Sakura POV
Eriol — corro inmediatamente para llegar a su lado, Kaho hace lo mismo desde la distancia. Me tiro de rodillas cuando estoy junto a él.
—Eriol — lo vuelvo a llamar, pero no me contesta, está inconsciente. El llanto y la desesperación, hacen acto de presencia.
Examino su cuerpo. Tiene varios cortes esparcidos en la cara y en el torso, nada de gravedad parece. No puede ser que yo le pudiera haber hecho esto.
—Debemos llevarlo inmediatamente a la mansión — dice Kaho al otro lado de Eriol, apoyada en una rodilla.
— ¿Pero cómo? — le pregunto. El estado en el que me encuentro, no me deja pensar claramente.
—Primero necesito que te calmes Sakura — me pide Kaho, pero la verdad me es imposible.
— ¿Qué pasó? — pregunta Yue llegando como caído del cielo.
—Eriol no pudo esquivar el ataque de Sakura — explica rápidamente Kaho, viendo que de mi boca, no salían más que sollozos — ¿Nos podrías ayudar a llevarlo a la mansión?
— ¡Eriol! — le vuelvo a llamar más desesperadamente, acunando su rostro entre mis manos. Él se mueve un poco, haciendo gestos de dolor.
— ¡Ahh! — se queja Eriol empezando a abrir los ojos. Siento una sensación de alivio recorrerme todo el cuerpo. Cuando abre completamente los ojos, lo _ que hace es buscarme con la mirada — Que fuerte te has vuelto, Sakura — dice intentando reír pero en vez de eso se le escapa un quejido de dolor. Tapo mi boca con mi mano intentando disminuir los sollozos, pero Eriol se da cuenta.
—Sakura, calma, ya pasó. Estoy bien — me dice Eriol limpiando mis lágrimas con sus pulgares. No le contesto nada, no puedo contestarle nada, en parte por mi llanto y por otra por la culpa que siento.
—Eriol, tenemos que llevarte a la mansión para poder revisar tus heridas — le dice Kaho.
—No es nada, en verdad, estoy bien — le dice Eriol.
—En verdad, necesito curar tus heridas — le dice Kaho con suplica.
—Está bien — dice por fin Eriol.
— ¿Puedes levantarte? — pregunta Yue.
—Eso creo — le dice, le tomo la mano para ayudarlo. Se levanta lentamente apoyándose en el árbol, pero cuando se pone de pie completamente, pierde el equilibrio y yo trato de ayudarlo, lo que provoca que ahora yo me encuentre entre el árbol y el peso de su cuerpo. Lo abrazo con todas mis fuerzas y traicioneras lágrimas surcan mis mejillas. Escondo mi rostro en su cuello para que no pueda ver mis lágrimas. Desde ahí, puedo sentir el latir rítmico de su corazón y su respiración acompasada, haciéndome cosquillas en mi oído y mi cuello. Su sola presencia me reconforta.
—Sh, tranquila — me dice Eriol, acariciando mi pelo lentamente. Lo aferro un poco más a mí, lo que ocasiona que suelte un quejido de dolor.
—Lo siento, perdóname Eriol, yo… — comienzo a decir pero el coloca un dedo en mis labios.
—He dicho que no pasa nada — y me sonríe.
—Será mejor que te cargue para llegar más pronto a la mansión — le dice Yue a Eriol. Me había olvidado por completo de su presencia. Yue le ayuda a Eriol a recargar todo su peso en su hombro y emprender vuelo rumbo a la mansión, yo me quedo embobada viendo por donde desaparecieron.
—Sakura, será mejor que nos demos prisa — me dice Kaho posando su mano en mi hombro.
—Si — le digo y nos vamos casi corriendo a la mansión. Llegamos, en lo que se me hizo, el recorrido de regreso más largo de toda mi vida