En todo el camino estuve en silencio y texteando con Liah acerca mi mudanza, y que no se olvidara de mi, pues de ella iba a ser muy difícil hacerlo.
En un abrir y cerrar de ojos llego a mi nueva casa, era bastante simple, mi madre estaciona el corolla en el garaje y entramos y lo primero que vi fue la cocina, seguido de el comedor y la sala, era una casa de un piso, pero era bonita, al salir por la puerta trasera llegamos a la terraza con techo en caoba y tenia un BBQ, una mesa de billar, una barra con tipos de vino de diferentes países distintos y unas bocinas con unos micrófonos por lo que apuesto que es un karaoke.
Luego de ver toda la casa entre a mi habitación y acomode toda mi ropa, zapatos etc, no cabe decir que no me gustan los trajes ni zapatillas, soy una rubia de ojos azules muy rara, no soy de el estereotipo de chicas deseadas ni populares y mucho menos fresita.
Luego de pasar como 1 hora y media y luego de una siesta, aproximadamente 2 horas, sali a conocer el lugar, tenia puestos unos shorts, unas vans,una camisa negra y una gorra vino puesta para atrás y como no pensaba caminar tenia mi longboard.
Al llegar a la cancha vi varias personas entre ellos un chico me llama y me dice para enseñarme el lugar, su nombre s Max un hermoso chico de ojos azules, dientes perfectos, sin duda uno de los mas codiciados, veamos cuanto le dura en cuanto llegue mi hermano al colegio... Creo que se pondrá un poco grave la competencia.
Luego de una larga noche pues ya eran las 10 y aun seguía hablando y viendo el lugar, tuve que irme a casa y Max no dudo en acompañarme y de una vez intercambiamos celulares, cuando se iba a ir me dio un beso en el cachete y tenia un perfume que me encantaba el CH creo que gano mas puntos mi querido Max.
Luego de un baño de agua caliente al recostarme en mi cama me llega un mensaje de texto
-OYE PERRA ESTAS VIVA?
A lo que contesto
+EY! Hierba mala nunca muere...Pues ya entienden pq Liah me cae tan bien.. Somos tal para cual y pues, es mi Same.