4

14 4 0
                                    

La amistad que mantenía con Luis era lo mas hermoso que hasta la fecha me había sucedido. Como dije antes, lo que yo buscaba era paz. Y solo él me la daba. Somos amigos desde hace 6 años.

Recuerdo que mi primer día de clases en la secundaria yo hiba muy nerviosa. No sabia si me hiba a separar de mis amigas o con quien me tocaría. Entre al salón que me habían indicado y vi a varios compañeros ya sentados. Por suerte de Dios, algunos eran conocidos, así que sin voltear a ver a nadie mas me diriji hacia él lugar donde estaban sentadas mis amigas.
Comenzaron las clases. Y como es normal, pues teníamos que presentarnos ante los nuevos compañeros. Bah, eso nunca me a gustado. No me gusta hablar mucho. Y mucho menos enfrente de las personas.
Comenzaron a presentarse. No preste atencion a los que estaban pasando al frente. Se me hacia aburrido. Talves habían pasado algunos 3 cuando escuche a la maestra decir
-Esthela, por favor pasa al frente. Di tu nombre, de donde vienes, que te gusta hacer y alguna otra cosa que quieras agregar.

Estaba sentada a mitad de salón. Algo nerviosa pase hacia él frente.
- hola. Buenos días. Me llamo Esthela tengo 12 años. Vivo a 11 cuadras de aquí. Cumplo años en julio asi que no se preocupen por él regalo, no van a alcanzar a darmelo. Me gusta leer. En la primaria participe en varios concursos. Y bueno... Eso seria todo.

Pase a mi asiento y volví a sumergirme en mi pequeño mundo. No puse mucha atención pero creo que la maestra nombro a un
Chico a que pasara, no se porque pero me dio curiosidad  por escucharlo. Cuando llego al frente se noto que se puso nervioso. Comenzo a jugar con las manos y empezó a hablar.
-yo soy Luis. Tengo 12, cumplo en enero así que conmigo si se tienen que preocupar por él regalo -se escucharon algunas pequeñas risas, que simpático, le dio vuelta a lo que dije- me gusta él fútbol, me gusta jugarlo. No me gusta leer -osea! La trae contra mi?- vivo a 11 cuadras de aquí y en la primaria procure pasar desapercibido. Gracias.

Que intento decir con eso? Que yo entre a concursos solo por llamar la atención? Que le pasa! Genial primer día y ya odio a alguien.
Él resto del día fue algo aburrido. Todo iba tan bien  hasta que la maestra nos puso un trabajo en binas. Ella escogería a las parejas y adivinen que? Me toco con Luis.

Saliendo de clase quedamos que nos veríamos a las 5 de la tarde en mi casa para hacer la tarea.
Bendita maestra y sus ganas de conocer nuestras metas.

Llegue a mi casa y como casi siempre, mi mama no estaba.
Así que yo me puse a limpiar la sala y la cocina. Cuando termine aun faltaba una hora y media para que Luis llegara; así que me puse a picar fruta y a buscar música para poner, después de todo no soy tan grosera como para no invitarle ni agua. Termine y hacia mucha calor y sude mucho así que decidí meterme a bañar. Estaba terminando de hacerme él chongo cuando sonó él timbre. Cheque la hora; las 5 en punto
-valla! Al menos es puntual-dije
Salí de mi cuarto y fui a abrir la puerta.

Abrí la puerta y ahí estaba. Traía unos jeans negros ajustados y una playera lisa color blanco. No puedo negar que se veía muuuy bien. En la escuela no le preste mucha atención pero... Realmente se la merece, es alto, piel aperlada, su cabello es negro y sus ojos, tiene unos lindos ojos cafés con unas henormes pestañas y unas muy tupidas cejas...
-Tan mal te caí?- me hablo sacandome de mis pensamientos.
-eh?- le pregunte desconcertada.
-que si tan mal te caí como para que no me dejes pasar a tu casa a pesar de que tenemos una tarea que hacer juntos?- me respondió sarcástico.
-no, para nada. Por favor pasa. - le dije, y le señale la sala.
-y bien? Que ideas tienes?- le dije.
-ideas? Yo? Pero si aquí la que es inteligente eres tu no es así?
-yo? Porque lo dices?- le conteste sentándome en él sofá de enfrente
-pues de las dos personas que estamos en la habitación la que entro a concursos eres tu. Por cierto, quien mas esta aquí?- me pregunto mientras veía hacia la cocina.
-nadie, solo los dos. Mi mamá no esta- le conteste despreocupada
-y tu papá? Tus hermanos?
-es algo que no te importa- le repondi cortante - lo que debe importante es la tarea y punto.
-esta bien, esta bien. No te enojes, pero vas a ver que un día me vas a contar todo de ti.
- ajá, si. Lo que tu digas- le conteste de mala gana.

Esa tarde a pesar de todo, me la pase bien. Luis me hizo reír mucho. Aunque en ese momento me costaba aceptarlo no era tan mala onda después de todo.
Los días siguientes me fue callendo mejor. Al punto de que después de unos cuantos meses se convirtió en mi mejor amigo, mi paz, la persona con quien me desahogaba, alguien muy necesario para mi.
Se convirtió en él amor de mi vida.

Pero...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora