Trascendente

Capítulo 22

-¿mejor?- preguntó Ethan sonriendo. Asentí mientras bajaba el vaso con restos de sangre.
-aunque sería aún más delicioso que ésta fuera la sangre de Cordelia- me limpié los labios.

Es un fastidio tener que beber una porción diaria de sangre. Y digo fastidio porque quisiera mucha más de la que tomo, pero es mejor regular la sed. Así podré controlarme y no matar a cualquiera que se cruce por mi camino.

-fue algo difícil quitar la sangre de B del suelo y las paredes en su celda ¿sabes?- dijo burlón.
-deberían haberlo dejado ahí que se desangrara- respondí de mala gana. La calidez de sus manos acariciaron mis hombros y bajaron lentamente por mis brazos. Entonces me abrazó. Recargue mi cabeza en su hombro.

-nos puede ser de utilidad.
-tienes razón, podría ir ahorita mismo y seguir con el resto de los dedos.
-Brooke.
-bien, quizá con el mismo dedo en su otra mano, solo para emparejar.

Su ronca risa me hizo reír.
-sádica. Me encanta.
-no creo que dijeras lo mismo si fueras tu él que perdió un dedo.
Sus brazos me soltaron, me dio la vuelta hasta quedar cara a cara. Con ambas manos sostuvo mi rostro.

-¿quién lo dice?- sonríe y me besa.
-no es justo que Gina sea quien esté sufriendo con Cordelia, daría lo que fuera por ocupar su lugar.

-a veces les pasan cosas malas a gente buena para que otros salgan heridos, y es por ello que hay que mantenerse fuertes y no dejarse vencer, es nuestra única arma.

-vaya, ¿en dónde está el Ethan amargado y arrogante? Me gusta tu lado filosófico- rió y me dio un beso fugaz.

-es la montaña más temerosa de la que haya escuchado jamás- dijo Luther. Me senté junto a Ethan en el sofá de la sala. Me abrazó por los hombros. Gina es una bruja, pero no tiene mucha experiencia, no podía escapar aunque lo intentara.

-¿ya has escuchado sobre ella?- preguntó Amett.
-en mi antigua manada se mencionaba seguido, muchos iban ahí en busca de nuevo territorio, pero los cazadores ya la habían ocupado antes, entonces nadie que no fuera humano volvía.

-¿hay cazadores? Madre santa, nos mataran- dijo Derek.
-que poca confianza, solo requerimos de unos lobos con entrenamiento, dos híbridos, un Vrighlton e inteligencia, fácil- Ethan parecía bastante confiado. La sonrisa en su labios no sólo mostraba tranquilidad, sino orgullo. Como si estuviera seguro de que saldríamos adelante con esto.

-quiere decir, necesitamos de Amett, Frech, Luther, Sean, en el lado de lobos entrenados, Henton y Brooke del lado de híbridos y a mi- Derek se apuntó al pecho.
-espera un segundo, ¡es verdad! Derek, puedes fingir ser uno de ellos e infiltrarnos- dije.

Todos los pares de ojos voltearon a verme.
-¿Qué?- algo me dice que he cometido un error.
-estamos hablando de Derek- dijo Sean -sin ofensas hermano, pero no es del todo un buen actor.

-a mi me engañó cuando lo conocí, ¿o no Derek?- sonreí.
-pues si, pero meterme en ese lugar y fingir ser uno de ellos es cosa de otro mundo, pueden descubrirme.
-no si falta uno de ellos- mi sonrisa provocó ciertos ceños fruncidos.

-¿Qué dices?
-tomamos a uno de ellos, finges ser él, "nos capturas", una vez dentro, atacamos y sacamos a Gina.
-no suena mal- dijo Luther.

Derek parecía un poco indeciso.
-sé que es mucho pedir que te arriesgues de tal modo Derek, pero hablamos de Gina, se que la amas tanto como ella a ti, y se que harías lo que fuera por ella, además, tenemos a B y según la llamada que tuve ayer con esa jodida mujer, le tiene cierto interés.

-entonces andando- dijo Derek decidido con las cejas unidas y una sonrisa victoriosa.
-¿vamos a morir cierto?- preguntó Amett riendo nervioso.
-es muy probable- respondió Ethan igualmente riendo. El resto también comenzó a reír.