Capítulo 35: Reflexiones

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- Así que ese novio tuyo es jugador de futbol?- preguntó Axel, mientras conducía hacia el colegio por el partido de los chicos; entre todos me convencieron de ir, Ax se ofreció llevarme a casa para que pudiera cambiarme y luego dejarme en el Suprime, llevaba puesta la camisa con el número 10 en mi espalda

- Eh!, si- dije con mi rostro ruborizado

- Debo tener una charla con él, no estoy muy seguro de los dotes de mi amigo cuando se trata de jovencitos rondando a mi bella sobrina- abrí los ojos como platos, siempre pensé en Josh como protector, pero Axel era otro nivel, estaba segura que si ese encuentro se daba podía despedirme para siempre de mi novio

- No lo espantes, por favor- supliqué- es realmente bueno- le dije ganándome la atención de Ax

- Está bien, pero estaré al pendiente de él, si te hace daño me la pagará-

- Si me hace daño será el chico más herido del mundo, empezando por Annie- ambos reímos por mi comentario, siempre había tenido una relación cercana con Axel y Mel

- Como es que hasta ahora me entero que tienes novio?- preguntó cuando nos acercábamos al colegio

- Estas ocupado todo el tiempo, nunca sé de ustedes, ya ni siquiera traen a los chicos a la casa- él sonrió triste

- Lo lamento pequeña, pero la vida de adultos es difícil- asentí notando que él también se encontraba agotado, todos lo estábamos

- Ax?- dudé en hablar pero necesitaba saberlo, el contestó con un "hmm?" Distraído en el camino –tu sabias lo de mi madre? es decir todos lo sabían?- me miró bajando la velocidad pero no frenando del todo

- No Jen, solo Josh y Sam lo sabían, yo sospechaba que algo estaba mal con tus padres, nadie en su sano juicio podría despreciar de esa manera a una niña tan linda como tú- mis ojos se nublaron nuevamente, no entendía como sentimientos tan puros como ese podían crecer en personas que no tenían ningún lazo conmigo, pero de mis padres no naciera ni un gesto de bondad- ellos trataron de darte la familia que no habías conseguido, deberías sentirte afortunada, muchos no tienen esa segunda oportunidad- sabia que se refería a él, conocía su historia y aunque su hermano lo había ayudado, no tuvo otra madre que diera amor y yo por mi parte tenía a Sam

- Solo desearía haberlo sabido antes- le dije secando mis ojos

- Antes hubiera sido más duro- contestó mirándome fijamente- no fueron las mejores circunstancias, pero creo que fue en el momento justo- lo miré sin entender a que se refería- antes estabas mas chica, encerrada, sin amigos, sin novio, como te hubieras sentido en ese momento?- sus palabras retumbaron en mi cabeza

Era cierto, antes hubiera tenido a Sam para abrazarme y darme consejos, pero mientras ella despertaba, tenía a Chris, Dina, Evans, Redrick y hasta Stephanie para apoyarme, ellos fueron quienes me levantaron el ánimo por el estado de mi cuñada y siguen estando en este momento, Axel tenía razón, era una chica con suerte a pesar de todos los golpes recibidos

- Llegamos- cantó trayéndome a la realidad – Espero que tu novio juegue bien, no permitiré que quien tenga el corazón de mi sobrina favorita sea un perdedor- dijo intentando hacerme sonreír y lo logró

- Es de los mejores del equipo, deberías venir a verlos alguna vez- dije despidiéndome con un abrazo- Gracias- susurré en su oído Ax asintió entendiendo a que me refería

Me quedé de pie viéndolo marcharse y cuando perdí de vista el carro caminé hacia las canchas, el colegio estaba completamente lleno de alumnos emocionados gritando para animar a los jugadores

Los chicos no me esperaban por eso intenté pasar desapercibida, no necesitaban preocuparse por mí, ni que mi estado de ánimo los deprimiera en ese momento, los buscaría luego cuando me sintiera un poco mejor, los mensajes de Dina no dejaban de llegar, solo le contesté que me encontraba bien

Le escribí a Chris para desearle buena suerte en el juego, él me contestó minutos después, los vi saltar a la cancha para el calentamiento y luego para iniciar por fin el partido

