SARAH
Me dirijo al baño y abro la puerta, que,al tocarla,cruje,y al abrirla da la impresión de que va a caerse.
Mientras abro,cierro fuértemente los ojos,con miedo. Cuando se abre el olor a desputrecacción me echa para atrás y cuando abro los ojos para ver que es lo que huele tan mal, me quedo patidifusa. Nick está flotando, con una soga atada al cuello, en el suelo, hay una silla y tres botes de pastillas diferentes y mortales. En el lavabo sangre, cuchillo y cuchillas. Sus brazos tienen sangre,pero está seca. Muy seca. La bajo de ahí con la ilusión de que vuelva, la tubo la cabeza encima de mis rodillas y lloro, lloro tanto que no veo nada y lloro tanto que casi ni puedo respirar.
Llamo a la ambulancia y a la media hora o así viene, se la llevan y me llevan consigo. Tienen que operar,pero no creen que salga.A los tres días me dicen que ha entrado en coma, ¿por qué cada vez que pienso que voy a salir de este bache vuelvo a caer en algo peor?
Entro a casa después de un día demasiado ajetreado en la oficina y me tumbo en el sofá. A los pocos minutos,suena el timbre y resignada me obligo a abrir la puerta.
Un chico alto,moreno, con vaqueros y una deslumbrante sonrisa,aparece en el umbral de la puerta.
-Hola, soy Cristian.
Dice con un tono de dulzura en su voz y una sonrisa de oreja a oreja.
-¿Quién eres?
Digo tartamudeando.
-Te explico: te e visto antes en un coche negro viniendo hacia aquí.
-¿Sigues a todas las chicas hasta su casa?
-No, tú eres la única.
Dice con voz seductora,acercándose a mi.
-Vete.
Digo cortante.
-Tranquila nena, tu y yo,ya nos conocemos.
¿Cómo? Me acordaría, ¿verdad?
-Yo a ti no te conozco.
-Que raro, siendo primo de tu querida amiga Nick.
-Oh...Lo siento. Pasa, por favor.
Y entra antes de que haya acabado la frase. Que maleducado. Se sienta con tranquilidad en el sofá y se acomoda. ¿Y este de dónde ha salido?
-Que quieres.
Estoy tan confundida,tan cabreada ahora mismo que no voy a apartar mi tono borde ni para preguntar.
-A ti que te parece.
Pesado.
Al ver mi expresión añade.
-Estoy seguro de que tú sabes lo que le ha pasado a mi prima.
Su voz tan irritante me estresa, es como si me echaría a mi la culpa por lo que ha pasado.
-¿Perdón?.
-Ya me has oído nena.
Se acerca a mi,susurrándome al oído, y empieza a acariciarme el muslo. Yo salto y me aparto.
-¿Que estás haciendo?
-Me miras con pasión.
-Asco. Que es diferente,- puntualizo.
-Sé que no.
Me echa en el sofá,yo intento apartarle pero no puedo,es más fuerte que yo. Me besa el cuello y me arranca la camisa de un tirón, pone ojos golosos cuando me mira las tetas y me agarra una con la mano, apreta y masajea, yo gimo y me retuerzo.
-¡Apártate de mi!- grito cuando me mira deseoso.
Me ato la camisa de nuevo y me voy a levantar cuando me agarra del brazo y me sienta de imediato.
-Que respetuoso por mi parte,lo siento.
Pienso que va enserio cuandi se levanta,pero al ver que va a la cocina,lo sigo.
-Quédate aqui,nena,ahora vuelvo.
-Es que es mi casa.
Digo, en vano porque ya ha cerrado la puerta y ha desaparecido en la cocina.
Al rato vuelve con dos copas en una mano y la botella de champán en la otra.
-Lo que me ha costado encontrarlo.
Se sienta y llena las dos copas,me da una.
-No bebo.
-Por un día...
No bebo,pero está claro que lo voy a necesitar. Me bebo la copa entera de un sorbo.
No sé cuanto ha pasado, el tiempo suficiente para que ya tenga las mejillas rojas y una sonrisa que ni quiero poner. Pero la pongo. Ahora en mi, en alcohol está al mando. Le miro y siento ganas de besarle. Pero no.Se abalanza sobre mi,dejando antes la copa en el suelo, se quita la camiseta y me quita a mi la mía, me quita el sujetador y me retuerce el pezón, lo que hace que gima. Tengo la carne de gallina ante su contacto.
-Quiero que seas mía.
Me susurra y me dice cosas demasiado sexys, no sé desde cuando eso provoca efecto en mi. Sus dedos se cuelan por el elástico de mi pantalón de pijama,y,luego por el de mis bragas. Juega con los dedos y los mete y los saca, primero rápido luego lento. Quiere que sufra,y,no voy a permitirlo.
-Más.-Digo desesperada,pero es el alcohol el que habla.
En un rato,donde su lengua ya ha jugado por todo mi cuerpo siento que me agarran por los muslos y me transportan. Cuando me doy cuenta estoy en la cama. Y el está encima, moviendo sus caderas para crear más fricción,noto como se exita más cuando se la cojo con la mano y le toco. Gime y grita mi nombre.
Cuando va a entrar dentro de mi me despierto y grito,el lo toma como un avance,como si quisiera continuar,pero,lo que no sabe es que el alcohol ha desaparecido de mi. Me suelto rápidamente y me aparto tapándome todo lo que puedo con la sábana.
-Nena...
-¡Fuera!
Grito sollozando.
-¿Qué?
-¡Que te vayas!
Y lo que no me esperaba, es que cogiera su pantalón y su ropa y se fuera. Me tumbo desesperada en la cama y suspiro, tapándome los ojos,pensando que quizá si los cierro me olvide de todo esto.
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Sueños perdidos.
Romance¿Qué pasa cuando todo lo que tenías planeado cambia?¿Cuándo algo o alguien es el causante de tu felicidad o desgracia y no puedes vivir sin él?¿Cómo le olvidas? Es cómo olvidar respirar, porque él para mi era algo parecido. Sarah y Maid. Maid y Sara...