Me desperté de nuevo, y por alguna extraña razón estaba en mi cama. Eran las doce de la mañana, y afuera de mi cuarto no se escuchaba nada, así que decidí salir a ver si había alguien. Abandone mi cuarto y silenciosamente me acerque a la habitación de Castiel a inspeccionar si la chica de Ayer seguía ahí. Estuve unos pocos minutos poniendo la oreja en la puerta, pero no llegue a oír nada por lo que pensé que ella ya no estaba aquí.
Fui a la cocina y ahí pude encontrar una nota, que iba dirigida al pelirrojo.
"La noche de ayer fue espectacular. Ojalá repitamos de nuevo, aquí te dejo mi número"
Un poco más abajo venía el número de la chica y además su firma, que por lo que pude ver se llamaba Laeti. Tire la nota a la papelera y después, me dirigí a sacar la basura. Al volver, me puse a hacer mi desayuno, y cuando estaba a punto de acabar de cocinar, salió el Pelirrojo de su habitación.
-Buenos días nena, ¿has dormido Bien?-dijo de buen humor.
-No tan bien como otros, ¿te lo pasaste bien ayer verdad?
-Se podría decir que si. ¿Este desayuno es para mi? Vaya, de vez en cuando tienes un detalle conmigo-respondió.
Castiel se sentó delante mía y empezó a comer. Cuando cogió el tenedor me fije en su muñeca, la cual tenía la pulsera que le di. Me sorprendió que la tuviese puesta, porque hubiese jurado haberla visto encima de la mesa junto al vaso roto.
Ante la duda, me acerque al lugar donde creí ver lo de esta mañana, pero extrañamente solo vi el vaso roto.
-¿Qué demonios estas haciendo?-soltó el Pelirrojo.
-Nada, solo estaba... Recogiendo el vaso. A ver si la próxima vez tenéis más cuidado-dije estupefacta.
Cuando termine de coger el cristal lo Tire al vidrio y me volví a hacer el desayuno, pero Castiel ya lo estaba preparando por mi.
-Ya sabía que el desayuno era tuyo-dijo.
-Si lo sabías entonces, ¿para que te lo comes? ¡Sabes muy bien que con la comida no se juega!
-Ni contigo tampoco. Perdona si ayer no te deje dormir por traerme una chica a casa. No quería molestarte-respondió un poco apenado.
-Bueno, al menos te disculpas. Ahora me muero de sueño por tu culpa, además de que me estas volviendo loca. Veo cosas que no se si han pasado de verdad o no.
-¿Ya estas cayendo en mis redes eh? Veo que al final va a ser mejor conquistarte siendo sincero.
-¿Nunca te han enseñado que la convivencia y las relaciones se basan en la confianza y sinceridad?-dije.
-No. La verdad, es que nadie me ha enseñado a vivir la vida, y mucho menos a confiar-finalizó.
A pesar de pensar varias veces sobre lo sucedido, sigo sin saber si la escena que antes había presenciado de la pulsera con el vaso roto, era una pesadilla o la cruda realidad.
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Quiero darles las gracias por comentar tan rápido después de haber subido el capítulo. De verdad, me agrado un montón ^^. También agradecerles por comentar y votar, son geniales 😉😉😍😍
