29. ¿Qué Está Ocurriendo?

42 1 0
                                    

El alrededor negro se convierte en un espacio vacío color blanco. Volteo hacia mi derecha y veo a Wally, ambos compartimos miradas, confundidos, unos segundos. Los dos volteamos hacia enfrente de nuevo y vemos una silueta, parece la de una mujer. Segundos después aparece otra junto a ésta, pero esta vez parece la de un hombre. Son nuestros padres, no sé por qué me siento segura de ello.


Wally y yo comenzamos a dar pasos lentos hacia ellos al mismo tiempo. Cuando estamos a la mitad del camino Wally se da vuelta hacia su lado derecho y comienza a caminar solo hacia aquella dirección, donde acaban de aparecer otras dos nuevas siluetas, pero éstas sí que no sé quiénes sean. "¿Wally?" le digo confundida, pero no voltea si quiera a verme. "¡WALLY!" esta vez le grito pero sigo sin respuesta de parte de él. Sólo sigo mi camino. Justo antes de llegar decido voltear a ver a Wally de nuevo quien ahora es también una silueta color negro, se oyen risas y veo a éstas moverse como si estuvieran jugando y persiguiéndose, como si estuviera ahora con una nueva familia.


Llego hasta las dos sombras a las que me dirigía, mis padres, y éstas desaparecen.


Aparezco en otro lugar, esta vez sé donde estoy, el sótano. Veo a Jeff, Isabela, Leo y Alsue. Están festejando y sonriendo, sosteniendo unas hojas. "¡Oh, Maya!, ven, rápido" dice Jeff y avanzo confundida hacia ellos. "¿Qué tanto festejan?" me atrevo a preguntar. ¿Cómo que qué?" pregunta Isabela. "Tú, Jeff y yo encontramos nuestras cartas" me responde Alsue a la vez que me da mi carta. Por alguna extraña razón no está dividida en dos.


Nombre: Maya (No sé por qué no aparece el nombre de Wally).


Dejada por: ¿En serio quieres saberlo?


Razón: No debería importar, lo que importa es que conociste a tus amigos, que haz hecho esta aventura y que eres feliz.


Al terminar de leer mi carta todo se vuelve negro unos segundos. Para aparecer en un lugar que desconozco completamente. Parece una habitación, pero ésta es bonita y muy bien arreglada. "Maya, ven a desayunar cariño" dice una mujer con un rostro que desconozco a la vez que entra a la habitación. "¿Quién eres?" pregunto confundida. "Tu madre, ¿Quién más podría ser?" me dice. "¿Madre adoptiva?" le pregunto algo desconcertada aún. "¿Qué? Como dices eso, yo te tuve nueve meses en mi vientre" me responde mientras se ríe y si antes estaba confundida ahora lo estoy mucho más.


Al bajar noto que no está Wally. "¿Y mi hermano?" pregunto. "¿Qué hermano?" dice confundida. "Wally, mi hermano mayor" le respondo. "Tú no tienes hermanos" me dice. "Maya, ¿Te encuentras bien?" pregunta un hombre quién también desconozco completamente. "¿Y tú quién eres?" vuelvo a preguntar asustada. "Tu padre, ¿Qué clase de pregunta es esa?" responde. "Creo que mi pequeña Maya necesita un abrazo" dice la mujer y al intentarme abrazar la alejo de mí. "¿Dónde está Isabela? ¿Dónde están Jeff, Leo y Alsue? ¿Dónde están todos?" pregunto muy asustada. "¿Y ahora esos quiénes son?" pregunta la mujer, se ve confundida. "Mis amigos" le respondo. El hombre ríe. "Maya, tú no tienes amigos con esos nombres" agrega éste. "Tus únicos amigos son Brent y Denisse" responde la mujer y unos segundos después suena el timbre. "Hablando de ellos, ya llegaron" dice y abre la puerta. Entran un niño y una niña que jamás recuerdo haber visto y se dirigen hacia acá. "Hola Maya" dice el niño, pero no respondo. "Maya, no seas grosera, Brent acaba de saludarte" dice mi supuesto padre y saludo sin querer hacerlo realmente. "Deberían subir y platicar a gusto" dice la mujer que supuestamente es mi madre y eso hacemos.


