Capítulo 15

104 14 0
                                    

Me siento en la silla libre que está a su lado.

—En cinco minutos ve a la puerta— me susurra Chase al oido y nada mas terminar se va.

No vayas a volver a ponerte nerviosa, no creo que tu corazón pueda resistirlo

Miro rapidamente mi muñeca y pongo el cronómetro, ya se que es un poco exagerado pero quiero ir y con lo despistada que soy me puedo retrasar.

2:49

Respiro profundmente y espero a que pase el tiempo. Empiezo a mover mis piernas y mis manos. Me va a dar un ataque como Chase siga haciendo lo que sea que esté haciendo. Voy a mi bolso y saco un kitkat ¿qué? el chocolate me tranquiliza

Eso va en contra de las creencias de lo que hace el chocolate con los nervios

Bueno, pues yo soy especial y me tranquiliza

4:58

Me levanto del tirón de la silla y me voy a la puerta. La abro y le busco con la mirada, al no encontrarlo por ninguna parte cierro la puerta detrás de mi y me dirigo hacia la cafetería para comprarme unas patatas.

—No sabía que eras tan puntual, Amy—dice Chase a mis espaldas dandome un susto de muerte

—¡¿Qué mania tienes con aparecer así siempre?! —digo con la mano en el pecho y los ojos bien abiertos—,Casi me da algo— susurro mientras me doy la vuelta. Se rie ante mi comentario haciendo que relaje un poco el gesto y sonria levemente

—¿Lo siento?

—¿Es una pregunta o una afirmación?—pregunto levantando una ceja y acercandome un poco a el

Muy bien Amy, que no se note que te va a dar un paro cardíaco en cualquier momento

—No lo se— dice acercandose también—, ¿tu crees en el dicho ese de a la tercera va la vencida?—sigue acercándose

—En mi opinión no tiene nada que ver pero suele pasar— está a dos centimetros de mi cara, me va a dar una torticolis como siga con el cuello tan inclinado hacia arriba

Maldita jirafa

—¿Qué te parece si vemos si es verdad ese dicho?

—Estas hoy pregunton eh por m...— no me deja terminar ya que sus labios tocan los mios en un pequeño movimiento haciendo que no pueda acabar la frase. Me quedo sin palabras y totalmente en shock. Mis manos estan a mis costados, parece que no tienen vida, las suyas al contrario estan en mis cachetes impidiendo que me separe de el.

—Sabes a chocolate— dice sonriente minutos mas tarde en cuanto nos separamos

—Será porque me acabo de comer una barrita de kitkat— contesto irónica tomando una profunda respiracion.

—Mm...Me encantan los kitkats— dice para después volver a unir nuestros labios en un dulce beso.

Problemas PendientesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora