Capítulo seis: Fallsblack

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Subí al auto, enojada. Encendí el motor y puse marcha atrás. Debía irme, Jesús era muy temprano, tenía sueño, procuré mantenerme atenta a la calle porque no quería tener otro accidente ¿Cómo pude ser tan estúpida? Debil. Esa era la palabra correcta, James sabía como controlarme. Debía probarle que ya no me controlaría más...

Conduje por un largo rato sin destino, estaba odiandome ahora mismo, por haber dormido con él y por querer volver a casa y acostarme a su lado para dormir abrazándolo, odiandome.
Frene en el semáforo en rojo, no estaba yendo a ningún lado, pero al mirar a mi costado un edificio grande apareció a mi vista. Fallsblack parecía un poco abandonado. Me tomé unos segundos antes de doblar la calle y frenar delante del edificio.

James se volvería loco.

Y eso era lo que quería.

Pero no podía aparecer así sin más. Estaba desarreglada, por suerte mis maletas habían quedado en el auto.

*****

Luego de media hora sentada en el auto intentando vestirme adecuadamente, salí balanceándome y camine hacia el edificio. Dentro le pregunte a una secretaria si tenía un baño "público"... por suerte me tuvo piedad y me dijo dónde estaba.

Estaba lista para hacer negocios.

Realmente se notaba que estaba yendo a la quiebra, a diferencia del edificio de James este estaba casi desierto. Caminé a la recepción y la misma señora que me había enseñado el baño me miró confundida.

- Hola, soy Mia Maslow. -ella abrió los ojos un momento y levantó el interlocutor para anunciarme. - Yo...

- Lo sé, el señor Schmidt se encuentra en el piso quince. -ella me señaló el ascensor mientras me sonreía. Esto estaba siendo más rápido de lo que pensé. -

- Gracias .-sujete mi bolso y caminé hacia los ascensores, apreté el botón de uno y en dos segundos las puertas se estaban abriendo.-

Ya estaba aquí y no podía arrepentirme. Pero sin el dinero no creo que a Schmidt le interese mucho lo que tenga que decirle. Tenía un par de acciones que James me había dado, tal vez podía venderlas... o también podía pedirle dinero prestado, pero eso implicaba que le iba a deber una, y conociendo a James se la iba a cobrar de cualquier forma, más si se entera para que era ese dinero. El ascensor abrió sus puertas y casi me agarra un infarto al ver a Kendall del otro lado, tanto fue el susto que pegue un salto y me patine, Kendall me sostuvo cerca.

Que manera de conocer a los jefes.

- ¿Estas bien? - era muy guapo, a decir verdad, pero mis ojos ya estaban clavados en otros ojos de color hazel. - Lo siento no quise asustarte.

- No, esta bien. Me asusto con facilidad .- el se río con esa idiotez que dije, y dos hoyuelos se formaron en sus mejillas. -

-¿Te envío James o viniste tu a escuchar mi propuesta? - él comenzó a caminar, yo lo segui de muy cerca, observando todo... las "paredes" eran de vidrio. El entró en una sala y me ofreció con su mano un asiento y luego se sentó él. Abrí la boca y luego la cerré, había venido por mi cuenta, sí, sin embargo queriendo demostrarle algo a James. - Cualquiera que sea la respuesta esta es mi propuesta. Cincuenta, cincuenta. Yo ofrezco la mitad y ustedes la otra para sacar la empresa a flote.

- Me gustaría saber por qué se esta yendo a la bancarrota.-dije. -

- En sencillas palabras: me estafaron. El antiguo dueño era un amigo de mi padre y este lo convenció de vendérsela, obviamente agarró el dinero y huyó y mi padre me hizo responsable. - él junto sus manos y las apoyó sobre la mesa.- De cualquier manera puedo sacar esto a flote, solo necesito una mano... o en este caso dos, -dijo pausadamente mientras estiraba su mano y agarraba la mía, a pesar de todo no me sentía cómoda haciendo esto. Amaba a James y no me parecía correcto. - muy delicadas.

Él sonrió y me soltó, yo le di media sonrisa.

-¿Cuanto debería invertir?

- De eso hablaremos después, solo quiero saber que puedo contar contigo.

James se iba a enojar, lo sabía, pero al pensar en todo lo que había pasado no tenía dudas. Y por una vez quería pensar en mí y no en lo que él sentiría.

- Es un trato. -Kendall sonrió y estiró su mano para estrechar la mía. -

- Bienvenida a bordo Mia Maslow.

...

Hola, espero les guste.

140 votos y sigo♡

Gracias por leerme.

XOXO

La Nueva Jefa. -James MaslowDonde viven las historias. Descúbrelo ahora