No me dejes |l.s|

4.

Los chicos se encontraban en la habitación del castaño, mirándolo a distancia. Niall y Zayn no dejaban de llorar mirando las condiciones en la que el castaño se encontraba. Liam apretaba la mano de su prometido, alguien tenía que ser la persona que se mantuviera tranquilo en esos momentos. Aun así, su pecho no dejaba de doler por la situación y al ver a su pareja de esa manera.

—Yo... No puedo creer que esto esté pasando. ¿Él despertará pronto? —preguntó el rubio aún parado junto a la pareja.

—No lo sé, el doctor dijo... —Liam fue interrumpido por Zayn.

—No importa lo que allá dicho el doctor, él despertara pronto. —Zayn soltó la mano de su prometido para acercarse a la cama del castaño mientras tomaba su mano con fuerza.

Liam y Niall se miraron unos segundos. La relación del castaño y el morocho era diferente a la que tuviera con cualquier otro chico. Louis era más que un amigo, era su única familia. Habían pasado cosas difíciles y Louis siempre había estado ahí para animarlo, para decirle que las cosas mejorarían, que era fuerte y podía con lo que fuera. Y tenía razón, las cosas habían mejorado. Había conocido a Liam, el amor de su vida, amigos increíbles, encontró trabajo en una galería de arte como siempre lo había soñado y tenía una casa donde vivía con su prometido. Creyó que todo estaba bien ya, que lo peor había pasado y la vida lo golpeó de nuevo con su mejor amigo. ¿Qué más querían de él?

Zayn no sabe si podría salir adelante si algo le pasara a su hermano.

Y los demás chicos también lo sabían.

—Sí, mi amor. Lo hará. —se acercó, dejándole un beso en la cabeza al morocho.

—Lo hará. —repitió Niall, acercándose.

Se quedaron ahí sin decir nada, escuchando el monitor que marcaba los latidos del corazón de Louis. Solo tenían que esperar, como había dicho el doctor.

Después de un rato, los chicos se habían calmado un poco, intentando buscar una rutina para poder cuidar de ambos chicos.

Niall y Liam se habían alejado un poco para platicar.

—El doctor dijo que Harry tendría que quedarse en observación unos días, preguntaré cuando podremos llevárnoslo. Después podemos turnarnos y cuidar de Louis en lo que él despierta. —sonó su nuca con cansancio. —Tendremos horarios así no afectará nuestras actividades y trabajo. Por ahora tendremos que ir a descansar. —miró a Zayn, quien acariciaba el cabello de Louis.

—Yo me quedare con él, ustedes pueden irse. —Zayn habló bajo, mientras apretaba fuerte la mano de Louis.

—Amor, tienes que descansar, comer algo y bañarte. Mañana podemos venir temprano. Las enfermeras y doctores se quedarán con él. Lo cuidaran. Él estará bien.

— ¡Liam, yo me quedaré! —levantó la voz. —¡Él podría despertar! —estalló en llanto y pegó su cabeza al pecho de Louis. —Es mi mejor amigo, mi hermano, la persona que estuvo ahí cuando nadie más estaba... no puedo dejarlo solo, es la única familia que me queda. No puedo hacerle eso. —abrazó el cuerpo del castaño sin dejar de sollozar.

—Amor...

—Déjalo, Liam. —Niall lo interrumpió. —Estará bien. Él debe estar solo. —besó la cabeza de Louis y salió de la habitación.

—Amor. —besó la mejilla del morocho y susurró en su oído. —Mañana vendré temprano, trata de dormir, él te necesita fuerte. —observó al castaño. — Queremos que vea al Zayn fuerte de siempre, ¿no es así? Cuando despierte nos necesitará mucho. Louis se va a recuperar poco a poco, ya lo verás. Él es un gran chico y pronto estará de nuevo molestándonos y regañándonos por todo. —miró a su prometido, abrazándolo por la espalda. —Él no querría verte así y yo menos, por favor, come algo y descansa. Recuerda que no importa nada, siempre estaremos contigo. Y que aunque aún no estemos casados, ya estoy contigo en las buenas y en las malas, para toda la vida, ¿eh? Te amo. —se separó, caminando hacia la puerta.