El chico de las estrellas. (borrador)

¿Fue un sueño?

¿Anoche sucedió lo que creo?, ¿Realmente hable con la estrella?

Recuerdo algunas cosas de las que hablamos, él dijo una frase antes de que me duerma que aún resuena en mi memoria ''Me gusta el espacio, no hay problemas aquí, no hay menosprecios, no hay caos, porque en el espacio no hay sentimientos. '' ¿Él no siente nada? ''tonta, tonta Naima, es una estrella, ¿Cómo sentiría?'' una mínima parte de mi aun creía o estaba esperanzada en que fue real y en el que el si estuvo allí toda la noche.

Mire a mi alrededor, estaba en el lugar de anoche, pero, de día era menos impresionante, era más normal, una arboleda, césped, flores en algunos lados, no muy interesante, debería volver a casa, ya suficiente con que anoche no llegue, por hablar con una estrella, si no es que lo soñé todo.
Camine el largo trayecto escuchando música por mis audífonos, no preste atención a la letra, de seguro era típicas canciones tristes que almacenaba en mi móvil.
caminando por el sendero del parque vi a un chico, era joven, quizá unos dos años menor que yo, él estaba mirando unas flores, tulipanes, me parecía conocido, no recuerdo de donde, solo lo sentí, pero no le encontré respuesta por lo que lo termine ignorando y seguí a casa.
Cuando llegue, mi familia estaba en la sala, desayunaban, como una hermosa farsa de familia feliz europea.
- ¿Dónde estabas?- dijo mi padre con un tono enojado mientras sostenía su café- pensamos que al menos nos llamarías,

-solo me quede en la casa de Cress, y mi móvil no tenía carga, sin darme cuenta anoche se nos pasó la hora hablando y cuando lo note ya era tarde, mi celular estaba muerto así que solo nos fuimos a dormir, ya está, nada peligroso, nada de fiesta, solo me quede allí.

-Mas te vale que sea la verdad- dijo pensativo- siéntate que tu madre hizo te por si venias, y has tostadas en el horno.

-Gracias, pero mejor voy a mi cuarto, necesito terminar unas cosas.-dije dirigiéndome a mi habitación.

-Naima, espera- soltó mi hermano cuando estaba a punto de entrar por el pasillo a mi pieza.- ¿puedo quedarme contigo?, aquellos dos están molestos y si me quedo allí temo que saldré lastimado por una tostada...

-Mmm, está bien, si te quedas callado..- mi hermano sonrió y me siguió,

Mi hermano era como mi amigo, él tiene un año menos que yo, 15, a él podía contarle cosas y el me confiaba las suyas, con nuestros padres no se podía dialogar por ayuda por lo que solo éramos nosotros.

Pero, hoy no quería hablar, solo quería soñar, tratar de recordar lo cálido de anoche, y lo inexplicable que fue. Que manía tenemos los humanos por querer encontrar una explicación para todo, bueno al menos yo si quería encontrar una, no podía ser real, no lo era de seguro, quizá si esta noche vuelvo no pasaría lo mismo, quizá solo fue un sueño, a causa del estrés y de todo lo que ha pasado me invente que una estrella me consolaba con sus cálidas palabras desde el frio universo, pero... una parte de mi aun desea que haya sido real.
Pasamos toda la mañana y parte de la tarde con mi hermano hablando a veces de cosas sin sentido, huyendo de los problemas de la zona de guerra que se libraba en la sala, los gritos de mama, las quejas de papa, todo resonaba en las frias paredes. Y aunque todo eso pase, yo solo podía concentrarme en el misterioso hecho de ayer, ya me estaba obsesionando...
-¿Naima?- mi hermano me quito de mis pensamientos.- ¿Qué te sucede?, estas rara desde que llegaste, estas distraída, solo piensas y me respondes tarde a mis comentarios...-dijo este mirándome con un tono de preocupación,

-No es nada pequeño, es solo que me cuesta estar en la tierra hoy, siento como si estuviera en las nubes, no puedo poner los pies al ras del suelo.
-oh, esta bien, pero, trata de aterrizar, yo me aburro aquí solo, además de que anoche me abandonaste y no me fio de que hayas ido con Cress.

-No fui con ella, fui a mi lugar,

-Lo supuse, ¿te dormiste allí?, es raro que no hayas muerto de frío, en la madrugada todo helaba.
-Supongo que donde estaba no sentí el frío.
-No quiero saber porque. -Dijo riendo-
-ay no... no hice nada raro, idiota.
De pronto sonó el celular de él, se alejó y comenzó a hablar con alguien, por lo que oí es que iba a salir, al fin quedaría sola.
Mi hermano se despidió y salió, yo solo aproveche para ser ''libre'', me tumbe en la cama y comencé a trazar lazos frágiles en mi mente, cree un dibujo en mi mundo de cómo podría ser la estrella, por lo poco que sabía de él, era muy tímido, bueno, cálido, dulce, pero a la vez reflejaban sus palabras cosas como: temor, frialdad, fragilidad...

Mire por mi ventana, atardecía,me perdí dibujando en papel imaginario por horas, pienso al ver por el cristalque las personas estamos hechos de amaneceres y atardeceres, de esas incandescentesmaravillas, tan lejanas pero al mismo tiempo tan presentes frente a nosotros, resonando en nuestra memoria diaria, en nuestros ojos su esplendor.

Quisiera poder volver a mi sitio, aunque, ya pase la noche allí, y mañana debería ir a la escuela... Pero aun quiero saber que paso con el chico estrella, si era real, si lo soñé.

-Solo desearía que fuese real, por mas extraño que suene-dije mirando por la ventana a la puesta de sol- Quiero que las estrellas sonrían otra vez, quizá pueda verlo sonreír otra vez.