Sakura POV
—Sakura, ¿cómo te… — se queda inmóvil al ver la posición en la que estamos — ¿Qué demonios está pasando aquí? — su cara de pronto se vuelve roja del coraje. Eriol y yo reaccionamos y nos levantamos rápidamente de la cama, acomodando nuestras ropas.
—No es lo que piensas — trata de explicar Eriol.
— ¿Qué no es lo que pienso? — Touya eleva el tono de su voz.
— ¿Qué está pasando? ¿Por qué tanto escándalo? — llega Kaho apresurada. Nadie le contesta. Así que ella nos voltea a ver, buscando la respuesta. El vernos a Eriol y a mí, con la misma ropa de ayer, los labios un poco hinchados por el beso y las mejillas sonrojadas, aclara su duda. Definitivamente piensa, como mi hermano, que pasó algo. Luego tendré que arreglar las cosas también con ella. Pero por ahora el que importa es mi hermano.
—Touya, nosotros… — comienzo pero él me corta.
— ¡Tú! — Señala a Eriol — tenemos que hablar — y se da media vuelta para salir de la habitación dando un portazo. Eriol me voltea a ver un poco asustado.
—Ve con él — le animo. Me pongo de puntitas y le doy un breve beso, tratando de tranquilizarlo. Él asiente con la cabeza y se va tras de Touya.
—Sakura… — comienza Kaho, pero yo le corto explicándole todo de golpe.
—Te juro que no pasó nada. Solo dormimos — le digo rápidamente.
—Está bien. Les creo — me da una sonrisa.
— ¿En serio? — pregunto un poco dudosa.
—Sí, en verdad. Confío en ustedes — posa una mano en mi hombro — Además se que Eriol nunca se propasaría contigo — Tiene razón, Eriol siempre me ha respetado — Es un caballero ante todo.
—Sí, tienes razón — es algo de las muchas cosas que amo de él.
—Es mejor que te des un baño. Tenemos que ayudar a Tomoyo con la preparación del baile — ¡Es cierto! El baile es hoy. Se me había olvidado por completo.
—Voy que corro — y me voy hacia el baño, pensando qué es lo que están hablando Eriol y mi hermano.
Eriol POV
¡Dios Santo! ¿Cómo me pude meter en este problema? Si no me hubiera quedado dormido, Touya nunca se habría dado cuenta de nuestro pequeño secreto. Pero ahora tengo que pagar las consecuencias.
Pero la verdad, nada puede opacar le felicidad que siento de amanecer con Sakura entre mis brazos. Una sonrisa se dibuja en mi cara sin que yo pueda evitarlo.
Veo a Touya entrar a una habitación vacía. Suspiro. Tengo que aclarar las cosas con él. Entro a la habitación y cierro la puerta tras de mí, como la última vez que hablamos. Me vuelvo a él para comenzar a hablar, pero entonces su puño se estampa contra mi cara, haciéndome caer al piso con el labio partido y la sangre brotando de él.
—Eso es por intentar propasarte con Sakura — me dice Touya enojado. Definitivamente no me esperaba algo como esto de parte de él. Pero por lo menos puede servir para que saque su coraje y se tranquilice, y así podamos hablar.
—No pasó nada — le digo poniéndome de pie con dificultad. La verdad me maree un poco — Nunca me propasaría con Sakura.
— ¿Entonces qué hacías en su cuarto, con ella encima de ti, besándose? — exige Touya. Definitivamente eso era difícil de explicar. No tenía palabras las palabras adecuadas.
—No es la primera vez que pasa — le digo y al instante me arrepiento.
— ¿Qué? — su rostro se vuelve a poner rojo y entonces se abalanza hacia mí, dispuesto a volver a golpearme. Logró bloquear su ataque, pero él intenta de nueva cuenta golpearme, así que como defensa, le doy un puñetazo en la mandíbula, mandándolo al otro lado de la habitación. Se queda tirado en el suelo, tratando de recuperarse. Aprovecho esto para comenzar a hablar.