta Silvia en el momento que pego otro empujón en su interior.
-Tranquilo, ya casi estoy mejor, haz lo que te he dicho y gracias.
El chico se va dejando la comida en la puerta y durante diez minutos más seguimos a lo nuestro, yo me introduzco en ella una vez más jadeando (mientras intento callar los gemidos y gritos de Silvia con mis besos) y tenemos uno de los mejores orgasmos de nuestra vida, cayendo uno en los brazos del otro.
Relatado por Silvia Abril
La respiración agitada de los dos resuena en el despacho y, pasado medio minuto, susurro:
-Nene... me estoy clavando el canto de un libro en la espalda.
Rapidamente, Andreu reacciona y me aparta de la libreria, me mira y me pregunta.
-¿Todo bien?
-Más que bien nene, más que bien
Terminamos de vestirnos y cojo una botella de agua y bebo, luego le doy a el para que beba, pobrecito mio como suda, un día de estos se me deshidrata por el esfuerzo. Recogemos la comida que está en la puerta y nos ponemos a comer. Entre los dos empezamos a comentar que pobre chino, se habrá asustado. Terminamos de comer y yo me dispongo a irme.
-Gracias nena por regalarme una mañana diferente -Me dice dándome un beso
Aiiiiis, si es que me lo comooo!!!
-Todas las veces que tu quieras cariño... ¿ves como el despacho tiene diversas funciones? - Le respondo muerta de la risa.
-Ya le iremos sacando más provecho.
Me despido de mi moreno y cuando bajo a recepción le pago a la chica que me pregunta si me encuentro mejor... Si ella supiera...
Me encamino a la rambla, ya que he quedado allí con Ana para luego irnos juntas a plató.
Relatado por Ana Morgade
Estoy sentada en la cafetería cuando veo llegar a Silvia.
-Por fin llegas
-Lo siento gafitas, había un atasco enorme.
Nos sentamos a tomar algo mientras le pido ayuda para los preparativos de la boda. La boda la celebramos en septiembre, que no me quiero cocer con el calor y de momento Silvia me está ayudando con las invitaciones y los regalos para los invitados. No puedo tener una amiga mejor.
-Entonces ¿hago eso? -Le pregunto indecisa a Silvia
-Hombre, yo creo que si, mirando vamos a ser tantos como los que fueron a mi boda, o incluso menos, más o menos 40 personas. Yo lo haría ahí, es un sitio super bonito y además te permite tener una fiesta super chula.
-Pues entonces lo haremos allí, gracias catalana por ayudarme tanto.
-No se dan cariño, para eso están las amigas. - me contesta Silvia tras darle un trago a su cocacola
-Oye que pañuelo más bonito ¿ es nuevo? - le pregunto mientras se lo quito.
Yo abro los ojos como platos al verle el cuello a Silvia.
-Hija de mi vida ¿has estado con tu marido o con un vampiro? madre mía como llevas el cuello.
-Me lo dices o me lo cuentas, buff el señor cuando se pone se pone y mira que le tengo dicho que no me haga chupetones o si me los hace que no se vean, pero es que cuando me he mirado al espejo fijate que cuadro me ha echo, yo se que le gusta la pintura, pero yo no soy un lienzo. - me dice Silvia bromeando.
Ahí Silvia me cuenta un poco por encima lo que hicieron en el despacho de Andreu hace unas horas.
-Sois unos bestias, siempre estáis igual, parecéis perros, allí por donde vais dejáis la huella. -Comento yo muerta de la risa.
-Como si aquí la señora presente fuese una santa, no te he escuchado yo veces en el vestuario con Berto, como era... Aaa si... Oooh Berto, no pareees, si sigueee.
-Callate tonta. - le digo pegándole en el brazo y devolviendole el pañuelo, porque lleva el cuello bonito.
Son las 7 y se nos ha echo tarde, cogemos el coche y nos dirigimos a plató... hay que trabajar.
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Y De Pronto El (Historia de Silvia y Andreu) TERMINADA
RandomHistoria inventada de como se conocieron Silvia Abril y Andreu Buenafuente y como ha sido su relación (escrita desde la admiración y el respeto)