Nuevamente los chicos eran superiores al otro equipo, pero pude notar que mi novio no jugaba igual, se le veía desconcentrado, sentí una punzada de culpa al ver como perdía un balón decisivo dejando que el otro equipo se aproximara a nuestro arco, gracias al arquero no pudieron convertir el gol

El primer tiempo había terminado, bajé por las gradas hasta llegar a la primera fila, antes que los chicos se perdieran en el vestuario, grité a mi novio con todas mis fuerzas, él buscó hasta que sus ojos llegaron a los míos, corrió hacia mí sonriendo y me besó

- Has jugado horrible- le dije medio en broma medio enserio

- Estaba preocupado por ti- contestó encogiéndose de hombros y atrayéndome nuevamente contra su pecho

- Pues yo estoy bien, he venido a verte y no es lo que esperaba, si Axel te viera no me creería que eres el mejor jugador del equipo- sonreí acercándome provocativamente a sus labios, el suspiró

- Creo que ya tengo todo lo que necesito para volver a jugar- dijo besándome nuevamente, Redrick se acercó y lo haló de la camiseta

- Rivers!- me saludó- que gusto que hayas venido, pero el entrenador nos necesita a todos- asentí viendo como se marchaban, divisé a las chicas y me senté junto a ellas

- Viniste!- gritaron abrazándome- tu novio está jugando horrible!- dijo Dina

- Lo he visto todo y ya hemos aclarado que no seguirá sucediendo- les guiñé un ojo y todas sonreímos

- Como está todo- preguntó Dina, los ojos de Stephanie viajaron a mí

- El bebé está mucho mejor, lo cargué hoy y es precioso, Sam está respondiendo al tratamiento, esperamos que se recupere totalmente y por mis padres no he vuelto a hablar con ellos- las chicas asintieron sin decir ni una palabra mas

El juego reinició y nuestro equipo logró ganarlo 2-0 ambos goles conseguidos por Evans, nuestro delantero estrella, mi novio fue el artífice de las jugadas, siendo el asistente en las dos anotaciones

Gritamos como locas, brincamos y nos abrazamos, de mi mente se alejaron los problemas, todo lo malo había quedado en un segundo lugar

- El entrenador debería contratarte para dar charlas técnicas- dijo Redrick cuando nos dirigíamos hacia la celebración, era sábado por la noche, el equipo ganó y todos tenían ganas de una última fiesta antes de los exámenes

- Yo no hice nada todo fue obra de mi amor- dije caminando abrazada a mi novio

- Es la mejor recuperación que he visto- comentó Evans

- Solo la necesitaba a ella para que todo volviera a estar bien- dijo besando mi cabeza, las chicas dijeron un "aww!!" Y mi corazón se calentó por sus palabras

- HAN LLEGADO!! UN BRINDIS POR LOS JUGADORES DEL SUPRIME!!- escuché el grito eufórico de muchos jóvenes reunidos en una casa sin supervisión, nuevamente el alcohol apareció en mi mano, lo dejé a un lado, Chris hizo lo mismo, los chicos comenzaron a beber como locos olvidando la resaca de la ultima vez

Junto a Chris bailamos un rato y luego nos alejamos hacia un lugar más tranquilo, nos sentamos una banca al final del patio de la enorme casa, recargué mi cabeza en su hombro y suspiré

- En que piensas?- preguntó pasando su brazo sobre mi hombro y acomodando mi cabeza sobre su pecho

- En lo afortunada que soy de tenerlos- me retiré para poder verlo a los ojos- de no ser por ustedes, no tendría nada en este momento, nadie en quien apoyarme- dije y el sonrió

- Te tendrías a ti, eres fuerte, a pesar de todos los golpes que has recibido, aquí estas, no es por nosotros, es por ti, tal vez hayamos colaborado pero solo tú puedes decidir seguir adelante- pensé en sus palabras y tenía razón cuando no te queda nada, eres lo único que te queda, tu propia fuerza te mantiene vivo, es tu determinación, tu amor y tus ganas de no dejarte vencer lo que te permite continuar

El Ingenioso Plan de Jenny Rivers - #Wattys2016Donde viven las historias. Descúbrelo ahora