Capítulo 6: 1 solo auto por el planeta

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- Odio la clase de literatura- dijo Dina saliendo del salón, por mi parte solo levante mis hombros restándole importancia, la clase había sido entretenida luego de las incomodas presentaciones - gracias a Dios fue la última del día, los chicos aún no han terminado la práctica, vamos- nuevamente me tomó de la mano y corrimos por todo el colegio hasta llegar a las canchas de futbol

- Auch- gritamos ambas al ver el golpe que había recibido uno de los jugadores del equipo,  llevábamos más de 15 minutos viendo como corrían, practicaban jugadas y tocaban el balón

- Son muy buenos- dije para nadie en particular

- Los mejores- me contestó Dina asintiendo con suficiencia- son el orgullo del Suprime y los últimos campeones, repetiremos este año, de eso estoy segura- permanecimos en las gradas por más de 45 minutos, cuando los chicos fueron finalmente libres

- Me alegra que nos hayas esperado- dijo Chris sentándose a mi lado

- Tuve que llamar a Peter para que no viniera a buscarme, Dina dijo que tú podrías llevarme?- pregunté un poco avergonzada y otro poco ruborizada por el pequeño espectáculo que él había montado cuando iban hacia los vestidores quitándose la camisa mostrando sus perfectos abdominales y dejándonos embobadas a más de una.

- Es una magnífica idea, hoy es mi turno de llevar a todos a casa- contesto un emocionado Chris

El recorrido fue por menos entretenido, los primeros en llegar fueron Mathew y Dina quienes viven muy cerca del colegio, sus casas me parecieron súper chistosas, ya que daban la sensación de ser una sola, sus madres debían ser realmente unidas, no pude evitar burlarme de la escena por lo que ambos me lanzaron miradas asesinas pero luego se dieron por vencidos

- Lo sé, es vergonzoso ser casi la hermana de este tarado- dijo Dina riendo despidiéndose de mi antes de bajar, pude ver como Mathew le daba un golpe en la cabeza luego de alcanzarla, ambos comenzaron una pelea que no nos quedamos a presenciar

- Llevaremos primero a Evans y luego a ti, estás de acuerdo?- intenté no pensar demasiado el quedarme a solas con Chris y asentí rápidamente, me encontraba en el puesto del copiloto, pero desde que Dina ya no estaba mis nervios iban incrementando de una manera desmesurada

- Porqué estas tan callada?- preguntó Nathan luego de unos minutos, ellos hablaban de futbol mientras yo miraba por la ventanilla del auto

- Es solo que no se mucho de lo que hablan- traté de disculparme

- Eso debemos arreglarlo, la novia de mi amigo no puede ser una ignorante del deporte que amamos- golpeó el hombro de Chris, quien se veía muy tranquilo con el comentario mientras yo me ponía color rojo escarlata y me ahogaba con mi propia saliva "no muy lindo espectáculo, lo sé"

- Yo no soy su novia- intenté decir cuando controlé mi respiración y mis mejillas tomaron un tono más normal, ambos rieron ante mis palabras

- Lo serás- comentó Evans simulando una tos

- Morirás- le contesté con el mismo gesto, volvimos a reír y me relaje un poco, aunque en mi mente seguía rondando la actitud tan calmada de Chris que no intentó corregir a su amigo.

Después de eso, condujimos por unos 15 minutos más en una ruta que me perdí debido a los cruces y a la apariencia de las calles las cuales parecían la misma, hasta llegar a una zona poco poblada; se observaba una gran casa de 2 plantas con un jardín enorme, grandes árboles en el frente, Chris detuvo el auto y yo me giré hacia el asiento trasero para observar a Evans

- Esta es tu casa- dije con la boca aun abierta, el chico asintió y soltó sonoro silbido que por poco termina con mi limitada audición, 2 perros corrieron hacia el auto en busca de su amo

- Ellos son Rocco y Tormenta- sobaba a los 2 canes mientras me los presentaba, yo no fui capaz de bajar a acompañarlos, amaba a los perros, pero nunca había visto de cerca 2 animales tan grandes.

