Capitulo 21 No quiero enamorarme.

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Comenze a moverme en la cama, ya no tenia sueño así que  me senté en la... ¿cama? Se supone que me encontraba en el sofá. Me senté inmediatamente en la cama y cuando me senté lo vi semi desnudo a mi lado lo que me asuste inmediatamente, grite y lo empuje de la cama a lo que el hizo lo mismo pero gimió del dolor por la caída.

— auch - me acerqué a ver y el se encontraba boca arriba sobandose el golpe - la caída debió doler.

—ja... Ja... Ja - río sarcástico - estamos chistositas hoy - le extendi la mano para levantarlo y el la tomo de la mano y me jalo callendo sobre el - y podríamos aprovechar eso - rodeo sus manos por mi cintura y comenzó a recorrer mi espalda con sus grandes manos.

— ross ...

— quisiera despertar así cada mañana - sentí su eroción creciente de el sobre mi.

— Ross no creo que... - pero antes de que pudiera terminar se levanto dejando me en el suelo - ross ¿estas bien?

— ya entendí no quieres nada con migo, y yo estando como un cursi tarado detrás de ti.

— ross - me acerque a el - mira... Yo en este momento - me dio la espalda .

— estas con jackson.

— el solo es mi...

— ¿amigo? Como si yo me tragara ese cuento, mira te presento a mi amiga, cojo con ella y ella tiene derechos sobre mi al igual que yo pero...  oye la mejor parte ¡¡¡no somos mas que amigos!!! Claro y yo nací ayer...

— pues parece - susurré a lo que el llego a escuchar y se dio vuelta.

— pero aun así decidiste seguirme y aquí estas no, que zorra eres en verdad... - le di una bofetada a lo que le dio vuelta la cara.

— y aun así sigues tras mi. En realidad sigo siendo tan siega pero en verdad que bajo e caído.

— claro, tu bajo... Como si yo no lo hubiera echo fijandome en ti. Y no puede ser posible que quieras utilizar me y luego irte como si nada.

— y que ¿ a eso no te dedicabas?¿ o cambiaste de profesión de puta regalada a abogada de los derechos humanos.

— no soy ni una de las dos y por esa razón no te permito que me trates así, mi error fue creer que eras diferente, nunca devi haberte conocido... Ah y Hazme un favor y desaparece del mundo ¿si?

Salí de la habitación, prácticamente llorando de allí, pero esta ves no fue como antes, ¿ross en verdad pensaba todo esto de mi? No estaba sastifecha por la forma en la que la dijo, en realidad era sabido que el creía que yo era una golfa como las demás pero con migo se equivoca. Mire por toda la casa buscando algo, un teléfono o un cuchillo, pero lo primero que encuentre me servirá.
Para mi desgracia encontré el teléfono y fue cuando desidi llamar a jackson, pero estábamos en medio de la nada por lo cual significaba que no había señal y esta ves me voy a arriesgar a salir de la casa buscando algo, algún camino, alguna señal.

— No te preocupes por tu hermanito necesitó, anoche conteste el mensaje, decía que si te encontrabas bien o si querías que te pase a buscar y yo conteste que no y que te quedabas en un hotel porque no llegarias a dormir.

— ¿que pasara con las clases?

— se suspendieron, el colegio se inundo así que...

— ¿me podrías llevar a mi casa?

— Laura ¿estas llorando?

Me di vuelta y comense a caminar hacia la salida.

— ¿ a donde vas laura?

— si no piensas llevarme a mi casa, buscare la forma de llegar.

— me gusta que seas así pero no se puede sigue lloviendo.

— me da lo mismo - abrí la puerta dispuesta a salir pero el la serró y me acorralo contra ella.

— te enfermaras - toco mi cara con su cálida mano - y no quiero que te pase nada.

— como si te importara - en un intento fallido de alejarlo logre que se acercara mas a mi.

— Laura en verdad, perdoname yo no quise decir eso...Tu eres diferente...

— diferente en que... En lo peor de zorra o en lo igual de idiota que las demás.

— tu eres mas que eso ...

— soy basura.

— eso no es así, tu eres luz - acerco su rostro cerca de mi cara - la luz que necesita mi vida.

— soy lo contrario a la luz y eso todos lo saben.

De repente sus labios se juntaron con los mios en un cálido beso, su mano derecha acarisiaba mi mejilla limpiando la lágrima que habri caído de ella. Luche contra mi misma por no seguirle en beso pues, fue imposible, mordió mi labio inferior haciéndome gemir y en sus labios se formaron una pequeña sonrisa, sus besos cada ves iban aumentando su velocidad y fue entonces cuando lo detuve.

— voy muy rápido ¿verdad? - dijo tratando de normalizar la respiración.

— no sino que, no se te abras dado cuenta de que necesitamos oxigeno para vivir.

— muy cierto.

Se separo de mi y me miro con esos ojos color avellana, que, dios no se que me provocan en verdad y dijo:

— Laura ¿me perdonas?

— las segundas oportunidades no existen para mi - bajo la mirada, necesitaba tenerlo serca así que decidí romper eso - pero... Con tigo es diferente - sonrió inmediatamente y me abrazo.

— no te defraudar en verdad, no lo are - susurro en mi oído - había descubierto mi punto débil , su respiración contra mi cuello y ese beso que dejo me hizo desearlo pero, no quiero salir lastimada y no quiero enamorarme. Menos de el...

La Luz Al Final Del CaminóDonde viven las historias. Descúbrelo ahora