“No soy tu pu*ta, Justin. Búscate a otra.”
Había pasado el 4 de Julio con Matt y Lily y algunos amigos en Los Ángeles. Había regresado para divertirme un poco y luego volvería de nuevo al tour. Nos lo pasamos genial, reímos, bailamos, hablamos, contamos bromas, saltamos mientras cantábamos como si nos fuera la vida en ello.
Miley había venido a la fiesta que organizamos en una casa de un amigo. Estaba agotada, simplemente quería sentarme en algún lugar tranquilo.
“Hey, ¿Estas bien babe?” Sentí la voz de Miley a mi costado mientras se sentaba a mi lado. Yo asentí con mi cabeza y luego bebí un sorbo de mi bebida.
“¿Seguro? Porque no pareces así.” Insistió. Ella me conocía perfectamente.
Suspiré. “Es solo que... no se, tengo un mal presentimiento.” Me encogí de hombros mirando a las estrellas.
“¿Sobre que?” Bebió un sorbo de su bebida y miró al cielo, al mismo punto al que yo miraba.
“Justin...” Suspiré y lamí mis labios. Estaba seria. Mordí mi labio y miré a mis manos.
“Oh... ya entiendo.” Pasó su mano por mi espalda descubierta por el top que llevaba. Hacía muchísimo calor.
“Es como si se fuera a comportar de otra forma... ya le noté raro al marcharnos de allí para regresar a LA.” Le miré a los ojos.
“Si Justin esta haciendo eso tienes que saber que el es humano como todos y sobre todo, un tío. Ellos hacen eso, que puedo decir.” Se encogió de hombros.
“No estoy demasiado orgullosa por lo que hice la otra noche.” Mordí mi labio con timidez. Ella sonrió divertida por mi reacción.
“Estas hablando como si hubieras matado a alguien ______. Simplemente te enrollaste con Quincy, no tiene nada de malo. La gente suele salir de fiesta, bebe, baila y se besa con chicos, eso no significa que seas la peor perra de todo Estados Unidos.” Puso una voz graciosa al decir la última frase y me quedé mirándola para soltar una gran carcajada.
“Miley.” Le miré atentamente.
“Si.” Respondió.
“Cásate conmigo.” Ella abrió sus ojos como platos y soltó una carcajada.
“Estas loca. En serio... ¿Que llevas ahí?” Me quitó mi vaso de mi mano y lo observó. “Deberías de dejar de beber, te esta afectando.”
“Hey! Lo digo en serio... tu por lo menos no me harías sufrir, al contrario, me harías reír y eres mi mejor amiga.” Me encogí de hombros y le hice una mueca con mis labios. Ella rió de nuevo divertida.
“Vamos. Si no, te acabarás arrepintiendo y no quiero divorcios express.” Solté una carcajada inclinando mi cabeza hacia atrás y me levanté mientras ella agarraba mi mano.