- Es un placer conocerlos chicos- intenté acariciar a uno sacando mi brazo por la ventana, aun no estaba preparada para abandonar la seguridad del vehículo

- Mañana es mi turno, quieres que pase por ti?- me preguntó Nathan, a lo que yo fruncí el ceño

- Por mi? Si quiera sabes donde vivo?-

- Yo lo guiaré Rivers, es un hecho pasaras por todos mañana!- sentencio Chris despidiéndose de su amigo

- Que se traen con eso de los turnos?- pregunté para liberar la tensión que se estaba formando mientras conducíamos hacia mi casa

- Es más fácil así, Spencer tuvo la idea, ella está empeñada en que la escuela ayude con el medio ambiente y lidera la campaña de compartir el carro, 1 solo auto contamina menos que 3 obviamente- la última frase la dijo en un tono que supuse trataba de imitar a Dina

- Es una magnífica idea- Chris sonrió y me miró, por unos segundos nuestros ojos quedaron enganchados, no lograba respirar y mis mejillas se tornaron calientes de nuevo, él volvió su mirada a la carretera lo que yo agradecí en mi interior

- No tengo ganas de volver a casa tan temprano, podría quedarme y ayudarte con los deberes, estoy seguro que esta atrasada en la mayoría de las clases- lo observé extrañada

- Quieres quedarte a ayudarme?- pregunté asombrada a lo que el asintió – Por qué?- cuestioné nuevamente

- Porque no quiero ir a casa, vamos Rivers! no te hagas rogar sabes que me necesitas- dijo guiñándome un ojo y haciendo que mi corazón se saltara un latido

- Está bien, necesito toda la ayuda del mundo- recordé la gran cantidad de material que debía leer para ponerme al corriente

- Tia!! Has vuelto!- gritó mi preciosa sobrina saltando a mis brazos- quien es él?- preguntó observando a Chris mientras se escondía en mi cabello

- El es Christopher, seguro lo recuerdas de la fiesta para tu hermanito-

- Aaa tu eres el que salvó a la tía Jen!!-gritó ella muy cerca a mi oído, hoy entre Sophie y Nathan pretendían dejarme sorda

- Ese soy yo!- dijo Sawyer sonriendo a la pequeña- Creo que me he ganado un premio por salvar a tu tía no te parece?- La pequeña sonrió asintiendo- que me merezco?-

- Un helado gigante!!- gritó la niña haciendo un gesto con sus manos para mostrar que sería un gran helado

- Eso suena delicioso- dije riendo, deberías pedirle a Peter que nos prepare 3 helados de chocolate gigantes, la niña corrió emocionada hacia la cocina mientras nosotros la seguíamos sin hablar, a mi todavía me avergonzaba que él hubiese presenciado una de mis crisis sin conocernos si quiera, llegamos a la cocina y nos sentamos los tres en la barra, me encontraba en medio de Chris y Soph, mientras Peter preparaba los helados

- Aquí tienen, que los disfruten- nos pasó las copas sonriendo nosotros  le agradecíamos, hubo silencio por un momento hasta que la pequeña gritó

- AAY!- Me sobresalté y giré para observarla, tenía su cabeza entre sus manos – Se me ha congelado el celebro!!- gritó nuevamente, Chris y yo soltamos sonora carcajada al ver el drama que había montado la chiquita

- Debes comerlo más despacio, ya lo sabes-

- Pero tía, es tan delicioso que no puedo esperar!- replicó ella de esa manera que me derretía por completo- continuamos riendo hasta terminar las 3 copas

- Debemos ir a hacer tareas- le dije a Sophie – tu deberías hacer lo mismo- ella me lanzó una mirada desesperada, subí seguida por Chris hacia mi habitación, sentía como si mis piernas se convirtieran en gelatina con cada paso pero traté de caminar normalmente, mientras intentaba organizar mentalmente el desorden que había dejado esta mañana, Christopher en mi habitación ayudándome con los deberes no lo habría imaginado ni en un millón de años.

El Ingenioso Plan de Jenny Rivers - #Wattys2016Donde viven las historias. Descúbrelo ahora