Cap. 18

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[Dimitri.]

Mirar a Rose en los brazos de Adrián era una punzada al alma.

Saber que lo que había entré nosotros se acabo todo por que no supe escucharla es algo que siempre tendría en mi mente.

La amó cómo jamás llegué a imaginar.

Apartando mi mirada de ellos decidí ir hacía donde estaba Lissa para ver cómo se encontraba.

Sabía que ella estaría en la clínica para ayudar lo más posible.

Cuando llegué pude ver una gran conmoción en la clinica.

- Déjame!! - Gritó Jill.

No sabía que ella estuviera aquí.
Me acerqué asta donde estaba ella.

- Que es lo que pasa aquí!? - Demande cuando vi que Eddi sujetar a Jill para que ella no se acercara al guardián que estaba en el suelo aún.

Mía intentaba tranquilizar a Jill junto a Eddi.

Me acerqué asta el guadian que esta siendo visto por una enfermera, pude ver a mi alrededor y en la mirada de varios guardianes se encontraba el sentimiento de descompresión.

Y cómo no estarlo si la princesa Jill había golpeado a un guardián sin motivo. Oh al menos yo no sabía cuál era el motivo.

Miré a Jill que no dejaba de gruñir.

- Que fue lo que pasó? - Me levanté y miré a Jill. - Te hizo?

- No necesito que me cuiden. - Me miró a los ojos. Y puedo jurar que ella me estaba estudiando. Aún que no se por qué.

- El que necesita que lo cuiden... - Habló de nuevo. - Es él. Porque cuando Rose sepa lo que hizo lo matará.

Jill se relajó y Eddi la soltó, ella se dio media vuelta y se fue.

- Lissa no esta bien. - Miré a Mía. - Ella se desmayó. La están atendiendo.

Me dirigí asta donde estaba siendo atendida Lissa.

- Que fue lo que pasó? - Le pregunté al médico que atendía a Lissa.

- Sólo es el agotamiento. - Contestó él.

Mía me tomó del brazo y me hizo un ademán de que la siguiera.

- Guardián Belikov. No estoy muy segura que fue lo que pasó pero... - Mía se mordió el labio inferior. - Cuando yo llegué un guardián dijo que alguien había usado... Compulsión con la Reina.

- Que!? - No era posible. Quien aria algo así?

Unos estruendos se escucharon fuera de la clínica y varios guardianes salieron para ver que era. Pero parecía que no podían controlar la situación. Quería ir pero mi deber es estar a lado de Lissa si alguien había intentado usar compulsión contra ella, no podía dejarla sola.

- Ve. - Miré a Mía. - Yo cuidaré de ella. Tal parece que lo que pasa allá. - Miró donde se mira va la conmoción. - Es importante. Ve.

Hacenti y fui a ver que era lo que ocurría.

Un par de guardianes habían sido noqueados y se encontraban siendo ayudados por las enfermeras. Cuándo pude divisar la fuente de toda la conmoción no pude evitar sonreír. Roza.

La tomé de la cintura para alejarla ya que Eddi forsejeaba con Jill que intentaba alcanzar a un moroi que le sangraba la frente.

- SUELTAME BELIKOV!! - Rose hacia todo lo posible para soltar mi agarre.

- No Roza.

- CÁLLATE BELIKOV! - Rose enteró sus uñas en mi brazo. - SUELTAME! DEJA QUE MATÉ A ESTE BASTARDO DE MIERDA.

- No vale la pena Roza. - Intenté tranquilizarla.

- Quieres dejar de llamarme así! - Me miró a los ojos. - Oh al que voy a matar será a otro.

Pude ver la oscuridad en sus ojos. Ella estaba siendo con sumida por ella.

- Roza. Escucha lo que dices. La oscuridad te está dominando.

- No, no lo ase. - Rose apartó su mira y miró a uno de los guardianes que la mira va con odio.

- De seguro será acusado de tracción y será castigado como es debido. - Habló el guardián. - Pena de muerte será lo que le darán.

Rose dobló su esfuerzo por librarse de mi agarre. - CREES QUE VOY ADEJAR QUE ALGUIEN TOQUE A MI HIJO! ANTES ACABARÉ CON TODOS!

- De que están hablando? - No entendía bien.

- De que el bastardo de está zorra morirá. - Habló el guardián.

Cuando entendí cada una de las palabras y las acciones de Rose, supe lo que tenía que a ser. Solté a Rose.

Y me acerqué al guardián y lo golpe con toda la fuerza que tenía. Él calló al suelo y me lancé sobre él para matarlo.

Lo único que podía pensar es que él había dicho que mi hijo corría el riesgo de ser acusado de traición a la corona.

No eso no pasaría. Rose no lo permitiría. Lissa no lo permitiría. Yo no lo permitiría.

Sentí que alguien tomó mis hombros y me obligó a dejar de golpear al guardián.

- No está pensando claramente. - Escuché la melodioza voz. - Mirame. - Quería ver la pero también quería desaparecer a golpes al sujeto. - Tienes que tranquilizarte Belikov.

Cuando me pare del suelo la abrace.

- Roza no voy adejar que nada le pase a nuestro hijo....

《...》

Sé que debería de a ver un extra pero me fue difícil escribirla... No es tan fácil crear una situación en la que Dimitri y Rose tengan una noche candente.

Me alegrará ver que les gusta mi historia y por lo que veo a muchos les gustaría que Rose y Dimitri regresarán...

Mmm... No sé tal vez.

Esperó tener el domingo el extra.

Sin Alma (Estado De Edición)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora