Capítulo 1(segunda parte).

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Aquí va el segundo. O, bueno, primero parte dos.
Hay cuatro partes del primer capítulo, presentando a cada signo de tres en tres.

Eso es todo. Esperamos que la historia os vaya gustando.
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Acuario levantó la cabeza de golpe al escuchar un sonido pasando cerca de su oreja. Como algo lanzado con mucha fuerza, o algo chocando. "¿Que coj...ines?" Miró al rededor para tratar de ubicarse. Un... ¿laberinto de arbustos?

Sólo habia altos arbustos a su alrededor, y... ¡Oh! Había un cuchillo largo insertado en una rama del laberinto. Lo agarró y lo miró con curiosidad.

De repente, comenzó a dar cuchillazos a diestro y siniestro, cortando trozos de enredadera y ramas, saliendo del laberinto a su (poco ortodoxa) manera.

Con una sonrisa, fue atravesando cada capa de laberinto a corte limpio. "Yee-haw!" Pensó Acuario con una sonrisa amplia. "Voy a atravesar esto a mi manera, baby."
Escuchó unas voces, parecía que una pelea había muy cerca."uuh,¡Bardo!" se dijo y caminó hacia delante con seguridad pero con cuidado, levantando el arma con actitud amenazadora.

Escorpio volvió a gritar al irritante chico de hielo delante de ella.

-...¿Eh? ¡no es culpa mía si eres un amargado! ¡Eso no es razón para robar y lanzar mi daga! - Estaba enfurecida. Muy enfurecida. El chico la miraba con indiferencia, apoyado sobre el arbusto y expulsando furia fría por cada poro de su piel.

- No soy ningún amargado, niña. Has intentado clavarme tu "daga"-Hizo comillas con sus dedos, agregándole una mueca. - en la nuca. ¿Qué esperabas que hiciera? ¿Que estuviese quietecito y me dejase matar? Va a ser que no.

Capricornio suspiró exagerada y exasperadamente, y compuso su mejor cara de "poker-face".

Aquella morena lo estaba molestando, y mucho. Ella se había acercado por su espalda, gritando como una Banshee y con la daga alzada.
Había estado a punto de matarlo, de no ser por sus buenos reflejos y que pudo agarrarla del brazo y robarle el arma de la mano antes de que pudiese dañarlo de verdad. Y entonces, casi por instinto, lanzó la daga lejos.

El ruido de una rama al quebrarse lo alarmó, giró cabeza y se quedó mirando a un pelirrojo con los ojos como platos y el arma del crímen en la mano. Al parecer, la morena no se había dado cuenta. Casi sabiamente, trató de dar un par de pasos hacia atrás con lentitud, pero pisó una rama y consiguió la atención de la loca peligrosa. "Oh-oh. Escapa mientras puedas." Pensó cínicamente.

-¡Eh, Tú! ¡Tienes mi daga!-Gritó ella, acercándose al chico a pasos largos y decididos. El chico, alzó su brazo y de un rápido y fenomenal movimiento lanzó a la daga muy lejos de allí.

Acuario sonrió y dirigió su mirada a los dos aún desconocidos jóvenes. La chica se encontraba con una mueca de asombro junto a una mirada de furia y confusión, mientras que Capricornio solo lo miraba como si nada. Tomó ese momento como ventaja y se fue corriendo, dejando atrás a una enojada y confusa Escorpio. Capricornio seguía sereno e indiferente. Él agradeció mentalmente al chico pelirrojo por hacer que la molesta chica no le estuviera molestando más.

- Al fin...- dijo Acuario.-...sólo.-Terminó la frase con un susurro.
Cerró los ojos tratando de comprender que es lo que pasaba. No es normal aparecer en un lugar y no recordar casi nada de lo ocurrido. Pensó en que sólo estaba en un sueño o que todo era parte de su imaginación. Pero no. Sí sabía lo que estaba sucediendo, sólo quería mentirse porque no le gustaba nada lo que eso implicaba. Siguió vagando en sus pensamientos hasta que la imagen de la morena apareció bajo sus párpados.

- Muy bonita, pero está loca.-habló, aún con los ojos cerrados.

-¡¿Quién está loca?! - una voz irritante lo sacó de sus pensamientos e hizo que se cubriera los oídos.

-¡Dios mío! ¿Es que nunca te cansas de gritar?- Lo dijo alto, imaginándose que era la morena de vuelta para reprocharle que lanzó la daga muy lejos y bla bla bla. Pero no, no era ella.
Era una joven rubia que lo miraba asombrada y curiosa.

- Tranquilo. - La mujer rió y se acercó a él. - Soy Sarah. Te he estado esperando a ti y a los otros desde hace rato, ¡ven!- Caminó hasta salir del campo de visión de Acuario.

-¡¿Otros?! ¿Qué? - Preguntó confuso -¡¿Donde estoy?! ¡¿que hago aquí?!- corrió hacia ella para no quedarse atrás.

- Luego te explicaré,por ahora quédate callado y obedece.- Le ordenó. Acuario iba a replicar pero con un "¡Te callas o vuelves allí y te mueres de hambre!" de su parte, logró convencerlo.

Sarah lo guió de vuelta a el laberinto. -Espera... ahí hay una pareja de locos...- Advierte Acuario. Ella asiente y sigue caminando. Acuario encoge un hombro.

Sarah se para frente a ellos, que han vuelto a pelearse.
- Ey. -Trata de llamar su atención. - ¡Ey! -Sin conseguirlo.- ¡EY! ¡Vosotros dos! ¡Os venís conmigo!

Capricornio interrumpe la pelea, mirando a la desconocida con un ceño fruncido. - ¿Qué?

Sarah suspira, aliviada. -Vengo a sacaros del laberinto.

Escorpio rueda los ojos. - Pues no se a que esperas. Vámonos de este infierno.

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MontañaConfusa_Croacia.

El renacer de los elegidos. (ZODÍACO) (×Cancelada×)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora