Trascendente

Capítulo 10

-¿mejor?- pregunta Henton apartando el pequeño plato ahora vacío. Asentí. Por la mañana, salió de caza y me trajo una porción de sangre de animal, así también mi parte vampira pudiera sanar y no estuviera débil. Mis heridas ya han cicatrizado. Solo quedan marcas que ya en poco tiempo se irán.

-gracias Henton.
Asintió sonriendo.
-lo que sea por mi manzanita.
Se acercó a mi y besó mi mejilla. Cerré mis ojos y aguante un grito. Me aparté enseguida. Podré no estar con Ethan ahora, pero ningún hombre puede darme ni el más mínimo beso. Siento que traiciono a Ethan.

Se apartó confundido. Asintió apretando sus labios y salió del cuarto, me recosté en la cama, lo siento por Henton, intenté enamorarme pero no me fue posible. Sigo amando a Ethan. Y él debía saberlo. Ya me siento con energía suficiente.

Me puse de pie de nuevo.
-es bueno verte limpia por fin.
Ethan entró a la habitación con un brazo detrás.
-no sé si sepas que antes de entrar en la habitación de una chica, debes tocar.

Recogí mi cabello en una coleta mal hecha y me senté en la cama. Él se sentó junto a mi.
-bueno, esperaba encontrarme una sorpresa- guiña un ojo. Gire los ojos.
-puerco.
-gracias- ríe.

De pronto saca el brazo de detrás de su espalda, dejando a la vista un hermoso ramo de flores. Petunias.
-son hermosas.
-lo sé, se las daré a mi prometida muy pronto.

Río y le pegué en el hombro. Me entregó el ramo.
-para ti.
-¿le darás a tu prometida aire ahora?
-quizá lo necesite, está tan flaca que el vestido se le cae.
-debe ser algo bueno para ti.
-ni tanto.

Dejé el ramo en la cama y le sonreí. Aproveché que estaba distraído y le pegué una fuerte bofetada que hasta mi mano sentía un hormigueo. Gimió y se quedó con la boca abierta.
-te dije que lo haría.
-eres fuerte- acaricia su mejilla.

-une la fuerza de una loba y una vampira, no es del todo algodón.
-no me digas- ríe.
-ahora que recuerdo... habías dicho que venías a ver si no éramos un peligro, ¿qué piensas hasta ahora?

Ríe.
-creo que tengo que seguir viendo.
-y si tu futura esposa no es tu mate... entonces ¿en dónde está ella?

Lo sé, soy una boba. No debería hacer esto. Pero quiero saber lo que sabe así poder prepararme.
Apretó la mandíbula y volteó la mirada.
-¿sería un completo cretino si no la recordara?
-eso depende.
-¿de?
-que tanto tiempo ha pasado.

-hay lapsos de mi vida que desaparecieron, hay cosas que sólo no encajan... he descubierto que a ella la han matado, alguien, no sé quién. Los chicos me han hecho olvidarla así la manada no cayera conmigo.
Bajé la mirada.
-lo siento.
-no fuiste tú- sonríe.

Soy yo idiota.
-¿entonces tu parte que busca mate desapareció?
-es como si la palabra "mate" se borrara de mi mente.
Había llegado el momento. Inhale aire y lo vi a los ojos. Él vio a los míos.

-hay algo que debes saber Ethan...
-si es que mi parte mate desapareció, ya sé por qué es.
-¿lo sabes?
-todo. O la mayoría.
-entonces lo recuerdas.

Mi corazón dio un brinco.
-la verdad no, lo han borrado de mi mente te he dicho, ella ha sido asesinada, la idea no escapa de mi mente, supongo que eso apagó el interruptor "mate".
-¿asesinada?- entonces lo entendí. El creía que ella estaba muerta, que yo estaba muerta. Por ello no confiaba en su mate, había apagado su interruptor, yo debía encenderlo.

-eso me dijeron, por ello me hicieron olvidarlo, mi manada iba a caer en cenizas si yo me rendía.
-Ethan...
-debo irme.

Se puso de pie y comenzó a caminar hacia la puerta.
-¡Ethan!
-¿Qué debía saber?
Me detuve frente a él.
-tu mate... ella... yo...