Sakura POV
Todo está oscuro, no logró recordar que fue lo que me paso. Pequeños destellos se hacen presentes en mi mente. Estaba en el parque... en los columpios... recordando... un dolor muy fuerte en el pecho, una voz que decía mi nombre y... ¿él tomándome entre sus brazos? No puede ser.
Debió de haber sido un sueño, es irreal que él se encuentre aquí después de tanto tiempo, debe ser mi imaginación jugándome una muy mala pasada.
-Sakura- pero esa voz... es la misma del templo...su voz. Aún debo de estar inconsciente, perdida en el abismo que se ha convertido mi mente.
Toman mi mano delicadamente y siento un cosquilleo recorrerme todo el cuerpo.
Comienzo a abrir mis ojos poco a poco acostumbrándome a la luz. Estoy en mi habitación. ¿Cómo llegue hasta aquí? No creo que pueda encontrar una respuesta en este momento, así que me limito a tratar de observar a mí alrededor levantándome un poco hasta quedar sentada.
Trato de enfocar mi vista hacia un costado de la cama y veo una silueta de rodillas en la orilla de la cama observándome. Mi corazón se paraliza por un momento cuando lo reconozco. Es...
-Eriol- susurro y lanzo mis brazos alrededor de su cuello en un abrazo tan rápido que él pierde el equilibrio y cae de espalda, conmigo encima de él. Pasa sus brazos alrededor de mi cintura y yo escondo mi rostro en el hueco de su cuello por un segundo, sintiendo la calidez de su cuerpo que hace que me sienta segura.
-Al fin despertaste- me dice muy cerca de mi oído lo que provoca un escalofrío en mí y una sonrisa en él. Me separo solo un poco para poder observar su rostro.
-En verdad estas aquí- le digo acariciando su rostro con mis dedos para cerciorarme de que no es un sueño o una ilusión, que vino desde Londres para estar aquí, conmigo, en estos momentos, cuando más lo necesito.
-No podía dejarte sola- mientras limpiaba con sus pulgares unas lagrimas de mis mejillas que yo no supe en qué momento deje caer.
-Me hiciste mucha falta-
-Lo sé- y me acercó un poco más a él. No supe cuanto tiempo nos quedamos ahí, tirados en el piso de mi habitación, abrazándonos.
La sensación de estar entre sus brazos me produjo un sentimiento de paz y seguridad que hacía mucho tiempo no sentía. Hasta ahora me doy cuenta que lo extrañé más de lo que me hubiera imaginado.
Hasta que escuchamos unos pasos por el pasillo acercándose a mi habitación, nos separamos y Eriol me ofrece su mano para ayudar a levantarme. Y entonces se abre la puerta de mi habitación.
-Vaya ya despertaste- dice mi hermano entrando a la habitación y dejando una bandeja de comida en el escritorio -¿cómo te sientes?-
-Mejor- le respondo dirigiéndole una pequeña sonrisa.
-Tienes que alimentarte bien, no es normal que te desmayes a cada rato- su rostro refleja preocupación
-No te preocupes, de ahora en adelante me cuidaré más- le dije tratando de tranquilizarlo. Touya me sostiene la mirada solo un momento y suspira.
-Por cierto- dice Touya dirigiéndose esta vez hacia Eriol- Muchas gracias por traer a Sakura a casa y por ofrecerte voluntario para cuidarla-
-No hay de que- dice Eriol con una sonrisa- siempre es un placer ayudar a Sakura- el tono con el que dijo esa última frase me hace sentir que hay algo más detrás de esa frase, pero por ahora no quiero pensar mucho en eso.
-Bueno los dejo solos. Si necesitan algo no duden en hablarme, estaré abajo- dice mi hermano y sale de la habitación. Eriol y yo nos quedamos un momento en silencio.
- Vamos, siéntate en la cama, necesitas comer- me dice Eriol mientras me siento en la cama y el va por la bandeja de comida que dejo mi hermano en el escritorio y me la acerca.
-y ¿Cuándo llegaste Eriol?- le pregunto tratando de sacarle un poco de conversación
-Hace unas horas-
-Nos hubieras avisado y hubiéramos pasado por ti al aeropuerto- seguí comiendo
-Está bien. No te preocupes. Además fue un viaje no planeado, tenía que venir aquí cuando antes para un asunto urgente- dice y se sienta en el borde de la cama
-Ya veo, y ¿Ctuál es ese asunto tan urgente?
-Tú- suelta de pronto
-¿yo?- pregunte muy sorprendida por ser yo el motivo que lo había traído desde tan lejos.
-Si bueno, algo muy relacionado contigo- clava su mirada en mis ojos y siento como si pudiera traspasarme con ella- al parecer hay algo que no me has contado en tus cartas y ese "algo" es lo que te mantiene en esta situación actualmente- mi sorpresa es mucho mayor al saber que él está enterado de mi situación
-¿Cómo es que...- no termino de formular mi pregunta cuando alguien entra de golpe a la habitación. Eriol se levanta rápidamente de la cama.
- ¡Sakura! ¿Te encuentras bien?- me pregunta una muy preocupada Tomoyo
-Si no te preocupes, estoy muy bien- trato de tranquilizarla y ella suspira aliviada.
-Llame aquí y Touya me dijo lo que pasó- comenzó Tomoyo y pronto se dio cuenta d?9 e la presencia de Eriol y se quedo asombrada.
- ¿Hiiraguizawa? Que sorpresa- dice Tomoyo
-Daidouiji que gusto volver a verte-
-¿Cuándo llegaste?
-Hace algunas horas-
- Pero ¿Cómo te enteraste tan rápido de lo de Sakura?
-Bueno salía del templo Tsukimine cuando vi a lo lejos a Sakura que comenzaba a desmayarse, así que corrí hasta ella justo a tiempo antes de que cayera al suelo.
- Él me trajo hasta acá Tomoyo. Por cierto- dirigí mi mirada hasta Eriol- muchas gracias por todo- le tomo la mano y nuestras miradas se encuentran. Nos perdemos por un momento en esta conexión que hemos creado.
- y ¿has venido solo?- pregunta Tomoyo rompiendo nuestra conexión
- No, he venido con Spinel, Nakuru y Kaho- al escuchar sus nombres me dan muchas ganas de verlos, pero por ahora tendré que esperar.
-¿en donde se están hospedando?- es mi turno para preguntarle
-Bueno Kaho insistió mucho en que nos quedáramos en el templo así que ahí estamos
- Ya veo-
Pronto se escucha que golpean suavemente la puerta y murmuro un adelante y entra Kero seguido de Yue.
-¿cómo te encuentras Sakura?- pregunta Kero
-Mejor, muchas gracias Kero-
-Ahora si Clow cuéntanos que te trae por acá- dice Yue y no me sorprende la pregunta tan directa que le hac y 6 ye a Eriol- porque no es una coincidencia que estés justamente aquí
-Las coincidencias no existen...- comienza Eriol
-... Solo lo inevitable- término la frase por él y de nueva cuenta nuestras miradas se encuentran creando un ambiente muy misterioso en la habitación.
Continuara....