"¿Y qué me cuentan?" les pregunto. "Nada" no sé ni quién responde ya que ni los volteo a ver. "Linda tu...nariz" le digo a Denisse intentando hacer un cumplido. "¿Disculpa?" pregunta confundida, al hacerlo también me doy cuenta que ella dijo lo anterior, ya que sonó la misma voz. "Olvídalo" le digo. Pasa un tiempo y ninguno de los dos dice nada. Mira la hora, debemos irnos" dice Brent. "Que bien" digo. "¿Qué?" pregunta. "No, nada" le respondo y los acompaño hasta afuera.


Al salir veo el orfanato cruzando la esquina y siento una gran satisfacción.


Corro hasta allá y al entrar veo a todos, Jeff, Isabela, Leo, Alsue, Briss, Marlene, Dani, Karime y Gabriela. Nunca me había alegrado ver a éstas últimas tres. "Niña, ¿Te perdiste?" pregunta Kenia. "No, señorita Kenia ¿No me recuerda?" le pregunto desesperada. "Lo siento, pero no" dice y la desesperación domina mi cuerpo. "¡JEFF!" le grito a la vez que llego con él. "¿Quién eres? Disculpa" pregunta. "¡Soy yo, Maya!" le digo a punto de llorar. "No te recuerdo" dice y veo a Isabela. "¡ISABELA! Tú si me recuerdas ¿Cierto?" pregunto llorando. "Niña, ¿Te encuentras bien?" pregunta y se aleja un poco de mí. "Isabela, soy yo, ¡MAYA!" le digo y en ese momento llega Kenia conmigo de nuevo. "Niña, debes retirarte" me dice a la vez que me toma del brazo. "¿Dónde está Wally?" le pregunto. "Aquí no hay ningún Wally, ahorita llamamos a tus padres si quieres y ellos vienen por ti" me dice. "Pero, yo soy huérfana, como ustedes" le respondo aún llorando. "No lo creo, quizá estás confundida pero no te preocupes, ahorita buscamos a tus padres, ¿No te sabes su número?" pregunta. No entiendo nada, es como si Wally no existiera, es como si yo nunca hubiera vivido en el orfanato, ¿Por qué nadie me reconoce?


El ambiente cambia y al despertar noto que todo era un sueño. Toco mis mejillas y me doy cuenta que lloré dormida. De repente la desesperación desaparece y un gran alivio invade mi cuerpo, pero de todas maneras siento unas grandes ganas de llorar. Es la peor pesadilla que he tenido.


Pero si en ese sueño tenía padres, ¿Por qué no era feliz? ¿Por qué todo era desesperación? ¿Por qué extrañaba el orfanato? Si ayer claramente eso quería, una vida normal.



Creo que mi lugar es aquí, siempre lo ha sido.



Aún recuerdo lo que decía mi carta "No debería importar, lo que importa es que conociste a tus amigos, que haz hecho esta aventura y que eres feliz" y en verdad tenía mucha razón, a fin de cuentas lo importante no es la carta, ni mi pasado, lo importante es disfrutar cada segundo con ésta, que al final es mi familia.


Wally e Isabela se despiertan al escucharme llorar. "¿Qué tienes?" pregunta Isabela. "¿Pasa algo?" pregunta Wally, pero no respondo.


Alguien toca la puerta.


Wally abre y entran Jeff, Leo y Alsue. Al verlos a todos juntos siento un gran alivio. "Chicos, buenas noticias..." Jeff se detiene al ver que estoy llorando. "¿Qué tienes?" pregunta Leo preocupado. "¿Necesitas ayuda?" pregunta Alsue. "¿Todo está bien?" pregunta Jeff. Pero tampoco respondo, solo me levanto de mi cama y corro a abrazarlos a todos, no quiero que se vayan de nuevo, no quiero volver a ese mal sueño.


¿Por Qué No Me Quisieron Mis Papás?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora