¿Qué es esto? LuffyxNami

Actuacion Improvisada

Mientras tanto el capitán soñaba algo parecido.

Estaba parado en medio de aquellas nubes, no estaba Nami, el cielo estaba completamente cubierto.

Una voz se empezó a escuchar, una voz que hacia eco al sonar.

-Luffy... -la voz pronunció su nombre, tenia miedo ¿como era que sabía su nombre? -¿cuánto sabes de tu navegante? -no espero respuesta -¿Crees que sea fácil ser Nami?

-¿Donde estas? ¿quién eres?

-Tú misión será... -interrumpió.

-¿Por qué estoy aquí? -no dejaba de cuestionarse.

-Estaba observando su situación, por lo visto eres el único que aún no comprende lo difícil que es ser alguien como ella. Los demás la aceptan pero a ti te cuesta trabajo, la admiras por el simple hecho de ser tu navegante.

-Claro que no, Nami sabe muchas cosas.

-Lo vez, no entiendes lo difícil que es ser una persona como ella. Pero tranquilo.

Entonces apareció aquella imagen de ella parada justo enfrente de el, todo comenzó a teñirse de rojo, el cayo inconsciente antes de saber que había pasado.

Ambos despertaron después de aquel sueño, Nami se dio cuenta que el se había quedado dormido junto a ella. El sol comenzaba a salir ¿tanto habían dormido?

Se miraron como si supieran lo que pasaba en la mente del otro. Luffy sonrió y abrazo a Nami esta quedo consternada pero dejo que el azabache lo hiciera, después de ese sueño sentía que no volvería a verlo con los mismos ojos.

Conversaron un rato mas hasta quedar de acuerdo en que fingiría ser los dueños de los cuerpos hasta averiguar como regresar a su respectivo cuerpo.

Nami lo tendría un poco fácil ya que fingir ser un idiota era fácil. Por quien se preocupaba era por Luffy, después de todo el no sabia nada de navegación o de modales.

La hora del desayuno llego Sanji había preparado demasiada comida, al enterarse que su capitán había hecho guardia otra vez sabia que estaría con demasiada hambre.

Todos se sentaron a desayunar todo estaba tranquilo ninguno de los dos había hablado esto preocupó a algunos. Cuando terminaron de desayunar Nami se llevo a Luffy estarían pendientes por si el clima cambiaba.

-Están actuando un poco extraño ¿no crees cocinero-san?

-Pude notarlo Robín-chan -decía sirviéndole un poco de té -solo espero que Luffy no este haciendo nada extraño, nadie toca a mis bellas damas.

La arqueóloga comenzó a reír, después de todo ella sentía atracción hacia el espadachín aunque no se atrevía a decírselo.

Chopper y Usopp se habían dedicado a observar a sus nakamas, nada extraño, Nami estaba sentada mirando el cielo mientras que Luffy estaba en traje de baño listo para tomar el sol.

-Nee... Luffy -le llamo el nariz larga -vamos a jugar.

Al escucharlo ambos voltearon -gracias Usopp pero me quedare aquí un rato -sonrió.

-Luffy... ¿te encuentras bien? -pregunto el reno lanzándose encima de el.

-Tranquilo Chopper, prometí a Nami quedarme quieto al menos un día.

-Eso es mas extraño pero bueno... vámonos Chopper.

Comenzaron a caminar, sin duda seguirían vigilándolos.

Nami tenia unas enormes ganas de leer un libro pero no podía hacerlo.

-¿Crees que pueda estirarme?

-Supongo que si, después de todo es mi cuerpo... inténtalo.

La navegante intento hacerlo, solo había conseguido cansarse después de todo no tenia idea de como hacer algo así.

Por otro lado del barco estaba cierto marimo entrenando, levantaba pesas con sus pies, estaba cansado pero algo en su mente le decía que continuara.

Después de un rato bajo a la cocina por un poco de agua, entrando se encontró con cierta azabache, estaba leyendo un libro mientras bebía té.

-Adelante espadachín-san -sonrió.

-Tsk... -y entro a la cocina, tomó un vaso con agua y tomó asiento -Luffy esta actuando extraño.

La arqueóloga sonrió, pues noto como el peli-verde intentaba hacerle plática -No solo el, navegante-san también lo hace.

-Tal vez estén saliendo.

-Navegante-san es mi amiga, ya me lo habría dicho.

-Como sea, yo creo eso

-¿Y tú, espadachín-san? -preguntó sacando uno de sus brazos tomando a Zoro de la mano.

Este inmediatamente se sonrojo, el contacto con ella era un poco extraño -¿Yo... que?

La arqueóloga se levantó y se acerco a el, quedaron muy cerca sus rostros -¿sales con alguien?

Sin duda estaba rojo como un tomate, iba a levantarse no podía responderle algo así, ya que no la consideraba su amiga, entonces la oji-celeste lo beso, al principio se negaba, poco a poco fue cediendo.

Al separarse ella paso su mano sobre el rostro del peli-verde, sonrió y se marcho.

El espadachín solo se quedó sentado demasiado sorprendido.

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Gracias por leer nuevamente ^^
Espero el capítulo sea interesante :3

Gracias por todos sus votos y comentarios <3

Buen día y Sayonara ^^♡