Soles Rojos

6.- ¿Amor a primera vista?

Ambos se miraron largo rato, logrando que Setsu y Kasamatsu intercambiaron una mirada cómplice, tal parece que Akashi tenía razón.

-Ejem-Un doncel pelinegro apareció detrás del chico pelirrojo, más bajo con parte de la cara cubierta por el pelo, su ojo visible era gris y tenía un lunar debajo del mismo, era alto pero no tanto como el pelirrojo y su piel era clara-Taiga, si te le quedas viendo así no llegaremos nunca a casa-

-Tatsuya!-Kagami se sonrojo hasta las orejas

-Mucho gusto-se presentó el pelinegro-Soy Himuro Tatsuya hermano de Taiga-

-Su hermano?-por que Akashi no les dijo

-Si adoptivo-Contesto el pelinegro

-Bueno lo siento-El pelirrojo se rascaba la nuca nervioso-Soy Kagami Taiga-Su sonrisa era deslumbrante 

-Kise Ryota-le devolvió el saludo

-Kasamatsu Yukio-Le dio la mano 

-Tsuruga Setsuka-

-Mucho gusto-Himuro también estrecho sus manos

-Bueno hay que irnos o el viejo se enojara-Kagami Himuro les ayudaron con sus cosas mientras observaban a su alrededor todo era muy vivo a pesar de ser temporada baja. Aún así no dejaba de lanzar miradas al varón que platicaba con sus compañeros y con él tratando de conocerlos, era guapo, si, cuerpo de escándalo, obviamente por el ejercicio del juego, alto, de ojos de fuego y con una calidez propia de un cálido sol del atardecer, su sonrisa le hacía latir el corazón como en un maratón, y sus constantes miradas le hacían enrojecer.

"Un momento" Pensó al reconocer el sentimiento cuando unos aleteos se presentaron en su estomago. "¿Me enamore? ¿tan rápido?, Aún después...."

Su pensamiento y agradables sensaciones se detuvieron al reconocer que era demasiado pronto, a penas había salido de una relación, pero las sensaciones eran más intensas que cuando estaba con Aomine, eran más....

-Kise-Kasamatsu interrumpió sus pensamientos

-Si sempai-preguntó dudoso

-Sube al auto de una maldita vez-El pelinegro y sus acompañantes esperaban que subiera a un Volvo del año, sonrojado al ver que estaba muy metido en sus pensamientos como para notar que debían seguir su camino, entro apresurado ante la mirada del pelirrojo, que al verle le regalo una sonrisa haciéndole sonrojar aún más. En silencio todos subieron y viajaron rumbo a su nuevo hogar, el viaje fue tranquilo, incluso no hubo trafico, al llegar la casa era grande, y de arquitectura moderna, un hombre de cabellos negros y ojos rojos idénticos a los de Taiga , alto como el tigre y con piel algo bronceada, a su lado una joven de cabello rubio, lentes de montura roja y ojos verdes, buen cuerpo y alta, esperaban enfrente de la puerta de la casa ambos con una sonrisa.

-¡Bienvenidos!-Dijeron a la vez mientras les daban un fraternal abrazo

-Gra..gracias-Kise les sonrió, al igual que sus amigos

-Soy Kagami Sora-Se presento el pelinegro-Ella es Alexandra Garcia -Señalo a la mujer a su lado que les regalo una radiante sonrisa.

-Bueno, bueno adelante que se nos hará de noche aquí a fuera-La rubia exclamo alegre-Vamos, vamos-Entraron la estancia era luminosa, grande y de buen gusto colores arena, madera y tonos claros gobernaban, las olas se escuchaban como un murmullo lejano, mientras las cortinas largas y blancas semi-transparentes ondeaban a la brisa, hermoso y a la vez relajante.

-¿Que les parece?-Pregunto el Señor Kagami

-Es hermoso-suspiro Kise

-Como Guam-Suspiró Setsu

-Es fantástico-sonrió Kasamatsu

-Bueno esta será su nuevo hogar-Su sonrisa era tan cálida como la de su hijo-Adelante escojan sus habitaciones-En cuanto dijo eso Kise salió disparado junto con Setsu, Kasamatsu los siguió un poco más tranquilo, sacando risas de los presentes.

-Oye Taiga-Alex se acerco con una sonrisa de dobles intenciones-No le quitas los ojos de encima al chico ¿Eh?-le dio unos codazos suaves en son de molestarlo

-No, no es cierto Alex-El tigre estaba rojo por lo dicho de su entrenadora

-Lo es Taiga-Habló Himuro con una sonrisa también insinuante-Nunca te vi poner una mirada en alguien-

-Hijo Es buen partido-Su padre se unió a molestarlo 

-Yo...no...-El tigre estaba a un más avergonzado 

-Vamos-Alex le abrazo por el cuello-Es bastante guapo-

-Pero...-

-Amor a primera vista-Su padre le sonrió

-¿A...a..amor?!-El tigre se puso (si era posible) aún más rojo

-Sip-Alex sonreía

-Caíste Taiga-Río Himuro

-Aunque no me quejo-Dijo su padre 

-Pero...-Miró escaleras arriba-No se si me acepte-Bajó la mirada, su padre entendió

-Demuéstraselo hijo-seriamente le habló-El esta herido, si, pero si le demuestras que no eres como el idiota que lo dejó, si le das tu amor te corresponderá, con el tiempo lo hará-Su padre le alboroto el cabello-Hijo lucha!-ante esto el tigre se animo, su padre tenía razón.

-Gracias!-Su sonrisa relumbro y en sus ojos se mostró decisión, el no lastimaría al chico, que sin duda le robo el corazón en cuanto le vio, lo cuidaría al igual que el bebé que llevaba, no le importaba, cuidaría al bebé como suyo, a ambos, les daría todo el amor que necesitaran, con estos pensamiento subió escaleras arriba, mientras su familia le daba su apoyo.

Japón

Aomine caminaba a una cena ejecutiva, a su lado su prometida hablaba y hablaba, recordandole a cierto rubio, le molestaba sin duda y cuando le dijo a su prometida que se callara lo hizo con mucha agresividad. ¿Que tenía el mundo en contra de él?, si había abandonado al rubio que tal parecía no le necesitaba, solo era un deseo carnal y nada más, no sintió nada al escuchar que sería padre, solo asco y desprecio, oh eso creía, sin duda el destino juega con nosotros y sobre todo la vida es realista, nos arroja nuestras equivocaciones a la cara, siempre mostrándonos que  la felicidad es decisión nuestra.