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Capitulo 27

“Ya era tarde para dar marcha atrás.”

Había pasado la mayoría de la tarde de compras y tomando el sol en la piscina de mi casa. Miley había venido a casa para hablar un rato de como nos iba todo. Me había sentado bien ir con ella a comprar algo. Realmente necesitaba despejarme, y sobre todo, dejar de pensar en todo.

Subí las escaleras de la casa corriendo, de dos en dos. Algún me iba a matar. Empecé a reír yo sola como si estuviera bromeando con alguien. Realmente esto de vivir sola en Los Ángeles, me estaba afectando a la cabeza.

Solté un suspiro y sacudí mi cabeza mientras me quitaba toda la ropa y entraba a la ducha. Eran las seis y media de la tarde y tendría que estar lista al menos en una hora. Me duché mientras las gotas de agua me relajaban al chocar contra mi piel caliente por el reciente sol. Luego me lavé mi cabello y salí envuelta en una toalla.

Me di crema por todo mi cuerpo después de secarme y me puse ropa interior. Me quedé mirando el armario sin saber que ponerme. Suspiré y empecé a mirar vestidos y ropa de verano. Lamí mis labios y di con algo que me gustaba.

No era un vestido. No me solían gustar demasiado, solo me los ponía cuando había fiestas o tenía que ir a una entrega de premios o algo así. No era demasiado de vestidos la verdad.

Cogí un short que parecía de cuero, negro, unos tacones abiertos muy altos y una camiseta con tiras en la espalda dejando ver parte de mi piel morena. Suspiré mirándome en el espejo y luego me fui al baño a maquillarme.

Me di base en el rostro para tapar imperfecciones, sombra negra acentuando mi mirada, eyeliner y máscara resaltando mis pestañas largas. Luego pinté mis labios de rojo y cogí mi bolso después de perfumarme las muñecas y detrás de mis orejas.

Miré mi blackberry. No había mensajes así que bajé a la primera planta de la casa y esperé a que Bruce viniera. A los pocos minutos vino y nos fuimos en un coche hacia el estadio donde Cody actuaría. No era tan grande como donde actuaba Justin y los teloneros de Believe Tour, pero era lo suficiente como para sentirse orgulloso.

“Has cambiado mucho estas vacaciones ______.” Bruce me dijo alegremente mientras soltaba una carcajada al ver mi expresión.

Me encogí de hombros. “Vaya, no se si sentirme alabada o matarte.” Arqueé mi ceja y el levantó sus manos en signo de rendición.

“Tranquila, lo digo en el buen sentido.” Asentí con mi cabeza.

“Entonces lo tomaré como un cumplido.” Reímos los dos divertidos mientras me acercaba a su lado con su brazo sobre mis hombros.

“Extrañaba ir a un concierto con la señorita Smith.” Dijo y solté una carcajada echando mi cabeza hacia atrás.

“Y yo con mi salvavidas.” Mordí mi labio con diversión y el rió de nuevo.

Bruce era una de esas personas con las que hablabas y la conversación salía sola, sin presión. Podías hablar de todo, te divertías, reías, sonreías y el tiempo pasaba volando.

No te sentías incómoda con él, era como si lo conocieras de toda la vida y eso era bueno.

Llegamos al estadio y nos bajamos del coche grande negro. Si, lo se, siempre eran negros. Pero así era mas fácil pasar desapercibido entre los paparazzis.

Caminamos por el recinto entrando al estadio por un pasillo que nos dirigí hacia el backstage. Había mucha gente afuera esperando, tanto bailarines, como guardaespaldas y gente que conocía. Me quedé helada cuando vi a Lil twist justo allí. Eso me extrañó.

Si el estaba aquí, eso significaba que otra persona llamada Justin Bieber también estaría con él.

Algo dentro de mi se estremeció. Los nervios aparecieron en mi estómago.