Touya POV
Había salido un rato de la casa para dar un poco de privacidad a Sakura y a sus amigos. Supongo que si ese chico misterioso llamado Eriol había venido desde Inglaterra, donde se suponía que estaba, hasta aquí, había algo muy importante que tratar y no me sorprendería que fuera por Sakura. Por un momento, cuando llegó con ella en brazos, pensé que le había hecho algo, ya que él había sido el responsable de los antiguos problemas de Sakura, pero ahora que lo pienso detenidamente creo que sus motivos son siempre de ayudarla.
FlashBack
Era un poco tarde cuando había llegado a mi casa, abrí la puerta y todo era silencio. Pregunte si había alguien y nadie me respondió. Se supone que Sakura ya debería de haber llegado, probablemente se fue donde Tomoyo, no debía de tardar. Acomode mis cosas y me dirigí a la cocina para preparar la cena. Ya había pasado mucho rato y Sakura no había llegado, qué pasará.
Escuche que tocaban el timbre de la puerta, seguro a Sakura se le habían olvidado las llaves, así que me apresure a abrir. Lo que vi hizo que se me cayera el alma a los pies.
El chico, si cuyo nombre no había olvidado era Eriol, traía a Sakura en brazos; estaba inconsciente, pero no se le veía ninguna herida grave.
-¿qué pasó?- pregunté denotando la preocupación en mi voz.
-Vi a Sakura en el parque pingüino y parecía que se sentía muy mal, así que corrí para ayudarle, pero solo alcance a llegar antes de que cayera al suelo desmayada - me explicó rápidamente
No perdí tiempo y le deje pasar indicándole el camino a la habitación de Sakura. Cuando llegamos, depositó a Sakura en la cama delicadamente, como si temiera que se fuera a deshacer en cualquier momento. Esto, debo admitirlo, me sorprendió de sobremanera.
-Bueno te agradezco que la trajeras a casa- le digo, él aún se encontraba inclinado para con Sakura
-No tienes que agradecerme, haría lo que fuera por Sakura- no puedo describir la forma en la que la miró. Será que... sacudí la cabeza para alejar algunos pensamientos
-Creo que llamaré a un doctor para...- comenzaba a salir de la habitación.
-No creo que haga falta- me cortó de pronto, levantándose y enfrentándome por primera vez desde que llegó. Ahí me di cuenta que había crecido, y mucho, y sus facciones eran más varoniles, aunque seguía llevando consigo esa mirada misteriosa y penetrante - creo que el problema de Sakura está muy relacionado con su magia.
-¿Qué es lo que está mal?- pregunté un poco desconcertado
-No lo sé- fijó su mirada en Sakura- pero te aseguró que lo averiguaré y pondré todo mi empeño en repararlo.
Nos quedamos un momento en silencio, ambos mirando como Sakura descansaba en su cama. Aún no había recuperado el conocimiento.
-¿Crees que puedas permitirme quedarme con ella hasta que despierte?- me pregunta de pronto el chico- Claro si no te molesta - no sé qué contestar
-No me molesta, puedes quedarte el tiempo que quieras- después de un momento le respondo- creo que iré terminar la cena para traerle a Sakura cuando despierte- me dispongo a salir de la habitación. Cuando estoy a punto de cerrar la puerta soy testigo de una escena, hasta me permitiría decir, muy tierna; el chico se hincó a un lado de la cama donde Sakura descansaba, le quitó un mechón de cabello de la cara y le susurró:
-Ya estoy aquí, Sakura- al tiempo que tomaba la mano de ella entre las suyas. Sakura como si lo hubiera escuchado sonrió ante estas palabras y se removió un poco.
